Danza Macabra

La Danza Macabra de Saint-Saëns es un poema sinfónico basado en un poema de Henri Cazalis. Este poema narra cómo al llegar la medianoche la Muerte aparece en los cementerios y tocando su violín llama a los muertos que bailan hasta el amanecer.

Vector de fondo creado por freepik - www.freepik.es

Destaca el solo de violín de esta obra. El solista tiene una afinación diferente, la cuerda mi se afina como un mi bemol, bajando un semitono esta cuerda. Este efecto se llama scordatura



La grabación es de la Orquesta Sinfónica Juvenil Teresa Carreño de Venezuela con el director Gustavo Dudamel. La solista es Angélica Olivo.




Si queréis saber más sobre esta obra, os aconsejo que leáis la siguiente página. Es del Blog de Lenguaje Musical de Fátima

En otra entrada anterior pudimos escuchar un fragmento del Carnaval de los Animales de Saint-Saëns. Para escucharla, pincha sobre la imagen: 


Espero que paséis un buen puente. ¡Hasta la semana que viene! 

Marcha fúnebre para un cazador

Moritz von Schwind: "Wie die Thiere den Jäger begraben"

Antes de seguir leyendo, observad con atención la imagen que precede estas líneas. Se trata de una xilografía obtenida a partir de un dibujo que el pintor austríaco Moritz von Schwind realizó en 1850: Wie die Thiere den Jäger begraben (Cómo los animales enterraron al cazador). La escena del cortejo fúnebre de los habitantes del bosque llorando la muerte de la persona que estaba dispuesta a pegarles un tiro es de una ironía brutal, acrecentada, si cabe, por el arma del cazador encima del féretro y por los grandes pañuelos que exhiben algunos de ellos tras los cuales es fácil imaginar más de una sonrisa de satisfacción.

Parece ser que este cuadro es la idea extramusical en la que se inspiró Gustav Mahler a la hora de componer el tercer movimiento de su primera sinfonía, una marcha fúnebre para acompañar el paso lento y pausado de los animales silvestres. Sin embargo, la solemne tristeza que se le supone a este tipo de composición y que pretende transmitir el primer tema, expuesto inicialmente por un contrabajo, está aquí entremezclada con varios elementos contrastantes, como unos “saltitos” del oboe, un tiempo de danza, interrumpido a su vez por la llegada de una banda con ritmo e instrumentos típicamente klezmer, y una sección central de carácter más sereno y meditativo.

Concentrémonos ahora en ese tema inicial, una melodía que podríamos definir como caricatura, pues se trata de la muy conocida canción infantil Frère Jacques transformada en un canto lúgubre por ejecutarse en un registro muy grave y en modo menor.

Primer tema del tercer movimiento de la Sinfonía nº1 de Mahler

Al igual que el tema original, esta variación mantiene la estructura de canon, algo que Mahler aprovecha para que el contrabajo sea imitado sucesivamente por diferentes instrumentos, empezando por el fagot, después la tuba y así siguiendo.

En el siguiente vídeo podemos escuchar la interpretación de Gustavo Dudamel al frente de la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles.

La imagen final del vídeo puede resultar un poco frustrante, pues en ella se ve cómo el director hace un gesto para acumular una cantidad enorme de energía que quiere que los orquestales utilicen en las próximas notas, pero cuando llega el momento de máxima tensión y parece que finalmente toda esa fuerza acumulada se va a descargar en un poderoso fortissimo, el vídeo termina. No es un fallo del que lo ha subido: el tercer movimiento está completo, pero por indicación del autor el cuarto movimiento debe seguir al tercero sin interrupción así que si se corta dicha imagen también se perdería la resonancia de las últimas notas del tercer movimiento. Por si os apetece escuchar toda la sinfonía seguida, os recomiendo esta interpretación de Leonard Bernstein con la Filarmónica de Viena. Y si queréis saber algo más sobre Mahler, el mismo Bernstein os lo cuenta en uno de sus Conciertos para jóvenes.

Volvamos a Dudamel. Durante el Festival de Salzburgo de 2009, al frente de la Orquesta Juvenil Simón Bolívar de Venezuela ofreció School for the ear (Escuela para el oído), un concierto didáctico sui generis, pues estaba dirigido a un público adulto. El vídeo siguiente contiene la parte correspondiente a los dos últimos movimientos de la primera sinfonía de Mahler, cuya ejecución es fragmentada por el director para complementarla con algunas explicaciones. El audio es en inglés, pero para entenderlo bastan conocimientos muy elementales de este idioma, debido a que Dudamel emplea un vocabulario muy sencillo y tiene un acento muy marcado por su idioma materno (que es el nuestro). Por si a alguien le puede ayudar, el vídeo también tiene subtítulos en portugués.

Finalmente la versión para el aula, para flauta dulce o canto. Al tratarse de un canon circular, si lo repetimos el mismo número de veces en cada voz, nos encontraremos con el problema de que en la parte final irá languideciendo. Hay varias maneras de evitar que las voces vayan desapareciendo y dejando a la última sola; la que he elegido para esta partitura consiste en terminar todos cuando la primera voz haya completado su repetición del tema, a pesar de que las demás voces no la hayan completado aún.

Luchar y Tocar

Luchar y tocarLuchar y Tocar es el lema de los jóvenes músicos de El Sistema, la mayor y más importante experiencia de educación musical del mundo, cuyo objetivo fundamental es “la sistematización de la instrucción y la práctica colectiva de la música a través de la orquesta sinfónica y el coro como instrumentos de organización social y desarrollo comunitario”.

Ya hablamos de este tema hace algo más de tres meses, cuando José Antonio Abreu, el hombre que ha hecho posible la realización de este sueño, recibió el Premio de Música Polar, citando el documental dirigido por Alberto Arvelo, ex componente de una  de las orquestas del Sistema, que justamente se titula Luchar y Tocar. Ahora tenemos la posibilidad de verlo íntegramente e intentar comprender las dimensiones de un fenómeno que fuera de Venezuela nos tiene entre admirados e incrédulos.

No va a ser muy fácil entender algo que parece imposible, algo que ha conseguido llegar al profundo del corazón a algunos de los más importantes músicos vivientes. En el documental podemos oír el testimonio de algunos de ellos.

Simon Rattle, el director titular de la Orquesta Filarmónica de Berlín, relata el momento en que vio por primera vez “una orquesta en la que los pies de sus músicos no tocaban el suelo, literalmente”, concluyendo con “… si alguien me preguntara dónde está sucediendo algo importante para el futuro de la música clásica simplemente tendría que decir: aquí en Venezuela”.

En otra escena de la película podemos ver una lagrima correr en la mejilla de Plácido Domingo mientras les escucha interpretar el Hallelujah del Mesías de Händel con las lágrimas en los ojos. En seguida declara: “Entré en el paraíso”.

Claudio Abbado, ya director principal de muchas de las más importantes orquestas del mundo y muy implicado en el trabajo con orquestas juveniles, simplemente dijo: “El mundo debería tomar ejemplo de Venezuela”.

Sin embargo, más aún que las palabras de los grandes músicos que aparecen en la cinta, son las palabras y las notas de los pequeños y ya no tan pequeños músicos (como Gustavo Dudamel) que se han formado en el Sistema y su evidentísima pasión por la música lo que pueden conseguir hacernos vislumbrar la importancia de lo que ocurre en Venezuela.

La entrada Luchar y Tocar ha sido publicada primero en educacionmusical.es.

El Sistema: música contra la pobreza y la desigualdad

José Antonio AbreuHace unos días leí con alegría la noticia de que el premio Polar ha recaído este año en José Antonio Abreu. Este auténtico símbolo de la cultura  y de la educación musical añade así este prestigiosísimo galardón a otros de gran importancia, como el Premio Internacional de Música de la UNESCO (1994), el Premio al Sustento Bien Ganado (2001), el Premio Príncipe de Asturias de las Artes (2008) y, finalmente, el TED (2009), que se otorga a las ideas que vale la pena difundir.

Todos estos reconocimiento a la persona, hacia la que siento profunda estima y admiración, son también un gran reconocimiento a la música, la educación musical y la educación integral de las personas a través de la música.

En efecto, la labor que Abreu viene desarrollando desde cuando, en el lejano 1975, fundó la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar, ha dado como fruto un Sistema Nacional de las Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela, más conocido como el Sistema, una red de más de un centenar y medio de orquestas  y un número mayor aún de coros y escuelas que reúnen a más de 250.000 jovenes, la mayor parte de los cuales procede de un ambiente desfavorecido, marcado por la pobreza, el crimen y las drogas. El objetivo principal del Sistema, por encima aún de la difusión de la música, es proteger la infancia por medio de la rehabilitación y prevención del comportamiento criminal.

En el siguiente vídeo, el propio Abreu nos explica sus ideas acerca del poder de la música y de la importancia de una buena educación musical en un TEDTalk de 18 minutos en español con subtítulos en inglés:

Esta fabulosa experiencia ha llegado al cine en por lo menos dos ocasiones: en 2005, con el documental Tocar y luchar, y el año pasado con la película El Sistema.

Y finalmente, para cerrar esta entrada, la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar dirigida por Gustavo Dudamel interpretando el Mambo de West Side Story, de Leonard Bernstein, que, si hemos estado atentos al post de hace unos días, debería sonarnos familiar.

La entrada El Sistema: música contra la pobreza y la desigualdad ha sido publicada primero en educacionmusical.es.