CON LA MÚSICA A OTRA PARTE O EL ESPÍRITU DE LAS LEYES


              

No pretendemos revisar aquí la obra de Montesquieu, no; tan solo invitar al análisis y a la reflexión  sobre si ciertamente las leyes tienen espíritu o transmiten y reflejan el de quienes las elaboran y redactan.

 "La educación es el motor que promueve la competitividad de la economía."

Con esta frase comienza el borrador de un anteproyecto (LOMCE) en el que no se encuentra por ninguna parte el Bachillerato de artes escénicas, música y danza. Está más que claro el espíritu de esta enésima  ley. 
Parece justo lo contrario a este otro documento: Llamamiento para la promocion de la Educacion Artistica y de la Creatividad (Enlaces para la Educación y el Arte. UNESCO)

Qué hartazgo y qué tristeza.  Cuando no hay palabras siempre queda la música; a mí se me ha quedado, además, la misma cara que a Sibelius



El Vals Triste, Op. 44, No. 1 formaba parte, en un principio,  de la  música incidental para la obra dramática del escritor finlandés Arvid Järnefelt titulada Kuolema (Muerte) (1903).  Un vals maravilloso pero triste, para un otoño triste....¿o no?

 
Qué bien nos vendría su Lutherapia en estos momentos...



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