Paco de Lucía y el cajón flamenco

Paco de Lucía

Paco de Lucía, by der_makabere (CC BY-SA)

Según una antigua profecía, durante el día de hoy un cataclismo no definido, posiblemente un fenómeno astronómico como una colisión con un asteroide u otro tipo de objeto celeste, o un agujero negro o quién sabe que otro tipo de desastre, causará el día del fin del mundo. Probablemente la elección de la fecha tiene que ver no sólo con las alineaciones planetarias o las radiaciones solares, sino también con la “musicalidad” de los números que la componen, el 21 del 12 del 2012 (el año 2112 hubiera sido todavía más espectacular pero evidentemente los partidarios de esta hipótesis no pueden permitirse esperar tanto).

Desde luego no hay fundamento científico alguno en estas teorías. Sin embargo, lo que sí ocurrirá con absoluta seguridad es un fenómeno astronómico bastante menos terrible (aunque en el hemisferio norte conlleve ciertas incomodidades) y al que estamos más acostumbrados: el invierno entrará… ¡a las 12:12 en punto! (hora peninsular española).

De todas formas hay otra efeméride que quiero destacar hoy: el 65º cumpleaños de Paco de Lucía, un músico que es una auténtica leyenda viviente. En todo el mundo, su nombre artístico (el que aparece en su documentación es Francisco Sánchez Gómez) es sinónimo de guitarra flamenca, aunque también ha hecho muy exitosas incursiones en otros géneros, desde la música clásica hasta el jazz, aunque se trate, claro está, de un jazz con el alma flamenca, como el del siguiente vídeo, a dúo con John McLaughlin.

Hasta comienzos de los años 60, el rol del guitarrista flamenco no pasaba de ser el de un simple acompañante. El primero en demostrar las enormes posibilidades de la guitarra en el flamenco más allá de esa función de apoyo al cantaor fue Sabicas, pero quien ha llevado este instrumento a la fama internacional ha sido sin duda Paco de Lucia.

Este guitarrista algecireño está dotado de tan grandes virtuosismo, expresividad y fantasía que le permiten tanto tocar con la máxima ortodoxia flamenca como experimentar todo tipo de innovación armónica, rítmica y tímbrica y de fusión con otros géneros. En el siguiente vídeo podemos escuchar una de sus obras más famosas, la rumba Entre dos aguas, cuyo título es una clara referencia al Mar Mediterráneo y el Océano Atlántico que bañan las costas de su provincia, Cádiz. Fijémonos en la presencia de un bajo eléctrico pero sobre todo en las variadas percusiones latinoamericanas, como bongós y congas: era el año 1976 y los únicos instrumentos de percusión que se empleaban en el flamenco en aquel entonces eran instrumentos corporales: palmas, pitos y tacones, apreciados y utilizados por Paco de Lucía que, no obstante, quería más.

Al escribir la anterior afirmación no me he olvidado del cajón. Aunque éste parezca un instrumento flamenco desde siempre, en realidad su empleo en este género sólo remonta al año siguiente al vídeo anterior, el 1977.

Paco de Lucía se encontraba de gira en Perú, el país en el que nació el cajón, instrumento usado por los esclavos que tenían prohibido el uso de los tambores.  El mismo guitarrista nos cuenta cómo lo introdujo en la música flamenca, a la que llegó para quedarse.

La forma del cajón peruano es muy sencilla, un sobrio ortoedro que no deja lugar a las decoraciones y los adornos que enriquecen visualmente otros instrumentos musicales. Su timbre es seco, aunque en su versión flamenca está enriquecido por cuerdas metálicas añadidas en su interior, una sonoridad fácil de distinguirse en el vídeo siguiente.

Un técnica impecable y una creatividad sin límites hacen que Paco de Lucía -al que envío mis más sinceras felicidades y deseos de salud y, si cabe, aún más éxitos- dé lo mejor de si mismo en la improvisación, el tema del que nos habla en la siguiente entrevista.