Evidencias musicales en el portafolio del estudiante

Objetivo:

  • Conocer y comprender los arquetipos formales basados en repetición de secciones.
  • Conocer y comprender la estructuras musicales periódicas
  • Comprender el concepto de polifonía implícita
  • Conocer las características idiomáticas básicas de la escritura para piano
  • Componer pequeñas piezas musicales basadas en la repetición de secciones y el empleo de estructuras musicales periódicas.

Actividad:

  • Escuchar y analizar partituras propuestas basadas en frases y periodos musicales. Por ejemplo, el Vals en si menor Op. 69 No. 2 de F. Chopin.
  • Realizar un esquema con los parámetros básicos de la composición de manera que sirvan de base para la elaboración de una nueva.
  • Escribir una breve composición basada en los parámetros extraídos de la composición propuesta.
  • Difundir una primera versión de la composición a través de Soundcloud, para recibir el feedback de los compañeros.
  • Editar la partitura preparándola para su interpretación.
  • Grabar y preparar la composición para ser incorporada al portafolio personal, si así lo decidiera el estudiante, a final de curso.

Evaluación:

  • Cada alumno conocerá de antemano una rúbrica a partir de la cual evaluará su propio trabajo.
  • Cada alumno, además deberá evaluar a tres compañeros –pudiendo aportar opciones musicales de mejora si fuera necesario.

Incorporación al portfolio:

A final del curso el alumno tendra la oportunidad de incorporar en su portafolio las evidencias que más significativas le resulten. Para ello, tras la realización de esta actividad, realizará lo siguiente:

  • La composición será grabada en la interpretación pública, tras lo cual el alumno almacenará el archivo –ya de audio o vídeo–, al que adjuntará un análisis esquemático de la misma, así como una breve reflexión sobre el proceso de elaboración, lo que ha constituido y aprendido, así como las dificultades que ha encontrado.

e-Portfolio del estudiante de Composición musical. Previsión de dificultades

En otra entrada anterior propuse una plantilla para la implementación de un posible portafolio en enseñanzas profesionales de música, dirigido a estudiantes de composición musical.

Pensando en la elaboración del mismo por éste tipo de estudiantes, preveo las siguientes dificultades:

  1. Falta de tiempo. Los estudios de composición coinciden con el primer y segundo curso de Bachillerato, lo cual reduce el tiempo del alumno y aumenta considerable la cantidad de estrés que ha de sufrir cotidianamente.
  2. Falta de habilidades reflexivas. No tienen experiencia en realizar estas tareas.
  3. Abandono por falta de identificación de un resultado inmediato en la elaboración del portafolio.

La manera de minimizar la primera de ellas sería motivarlo adecuadamente, mostrando lo altamente beneficioso que puede resultar este trabajo para la vida personal del estudiante, además de incluirlo en parte del tiempo de clase y preparar tutoriales sencillos y atractivos.

La manera de minimizar la segunda, la falta de habilidades reflexivas, aparece incluida en parte en el punto anterior: una adecuada guía por parte del profesor en el diseño y propuesta de los pasos.

El punto tercero es relativamente fácil de subsanar, puesto que la propia realidad del estudiante de composición, que ha de enfrentarse en muchos casos a una prueba de acceso a Estudios superiores de música, puede servir de acicate y objetivo para realizar este portafolio. En el caso de que no se vayan a continuar estudios de música, en cualquier caso el alumno habrá de elegir qué camino formativo seguirá. Una adecuada presentación y motivación, así como el adecuado clima de reflexión en el aula, resultarán fundamentales en este sentido.


El e-Portfolio del estudiante de Composición musical en Enseñanzas profesionales de música

En una entrada anterior estuve reflexionando acerca de los elementos que debía tener el portafolio digital de un estudiante de composición en Enseñanzas profesionales de música –a partir de comparar entre sí las posibilidades que ofrecían diversos portafolios digitales libres y gratuitos.

Un esquema de e-Portfolio que pienso que podría resultar útil al estudiante de Enseñanzas profesionales de música podría ser el siguiente, el cual está elaborado a partir de la propuesta de portafolio vocacional de Víctor Cuevas.

  • ¿Cuál es tu sueño?
  • Estudios y profesiones en torno a la música
  • Cuestionarios de orientación
    • Así soy
    • Fortalezas personales
    • Intereses
    • Valores
    • Comportamiento usuales en entornos competitivos
    • Informe de habilidades académicas y musicales
    • Evidencias musicales, análisis y reflexión sobre las mismas
  • Los estudios que me gustan
  • Reflexión
  • Mi decisión
  • Tengo dudas
  • Resumen

En esta entrada reflexionaré sobre las dificultades que podrían encontrar los estudiantes al trabajar en este portafolio, así como propuestas para minimizarlas.


Diseñando el e-portafolio del estudiante de Composición musical

En esta entrada, y como actividad para el curso del INTEF “El portafolio educativo como instrumento de aprendizaje y evaluación”, reflexionaré acerca de la puesta en práctica de un portafolio para el alumnado.

La herramienta propuesta, que compararé con las posibilidades de Mahara y Eduportfolio, es este Portafolio vocacional para Secundaria y Bachillerato. Todas ellas son libres y gratuitas.

Diferencias entre la tecnología utilizada para el desarrollo del Portafolio vocacional propuesto, si lo comparamos con el sistema Mahara y con Eduportfolio

La primera diferencia es que en este portafolio todo está preparado para ser usado inmediatamente, mientras que en Mahara y en Eduportfolio uno tiene que emplear las herramientas para preparar su propio portfolio –Eduportfolio sí que cuenta con la posibilidad de preparar plantillas que distribuir a los alumnos, desconozco si Mahara cuenta con esta opción, aunque supongo que, estando integrado con Moodle, ha de poseerla.

En resumen, la tecnología empleada es del tipo “abrir y usar”, mientras que Mahara, por ejemplo, que es el que conozco, resultan un poco más farragoso y poco intuitivo.

¿Lo podría utilizar con mis alumnos de Composición musical?

Sí, lo podría utilizar con mis alumnos. De hecho, sería lo más práctico, dentro de la filosofía de trabajo de los Objetos de Aprendizaje Abierto: el profesor ya está demasiado ocupado cumpliendo su función como para encima dedicarse a diseñador técnico. Aprovechar los recursos compartidos en abierto es una necesidad en pro de la eficiencia.

Por otro lado, la orientación vocacional resulta, a mi parecer, una tarea pendiente al finalizar los estudios profesionales de música.

¿Qué modificaciones realizaría para aplicarlo con alumnos de Composición?

El objetivo de reflexión y análisis de este portafolio es la propia persona, sus experiencias, sus valores y la elección a partir de sus preferencias.

En el caso de un portafolio dedicado a estudiantes de Composición, el objetivo de reflexión y análisis deberían ser sus creaciones musicales, eligiendo en base a las experiencias de aprendizaje que han tenido el implicarse en ellas, y seleccionando en base a sus preferencias personales, pero también en base a criterios objetivos.

¿Qué elementos añadiría?

Los estudios y profesiones podrían mostrar orientación acerca de las posibilidades formativas y profesionales una vez que se terminan los estudios profesionales de música.

Los cuestionarios de orientación resultan un poco generales en este ámbito y se podrían concretar un poco, focalizándolos en la materia de estudio sin descuidar, al mismo tiempo, la valoración de la persona. De lo más académico a lo más personal, se podría añadir:

  • Además de la reflexión general acerca de como es el estudiante, sus intereses y valores, se podría añadir un cuestionario en el que se objetive su comportamiento general al enfrentarse a una tarea marcada por reglas, como el Test de Marczewski.
  • Interesante resultaría un cuestionario en el que el alumno reconozca sus propias fortalezas personales, tal como el VIA cuestionario de Fortalezas personales ofrecido por la Universidad de Pensilvania.
  • los baremos de calificación (o rúbricas) de las diferentes actividades en las que el estudiante se ha implicado.
  • una estadística que muestre el grado de desempeño en cada uno de los ámbitos de la programación.

El apartado dedicado a estudios que me gustan resulta muy pertinente en relación a los estudios de Composición musical, puesto que, al finalizar las Enseñanzas profesionales de música, con 17 ó 18 años, usualmente, el estudiante se enfrenta a una decisión crítica dentro del sistema educativo.

En la siguiente entrada de este blog presento una plantilla para la elaboración del e-portafolio del estudiante de composición.


Respuesta a “Ventajas y requerimientos (…que no inconvenientes) del uso del Portfolio”

Que hermosa aportación la de este blog. Fundamentada y profunda.

Que ganas de que un día pueda yo llegar a manejar los elementos de este arte que es la educación -que trabaja con elementos mágicos y brillantes que son personas- con la misma elegancia y profundidad que lo hace la autora de este blog.
“Time will tell…”, que dicen los ingleses, sí… pero mientras tanto, está el ardor de la necesidad frente a generaciones que pasan y no pueden esperar a que uno tenga diez años más de experiencia. Como decía Pablo en su carta, es “un sí, pero todavía no”… y en esta tensión, hecha de múltiples intentos mejorables, se va pasando el tiempo y la vida…

Mi esperanza —cada vez más austera, más libre de otras adiposidades, y más pobre… pero también más pura, más centrada y revelando una necesidad más profunda— es que un día llegue a gestionar en mis manos las riendas de la cuadriga, en un cierto Flow state, y sepa dirigir los empujes de sus diversos corceles con la maestría que se apunta aquí, sintiendo que identifico los elementos y sus relaciones y hallar que la interacción adecuada esta dentro de mis habilidades, siendo solo cuestión de concentración y benevolencia.

Solo queda ser humilde y paciente, perseverante. Recoger los resultados del último experimento realizado, reconocer y separar el trigo de la cizaña —el mineral de la mena, lo que se pueda salvar…— y aprovecharlo para volver a plantar el bastón y continuar concentrado en el siguiente paso, sin quitar la esperanza del horizonte.