La Bella y la Bestia (Porta) y Camiauryner24: Cuando un vídeo musical nos llega adentro por su letra

Hoy hago un paréntesis muy especial en LBDC. Pocas veces un vídeo ha tenido un espacio más merecido aquí.

Una excepción en esta página porque no es un vídeo cantado, sino "interpretado" y considero que el arte puede y debe estar al servicio siempre de las causas altas, nobles y justas. 

Este vídeo está próximo al millón de visitas, y creo que no merece un millón sino muchos más, por eso os lo comparto.

Como dice uno de sus comentarios: 

"Cami nos demuestra que en la generacion que sigue no van a dejar que ninguna mujer u hombre sufran maltrato por su pareja, sinceramente este video me ha llegado y ha hecho llorar a mi novia asi que solo te puedo decir GRACIAS.  

GRACIAS, no solo porque lo hayas hecho, sino por como has demostrado con el maquillaje que las mujeres no van a dejar que nadie les diga lo que tienen que hacer o con quien pueden o no estar."

Yo también quiero transmitiros ese mensaje: tod@s somos iguales en derechos y libertades. 

Importante remarcarlo, y si se hace a través de una canción, aunque sea en play back, pero con este resultado artístico, teniendo en cuenta su muy joven edad...  bienvenida sea cualquier aportación a una causa tan importante e imperiosa.

¡No al maltrato!

Más información:
Musical.ly: @camiorozcox
Ask: @camiauryner24

Las competencias en educación y formación musical

Subtitulado "La programación didáctica por competencias en los conservatorios y escuelas de música", escrito por mi colega Ana Mercedes Vernia Carrasco, y editado por Letrame, esta publicación es un valioso resumen de las competencias, es decir, el saber hacer que debemos enseñar,  claves o básicas, generals y específicas músicales.

Dentro de las competencias musicales, está todo aquello que un profesor de música debe poder desarrollar en sus alumnos: competencia rítmica, auditiva, vocal, lecto-escritura, comunicativa, corporal, personal y emocional, aprender a aprender, tecnológica y cultural-artística.

La educación vocal es necesaria para los docentes de música (y no sólo de música). Reconoce el canto como elemento fundamental en el desarrollo musical de una persona además de desempeñar un papel esencial en la evolución cultural y la integración social.

Me ha encantado que en Las competencias en educación y formación musical: La programación didáctica por competencias en los conservatorios y escuelas de música (Docencia) se hable también en el capítulo sexto de las competencias que debe tener un docente de música, o sea, no todo buen intérprete sólo por el hecho de serlo, va a poseer las cualidades de ser un buen profesor; entre estas, destacan:


-el gusto por la docencia

-carácter abierto, de buen trato, democrático y franco

-conciencia de las implicaciones sobre la función de educar para y mediante la música

-gusto por el trabajo humano y prosocialidad

Incluye una extensa bibliografía. Un libro, en suma, estupendo para los docentes que necesiten actualizarse y aprender a programar su materia docente-musical por competencias.

Más información:

Las competencias en educación y formación musical

Subtitulado "La programación didáctica por competencias en los conservatorios y escuelas de música", escrito por mi colega Ana Mercedes Vernia Carrasco, y editado por Letrame, esta publicación es un valioso resumen de las competencias, es decir, el saber hacer que debemos enseñar,  claves o básicas, generals y específicas músicales.

Dentro de las competencias musicales, está todo aquello que un profesor de música debe poder desarrollar en sus alumnos: competencia rítmica, auditiva, vocal, lecto-escritura, comunicativa, corporal, personal y emocional, aprender a aprender, tecnológica y cultural-artística.

La educación vocal es necesaria para los docentes de música (y no sólo de música). Reconoce el canto como elemento fundamental en el desarrollo musical de una persona además de desempeñar un papel esencial en la evolución cultural y la integración social.

Me ha encantado que en Las competencias en educación y formación musical: La programación didáctica por competencias en los conservatorios y escuelas de música (Docencia) se hable también en el capítulo sexto de las competencias que debe tener un docente de música, o sea, no todo buen intérprete sólo por el hecho de serlo, va a poseer las cualidades de ser un buen profesor; entre estas, destacan:


-el gusto por la docencia

-carácter abierto, de buen trato, democrático y franco

-conciencia de las implicaciones sobre la función de educar para y mediante la música

-gusto por el trabajo humano y prosocialidad

Incluye una extensa bibliografía. Un libro, en suma, estupendo para los docentes que necesiten actualizarse y aprender a programar su materia docente-musical por competencias.

Más información:

¿La música distrae? Neuromúsica y educación

Hoy os hablaré de una novedad editorial sobre música que os encantará, se trata de una nueva publicación de Jordi A. Jauset, eminente investigador sobre neuromúsica, doctor en comunicación, ingeniero y músico, master en Psicobiología y neurociencia cognitiva: 


Ya nos había deleitado antes con Cerebro y música, una pareja saludable. En esta nueva obra, una maravillosa recopilación de todas las investigaciones científicas relacionadas con la música vista desde el llamado "órgano Rey". explicadas divulgativamente, de la manera más sencilla posible, muy inteligible.

Es un libro imprescindible, en mi opinión, para todos aquellos educadores musicales que quieran ampliar la base científica del ejercicio de su docencia o entender qué procesos benefician el aprendizaje musical.

El libro está estructurado en seis capítulos en los que expone, por un lado, qué entendemos como música, cómo afecta la música al cerebro, cuáles son los mecanismos de neuroplasticidad y la estimulación musical, cómo influye la música antes de nacer, qué importancia tiene la música en la educación y otras investigaciones relacionadas.

La publicación tiene un gran valor por ser un tema de plena actualidad y porque todos aquellos que atacan de alguna manera a la educación musical, sea por activa o por pasiva (ignorándola), deberían reflexionar sobre la sociedad que se desea y pensar que una buena educación musical hará ciudadanos más sensibles, inteligentes y capaces. 

Realmente la música tiene una influencia y procura unos beneficios tanto en el desarrollo afectivo, motor, cognitivo, etc... tan grandes que no es comparable con cualquier otra actividad. Parafraseando sus palabras, un cerebro musical es similar a un castillo de fuegos artificiales (cuando se estudia el cerebro de una persona tocando un instrumento, se visualiza una "explosión", una gran estimulación de áreas del mismo de manera simultánea), efecto único de la música.

Uno elige qué tipo de mente quiere para sí y para sus hijos, si rica o pobre, si estimulada o no, si con muchas conexiones o con pocas... Aducir que la música es mera distracción (no niego que puede procurarnos muy buenos momentos además) es desviar torticeramente la cuestión. No existen materias de primera y de segunda en los colegios. De hecho, eliminar la música de las escuelas es tan grave como eliminar la educación física o las matemáticas. 

La música no es necesaria solamente porque coadyuve a otras materias. Tiene beneficios en sí misma, per se.  De hecho aquellas personas que han estudiado un instrumento musical o el canto (que lo es) en la infancia, desarrollan una mayor plasticidad neuronal y mayores conexiones entre las diferentes partes del cerebro que perduran toda la vida. Sólo por el hecho de adquirir una rica configuración cerebral todos los niños deberían estudiar algún instrumento o cantar durante el tiempo necesario. 

Realmente si no está presente en el currículum la música se priva a las próximas generaciones de avances cognitivos, de creatividad, de inteligencia en suma... Esto pondrá en inferioridad de condiciones a los niños del país que prescinda de la música en la escuela, frente a otros (¡como Suiza, que la incorporó a su constitución!) que sí la integran en su sistema.

Dedica un epígrafe, el 5.3, a la voz y el canto así como en el capítulo 6 a las relaciones entre la música y el lenguaje. Habla de los múltiples beneficios del canto, una actividad innata del ser humano. Detalla: mejora la concentración y la memoria, influye en el estado anímico, así como ayuda a controlar la ansiedad y aumentar la motivación. También disminuye los niveles de cortisol, la hormona del stress y, al mismo tiempo, aumenta los niveles de las llamadas "hormonas de la felicidad", oxitocina y melatonina. Mejora las enfermedades pulmonares, incrementa la cohesión social, etc, etc...

¡Una obra necesaria para educadores musicales y todos aquellos que trabajan con la música y/o la voz!


¿La música distrae? Neuromúsica y educación

Hoy os hablaré de una novedad editorial sobre música que os encantará, se trata de la reciente publicación de Jordi A. Jauset, eminente investigador sobre neuromúsica, doctor en comunicación, ingeniero y músico, master en Psicobiología y neurociencia cognitiva:


Ya nos había deleitado antes con Cerebro y música, una pareja saludable. En su nueva obra "¿La música distrae?", ofrece una maravillosa recopilación de todas las investigaciones científicas relacionadas con la música desde la óptica del llamado "órgano Rey", explicadas divulgativamente, de la manera más sencilla posible, totalmente inteligible.

Es un libro imprescindible, en mi opinión, para todos aquellos educadores musicales que quieran ampliar la base científica del ejercicio de su docencia o entender qué procesos benefician el aprendizaje musical.

El libro está estructurado en seis capítulos en los que expone, por un lado, qué entendemos como música, cómo afecta la música al cerebro, cuáles son los mecanismos de neuroplasticidad y la estimulación musical, cómo influye la música antes de nacer, qué importancia tiene la música en la educación y otras investigaciones relacionadas.

La publicación tiene un gran valor por ser un tema de plena actualidad y porque todos aquellos que atacan de alguna manera a la educación musical, sea por activa o por pasiva (ignorándola), deberían reflexionar sobre la sociedad que se desea y pensar que una buena educación musical hará ciudadanos más sensibles, inteligentes y capaces. 

Realmente la música tiene una influencia y procura unos beneficios tanto en el desarrollo afectivo, motor, cognitivo, etc... tan grandes que no es comparable con cualquier otra actividad. Parafraseando sus palabras, un cerebro musical es similar a un castillo de fuegos artificiales (cuando se estudia el cerebro de una persona tocando un instrumento, se visualiza una "explosión", una gran estimulación de áreas del mismo de manera simultánea), efecto único de la música.

Uno elige qué tipo de mente quiere para sí y para sus hijos, si rica o pobre, si estimulada o no, si con muchas conexiones o con pocas... Aducir que la música es mera distracción (no niego que puede procurarnos muy buenos momentos además) es desviar torticeramente la cuestión. No existen materias de primera y de segunda en los colegios. De hecho, eliminar la música de las escuelas es tan grave como eliminar la educación física o las matemáticas. 

La música no es necesaria solamente porque coadyuve a otras materias. Tiene beneficios en sí misma, per se.  De hecho aquellas personas que han estudiado un instrumento musical o el canto (que lo es) en la infancia, desarrollan una mayor plasticidad neuronal y mayores conexiones entre las diferentes partes del cerebro que perduran toda la vida. Sólo por el hecho de adquirir una rica configuración cerebral todos los niños deberían estudiar algún instrumento o cantar durante el tiempo necesario. 

Realmente si no está presente en el currículum la música se priva a las próximas generaciones de avances cognitivos, de creatividad, de inteligencia en suma... Esto pondrá en inferioridad de condiciones a los niños del país que prescinda de la música en la escuela, frente a otros (¡como por ejemplo, Suiza, que la incorporó a su constitución!) que sí la integran en su sistema.

Dedica un epígrafe, el 5.3, a la voz y el canto así como en el capítulo 6 a las relaciones entre la música y el lenguaje. Habla de los múltiples beneficios del canto, una actividad innata del ser humano. Detalla: mejora la concentración y la memoria, influye en el estado anímico, así como ayuda a controlar la ansiedad y aumentar la motivación. También disminuye los niveles de cortisol, la hormona del stress y, al mismo tiempo, aumenta los niveles de las llamadas "hormonas de la felicidad", oxitocina y melatonina. Mejora las enfermedades pulmonares, incrementa la cohesión social, etc, etc...

¡Una obra necesaria para educadores musicales y todos aquellos que trabajan con la música y/o la voz!