Aprender a cantar: La regla del 80 / 20

Aprender a cantar no es tarea fácil. Cuando empezamos, normalmente no tenemos ni idea de lo que nos vamos a encontrar ni lo que vamos a hacer ni de cómo lo vamos a hacer.

En cuanto nos adentramos en ello, empezamos a ver que hay muchísimas cosas, la mayoría no las entendemos, nuestro profesor de canto nos pide hacer cosas y, aunque nos explique el por qué, es difícil de entender e incluso de creer que eso nos llevará a ser mejores cantantes, pero es importante mantenernos concentrados en la tarea y avanzar paso a paso.

El problema es, como siempre decimos, que queremos obtener ya "el producto acabado", es decir, una voz que sirva para actuar y además a un nivel muy bueno, pero por alguna razón, las expectativas en relación al canto suelen ser altas. A veces nos perdemos en la cantidad de cosas que supuestamente deberíamos tener en cuenta y a veces nos perdemos tanto en los detalles de algo que el árbol no nos deja ver el bosque, concentrando los esfuerzos en el sitio equivocado.

Cuando alguien empieza a tocar un instrumento, se le ofrece muchísimo margen de error, porque está aprendiendo. Es normal que se equivoque y nadie le castiga por ello. Si está empezando con una banda con otros aprendices incluso es gracioso y siempre salen risas de esas situaciones.

A los 15 años empecé a tocar la batería, y ese fue exactamente mi caso. También fue más fácil que aprender a cantar por el simple hecho de que aprender a tocar la batería es un proceso mucho más estudiado que el canto, a nivel general. Es decir, hay muchos más profesores de batería que profesores de canto que puedan enseñarte bien.

La regla del 80-20, también también conocida como El Principio de Pareto, explica que el 80% de un problema se arregla solucionando el 20% de este. En mis primeras semanas mi profesor se centró en trabajar un poquito de independencia entre manos y piernas, pero sobretodo se centró en hacerme consciente del sentido del ritmo. Recuerdo que las clases eran de una hora, y como mínimo nos pasábamos 20 minutos siguiendo al metrónomo, sólo tocando la caja. Es decir, sólo entraban en juego las manos, dejando de lado los pies. Eso centraba el 100% de mi atención en el tempo y en conseguir que mi cuerpo respondiese a tiempo. Después me hacía cambiar a corcheas, semi-corcheas, tresillos, etc. lo cual recuerdo que me costó muchísimo, porque ahí ya tenía que empezar a acostumbrar a mi cerebro a todos aquellos patrones nuevos para mi.

Con el tiempo pudimos empezar a trabajar más la independencia de las extremidades, centrándonos sobretodo en las débiles ( mano y pié izquierdos ). Después empezó a enseñarme cómo hacer breaks; dónde ejecutarlos y haciéndome ver que no tenía más que extrapolar lo aprendido al resto de elementos de la batería. Más tarde llegaron las dinámicas, es decir, el volumen que debía sacar con cada golpe, para conseguir "groove", etc.

Si te das cuenta, todo esto es bastante extrapolable al canto, pero como he dicho, es más difícil porque con un instrumento externo se asume que lo harás mal al principio, hasta que aprendes; con la voz no suele ser así.

Con la voz lo más ignorado por los que aún no saben cantar es la liberación de tensiones. Estas personas suelen "darlo todo" para conseguir dar esa nota, ya que lo que quieren es poder cantar las canciones que les gustan. En sus clases de canto, cuando reciben ejercicios para anular las tensiones, suelen ser demasiado impacientes y ven que ese no es el sonido que quieren para su voz. Aquí es cuando se debe aplicar la regla del 80-20, ya que si estás intentando trabajar tu interpretación, tu rango o lo que sea ( el 20% del problema ) no vas a poder cantar ya que tu problema son las tensiones ( el 80% del problema ). Para mi es absolutamente comprensible, ya que mi personalidad me hace ser así. Si tu eres como yo, por favor, céntrate en lo importante del problema primero, porque es lo que mayor resultado te va a dar, acelerando así el proceso.

Por otro lado, las personas que se defienden en el canto y ya cantan sus canciones e incluso están medianamente contentos con sus voces y asisten a clases de canto, curiosamente se suelen enfocar en que cantar sea más fácil para ellos. Mi teoría es que como ya afinan y sus voces suenan bien en una canción, quieren mejorar su resistencia y comodidad, lo cual veo perfecto, porque eso es enfocarse en el problema principal. Por supuesto también hay otros que se enfocan primero en aumentar su rango vocal normalmente forzando la voz, lo cual suele ser la opción equivocada, ya que las tensiones son las que no le van a permitir conseguirlo.

Aprender a cantar lleva tiempo y, sin duda, esfuerzo, pero de nada sirve enfocar todo nuestro esfuerzo en el sitio equivocado, ya que esa energía se pierde sin aportarnos nada. Para ello necesitas un buen profesor de canto que te guíe durante el proceso, y también debes confiar en él. En este mismo blog puedes encontrar también muchos consejos que te ayudarán a entender mejor tu voz.

Finalmente, recuerda que nosotros ofrecemos clases de canto utilizando el método Speech Level Singing, la cual nos da herramientas para centrarnos 100% en el problema que más nos está estorbando para mejorar. Si quieres reservar una clase de canto con nosotros, puedes contactarnos aquí y concretaremos una hora.

Aprender a cantar: La teoría de las 10.000 horas

Los estudiantes de canto que empiezan muy a menudo quieren saber cuánto tiempo es necesario recibir clases de canto para aprender a cantar.

Lo que hago normalmente es remitirles a nuestro artículo anterior acerca de valorar los pequeños avances, ya que lo importante es entender y disfrutar el proceso de aprender a cantar. El artículo de hoy va dirigido a todos aquellos a los que esta respuesta no les ayuda a cambiar de perspectiva.

Esta pregunta es un tormento para los que se la formulan. Cuando alguien quiere aprender a cantar, el 99% de los casos es porque cree que no canta lo suficientemente bien, o directamente porque no sabe cantar. Para ellos, el concepto de "saber cantar" querrá decir diferentes cosas, como por ejemplo cantar como X persona, o llegar a X nota, o tener X octavas de rango vocal, etc. Esto es un problema ya que o son objetivos distorsionados o son objetivos a largo plazo, que para nada muestran todo el camino que hay que recorrer para llegar a ellos. Me explico:

Objetivos distorsionados: Supongo que por la mentalidad que nos inculcan desde pequeños de "más es mejor" o "debes ser el primero de la clase", siempre queremos ser los mejores en todo, y lo queremos cuanto antes. Es por eso que muchas veces pensamos que tener el rango vocal más extenso nos hará los mejores cantantes, cuando en realidad no es así. Puede ser una habilidad impresionante, pero difícilmente será una habilidad artística útil. Por poner un ejemplo, Mariah Carey utiliza su whistle register en contadas ocasiones. En cambio, esta canción con Georgia Brown, aunque realmente impresionante, no es algo que me pasaría el día escuchando.

Objetivos a largo plazo: Querer tener la misma voz que un cantante en concreto no es buena idea. Cada uno tenemos nuestros rasgos específicos en nuestras voces, y puede ser peligroso para nuestra salud vocal querer modificarlos para sonar como otra persona. Debemos utilizar lo que tenemos y mejorar eso. Además, si queremos imitar a Michael Jackson deberíamos pensar que la gente querrá escuchar a Michael Jackson y no a alguien que suene como él. Un objetivo a largo plazo que tendría más sentido sería poder interpretar las canciones de un cantante en concreto, pero a tu manera. De todas formas, esto suele llevar tiempo, y más si el cantante tiene muy buena técnica. A medida que vayas mejorando y vaya pasando el tiempo, tus gustos e inquietudes irán cambiando y probablemente ese objetivo que parecía tan importante al principio, deja de serlo.

Existe una teoría que dice que para ser un experto en un campo concreto es necesario, como mínimo, tener 10.000 horas de experiencia práctica en éste. Más o menos son unos 10 años de ~3 horas de práctica diarias, de lunes a domingo, sin descanso.

Quiero resaltar que estamos hablando que esta cantidad de tiempo es necesaria para ser reconocido como un virtuoso en el campo, un experto de verdad, no sólo alguien que sabe mucho.

Aunque puedes ser muy buen cantante con muchas menos horas, lo que quiero decir con la explicación de esta teoría es que no se puede responder a ciencia cierta a la pregunta de cuánto tiempo es necesario dedicar para aprender a cantar, por dos razones:

Depende del tiempo que le dediques y, por supuesto, de la guía que tengas: El tiempo que le dediques a aprender a cantar debe ser directamente proporcional al nivel que quieres obtener. Si simplemente quieres aprender a cantar de forma decente, probablemente con que le dediques 30 minutos al día deberías obtener resultados en relativamente poco tiempo. Remarco la palabra "relativamente" porque igual que no puedes esperar defenderte decentemente con un instrumento como la guitarra en menos de dos años, pretender aprender a cantar bien en un par de meses, a no ser que seas tan afortunado como algunos de tener facilidad de nacimiento, es un objetivo irreal. Sí puedes mejorar tu sonido y tu libertad vocal en poco tiempo, pero sólo en canciones fáciles. Si en cambio lo que quieres es convertirte en un portento de la técnica, deberías practicar varias veces al día, en bloques de 30 minutos con el máximo tiempo posible de descanso entre ellos.

¿Llega el día en el que no quieras saber más?: Si lo piensas bien, cuanto más aprendes más quieres saber y más te das cuenta de todo lo que aún te queda por aprender. ¡Pero eso es bueno! Esa ambición es la que nos hace seguir trabajando y superándonos a nosotros mismos día tras día.

Si os he de ser sincero, yo tenía exactamente esa misma pregunta en mi cabeza al principio de todo, y probablemente todo esto no me habría esclarecido las dudas. Sin embargo, hace ya muchos años de eso, y hoy puedo decir que, aunque no la pueda confirmar del todo dada mi experiencia, la teoría de las 10.000 horas parece muy cierta. Lo veo en unos pocos aspectos de mi vida, entre ellos el impartir clases de canto.

No es que lleve tanto tiempo dando clases de canto, pero sí llevo muchos años recibiéndolas. La mayoría de los años de estudio que llevo no me han servido más que para frustrarme como cantante, pero como dicen: "no hay mal que por bien no venga". Ahora que entiendo cómo se debe aprender a cantar, miro hacia atrás y puedo aprender de todas aquellas enseñanzas equivocadas, ya que las he vivido en primera persona. Ahora, cuando oigo una pequeña tensión a un alumno, que sus cuerdas vocales hacen un sonido "raro" durante una fracción de segundo, etc. inmediatamente siento en mí mismo su problema, y podemos centrarnos en arreglarlo al momento. En otras palabras, paradójicamente no estuve tantos años estudiando para ser cantante, si no para ser profesor de canto, aunque no lo supe hasta mucho más adelante.

Como resumen, con este artículo quiero decir que no te impongas objetivos innecesarios que crees que necesitas, porque nuestro entorno ya nos pone muchos de esos en nuestras vidas. Si realmente quieres aprender a cantar, debes entender el proceso. De hecho, puede que incluso la frase aprender a cantar sea contraproducente, porque no se aprende a cantar, porque no es algo que tenga fin. No es como aprender a abrir una puerta, o aprender a sumar. Quizás una definición más correcta sería quiero aprender a mejorar mis habilidades para el canto. Si consigues pensar así tu cerebro directamente lo verá todo de otra forma, y se centrará en ir mejorando, que es lo importante.

Si quieres mejorar como cantante y no estás recibiendo clases de canto o crees que las clases de canto que recibes actualmente no te están ayudando, aquí puedes encontrar unas sugerencias para encontrar a un buen profesor de canto. Si te decides a probar nuestras clases de canto con nosotros, te aseguro que pondremos toda nuestra devoción y esfuerzos en que llegues a donde quieres llegar con el canto. ¡No tienes más que ponerte en contacto con nosotros para reservar tu clase!

Aprender a cantar: El funcionamiento de la voz

Hemos traducido este interesantísimo artículo de John Henny acerca del funcionamiento de las cuerdas vocales para ayudar un poco a los cantantes a conocer mejor su instrumento. Espero que lo disfruteis y aprendais muchas cosas de él:





Las cuerdas vocales y su funcionamiento son a menudo mal interpretados por los cantantes (incluso algunos profesores no están seguros de lo que está pasado exactamente). Yo creo que cuanto más sabes acerca de tu instrumento, mejor cantante y maestro puedes llegar a ser.

Una comprensión básica sobre cómo las cuerdas vocales construyen el tono puede ayudarte de manera más precisa a analizar los desequilibrios y elaborar rutinas de práctica más eficiente.

Aunque el término correcto es "pliegues vocales" Nosotros vamos a usar el más popular "cuerdas vocales".


Las cuerdas vocales - ¿Dónde están?

Las cuerdas vocales se encuentran en la parte superior de la tráquea. Están alojados en la laringe, que es el bulto en la parte frontal del cuello que sube y baja al tragar.

El cartílago que protege las cuerdas vocales es la nuez en un hombre. Las cuerdas vocales residen sobre la tráquea y se abren y cierran desde atrás, con aspecto de V en la posición abierta (ver foto arriba).


Las cuerdas vocales - ¿De qué están hechas?

Aquí es donde las cosas se ponen interesantes. Aunque muchas personas tratan de describir las cuerdas vocales en términos de un instrumento de cuerda (como la guitarra) la composición de las cuerdas vocales es muy diferente a las cuerdas de acero o nylon de una guitarra.

Las cuerdas vocales se componen de tres elementos básicos. La primera capa es una extensión de ligamento, que es de donde procede el término "cuerda".

La siguiente capa es un músculo que se extiende a lo largo de la cuerda vocal. Este músculo se llama el músculo tiroaritenoideo debido a donde se une a cada lado. Lo llamaremos el músculo TA, para abreviar.

Finalmente, hay una capa de tejido blando mucoso, que cubre las cuerdas. Parece como si estuviera doblado, de ahí el término "pliegues vocales". Este tejido blando es necesario para crear las ondas ultrarápidas de sonido.


Las cuerdas vocales - Cómo hacen el sonido

Las cuerdas vocales se abren cuando respiramos, por lo que no producen sonido. Hay unos músculos detrás que las hacen juntarse.

Cuando el aire es expulsado a través de ellas vibran y producen sonido, al igual que el zumbido de los labios de un trompetista.

El grado de cierre de las cuerdas vocales es importante, ya que un cierre insuficiente produce un sonido débil y airoso, mientras que demasiado cierre crea presión y posibles daños vocales.

A menudo hago a mis estudiantes hacer un sencillo ejercicio para experimentar diferentes grados de cierre de las cuerdas vocales:

En primer lugar les digo que suspiren - Esto es a menudo demasiado poco cierre para cantar y practicar.

Después gruñir como si levantaran algo pesado - Que es demasiado cierre de cuerdas. Los músculos están presionando las cuerdas vocales demasiado intensamente.

Por último, decir "mmmmm" como si estuvieran comiendo su comida favorita. Esto debería darles una mejor sensación de cómo debe ser un nivel medio de cierre de cuerdas vocales.


Las cuerdas vocales - Cómo producen el tono

Las cuerdas vocales son del tamaño de la uña del pulgar, no contienen notas, clavijas de afinación, válvulas, varias cuerdas o cualquiera de los otros dispositivos que se encuentran en los instrumentos musicales, sin embargo, pueden cubrir cuatro octavas de rango y mucho más.

Las cuerdas vocales son capaces de hacer esto debido a la interacción entre los músculos y el ligamento (cuerda).

En la parte baja del registro principalmente cambias de tono aumentando o disminuyendo la tensión en los músculos TA (los músculos que se extienden a lo largo de las cuerdas vocales). Las cuerdas vocales son cortas y gruesas en estas notas más bajas con los músculos TA haciendo la mayoría del trabajo. Nota: algunas personas creen que las cuerdas son más largas en el registro bajo o voz de pecho, esto es incorrecto.

Al elevar el tono al registro agudo un nuevo grupo de músculos se involucra. Estos músculos se llaman cricotiroideo o CT, para abreviar.

Los músculos CT estiran las cuerdas, haciéndolas más largas y más delgadas. El ligamento vocal también aumenta su tensión, elevando el tono. Esto es como estirar una banda elástica - incrementará en tensión y tono.

Algunos argumentan que si las cuerdas son más largas en la voz de la cabeza o el registro superior deberían producir una nota más baja, por lo tanto deberían ser más cortos. Esto no es cierto.

Sí, una cuerda más larga produce una nota más baja, sin embargo las cuerdas vocales compensan este alargamiento haciéndose más delgadas y añadiendo tensión. Esto nos da la capacidad de cantar notas muy altas.

Reiteramos que las cuerdas vocales son cortas y gruesas en la voz de pecho (o registro grave) y largas y delgadas en la voz de cabeza (o registro superior).

Haz clic aquí para ver un vídeo de las cuerdas vocales cambiando el tono.


Las cuerdas vocales - Interacción muscular

La relación entre los músculos TA y CT es muy importante en el canto. Si produces demasiada tensión en el TA intentando cantar más alto tu voz se bloqueará. Si relajas demasiado los TA y los CT o músculos que alargan se involucran demasiado fuerte entrarás en falsete.

La clave es tener estos dos grupos de músculos opuestos en un buen equilibrio, con las tensiones entre ellos adecuadas para cada tono.

Por supuesto, esto lleva tiempo y es parte de una buena formación vocal.

El conocimiento de tu instrumento y de las cuerdas vocales es un buen comienzo para convertirte en un gran cantante.


Esperamos que os haya gustado! Os dejamos aquí el link al artículo original: http://johnhenny.com/2012/08/15/how-the-vocal-cords-work-for-singing/

Aprender a cantar: ¿Cómo afecta nuestro estado de ánimo?

¿Alguna vez has probado a cantar una canción que habitualmente resulta fácil para ti y has sentido que no eras capaz de cantarla o que era más complicado que otras veces? ¿Cuantas veces, cuando algo no te sale como esperabas, has pensado que no tienes un buen día?

Esta es una sensación muy habitual para los cantantes, ya que el instrumento que estamos utilizando forma parte de nuestro cuerpo, de nuestra fisiología. Es un instrumento susceptible a cambios según nuestro estado de ánimo, por eso es importante tener esto en cuenta y utilizarlo a nuestro favor.

Hace pocos días fui a ver el concierto de una de mis alumnas. Hablé con ella minutos antes de empezar y me comentó que estaba desanimada porque no tenía un buen día. Había pasado un día muy estresante y estaba tensa y sin energía. Lo primero que hice fue pedirle la lista de las canciones que iba a cantar y el orden de las mismas. Vi que iba a empezar por una serie de baladas para luego pasar a las canciones más movidas. Yo le sugerí que hiciera varios cambios, que empezara con un par de canciones movidas y fuera bajando la intensidad poco a poco. Cuando acabó el concierto me dijo que se había sentido muy bien!!

Lo que que hice fue ayudarla a acompasar su actuación con el estado de ánimo en el que se encontraba en ese momento. Ella estaba estresada y nerviosa, así que si empezaba por algo lento y suave no le iba a salir como esperaba y seguiría así hasta que se habituara o hasta que cambiara el ritmo de las canciones. De esta otra manera, empezó liberando el nervio que sentía y poco a poco pudo dar paso a un estado más tranquilo.

Es muy importante que antes de actuar tengamos muy presente cómo nos sentimos en esos momentos para poder hacer nuestra mejor actuación. En este caso, un estado de estrés y nerviosismo hace preferible empezar con un ritmo más rápido y por lo contrario, si nos sentimos chafados y sin energía, una canción lenta nos será más fácil de cantar.

También es verdad que a través de la música muchas personas son capaces de cambiar su estado de ánimo, pero esto tendría que hacerse antes de la actuación para que funcionara. Quizás no sea tu caso, pero hay muchas personas a las que escuchar una canción en concreto las pone tristes o las pone en un estado de euforia o simplemente las anima. Esto tiene que ver con cada persona en concreto y con su experiencia. A veces no nos damos cuenta pero asociamos la música que está sonando con lo que estamos haciendo o sintiendo en esos momentos. Por poner un ejemplo, recuerdo cuando murió mi abuelo que yo estaba escuchando la canción "Se le apagó la luz" de Alejandro Sanz y mi padre entró en mi habitación a darme la noticia con lágrimas en los ojos y totalmente hundido. Aquello me impactó mucho, ya que nunca antes había visto a mi padre en ese estado y sumado a la tristeza de saber de la muerte de mi abuelo, aquella canción se convirtió para mi en una de las que consiguen ponerme más triste.

Aquello pasó de manera automática para mi, pero también existe la opción de utilizar anclajes, de los que Carlos habló en sus artículos ¿Hipnosis aplicada al canto? y PNL aplicada al canto. Sirven para poder entrar en el estado que quieras en un momento determinado. Te estarás preguntando ¿para qué querría alguien entrar en un estado de tristeza? Yo te pediría que pienses en un actor o actriz. Para los que no tenemos la habilidad de la interpretación, esta es una buena forma de inducirnos estados de ánimo y hacer una mejor actuación. ¿Cómo hacer sentir a los demás la tristeza de una canción si ni siquiera tú la estás sintiendo? Es por eso que los grandes cantantes logran emocionarte sin a veces siquiera entender la letra de sus canciones. También es por eso que a veces personas con una técnica vocal no muy consolidada tienen un enorme éxito de ventas.

Si tú consigues emocionar a un público pero quieres tener más control de tu instrumento o si consideras que te cuesta transmitir emociones mientras cantas y quieres empezar por establecer los cimientos, no te lo pienses más!! Contacta con nosotros para reservar ya tu clase de canto!!

Aprender a cantar: Cómo tener éxito con una banda

A menudo asociamos la palabra éxito con la riqueza, la fama y la fortuna, pero esa palabra es algo más que todo eso. Hay grandes éxitos y éxitos pequeñitos. A la hora de cantar, la historia no es diferente. Primero hemos de tener presente el objetivo que queremos alcanzar y a partir de ahí luchar para conseguirlo.

A lo que me refiero con esto es que no es lo mismo querer vivir de tu voz que querer aprender a cantar simplemente porque es algo que te gusta y se te da bien. Es muy importante saber de antemano qué queremos hacer, porque de esta manera enfocamos todos nuestros esfuerzos en el camino correcto.

Hay personas que si les preguntas si quieren ser cantantes famosos te dicen: bueno, es que eso es muy difícil... otras que directamente te dicen que sí, pero no se han parado a pensar en las repercusiones de todo ello. Hay que tener muy claro que en el momento en que seas reconocido por un público tu vida va a cambiar. Eso es algo que no todo el mundo aguanta, por eso hay que tener muy claro que ese es tu objetivo antes de empezar a avanzar hacia él.

Sea cual sea tu meta, tener éxito en ella no es imposible. Es más fácil si sabemos qué pasos debemos ir dando para acercarnos cada vez más, pero si no los sabemos, tenerla clara en todo momento ya es muy importante.

Como cada objetivo tiene sus pasos y sería muy largo describiros los de todos los posibles, yo voy a enfocarme en el que más conozco, que fue y es el mio. Yo aprendí a cantar para formar parte de una banda y hacer conciertos para divertirme y disfrutar de la música.

¿Cual es el primer paso? Yo no lo hice en un principio y por eso ahora sé que es primordial, ya que adquirí vicios que me fueron muy difíciles de erradicar. De lo que estoy hablando es de encontrar un profesor de canto que te guíe. Parece un paso fácil de conseguir, porque resulta que hay muchísimas personas que ofrecen clases de canto, pero como bien dijo Carlos en una de sus publicaciones, no siempre es fácil encontrar un buen profesor de canto. Si te lees su artículo, verás que puedes detectar por ti mismo cuando un profesor es bueno o no. Esta persona valorará hasta que punto estás o no preparado para iniciar tu camino y te ayudará a estarlo si aún tienes trabajo por hacer.

Una vez tu profesor te diga que estás listo, hay que empezar a buscar componentes para la banda, o una banda ya creada que necesite cantante. Cualquiera de los dos casos, por fácil que pueda parecer, no lo es. Sé que es obvio, pero a veces no nos damos cuenta de que las bandas están compuestas por personas y que con esas personas vas a pasar mucho tiempo. Lo mas importante es encontrar gente con la que tengas afinidad y que compartan el mismo objetivo que tú. Si hay malos rollos o tienes diferencias con alguno de los componentes, no te quedes. Sí, puedes hacer conciertos, pero no disfrutarás de la misma manera.

Otra cosa muy importante es el tipo de música que se hace. Como suele decirse, para gustos, colores. Hay que tener más o menos los mismos gustos musicales que los demás componentes para que la cosa funcione o si bien no se tienen los mismos gustos exactos, al menos tolerancia para adaptarse. Es muy importante saber elegir bien en este caso ya que vas a necesitar a otras personas, ya no va a depender sólo de ti.

Lo más importante es que todos los componentes compartan tu objetivo. Por ejemplo, os voy a hablar de una alumna mía que entró en una banda. Se llevaba muy bien con todos los componentes, tenían el mismo gusto musical y compusieron temas con los que ella estaba encantada. Trabajaba muchísimo y parecía que todo iba bien, pero sin embargo, nunca pude ir a verla a ningún concierto. ¿Qué pasaba ahí? Había uno de los componentes que tenía un objetivo distinto al del resto. Quería ensayar y componer temas, pero no quería hacer conciertos. Siempre decía que aún no estaban preparados aunque habían pasado dos años! Esto fue muy frustrante para ella ya que puso mucho esfuerzo e ilusión en un camino que nunca la iba a llevar a su meta. Así que sí, es importante que aunque se tarde más tiempo, se ponga mucho cuidado en este punto.

El siguiente paso, como no, es componer canciones. Suponiendo que no sepas tocar ningún instrumento y que tampoco te interese, eso lo pueden hacer los demás miembros de la banda. Eso sí, la melodía de voz sí que generalmente la busca el cantante. Ya dí algún consejo para aprender a componer melodías de voz en una publicación antigua. Una vez tengáis unas cuantas canciones y quizás alguna versión (es otro posible camino si no te gusta componer o no te apetece) ya se puede empezar a buscar bolos!

No cumplirás tu objetivo actuando una sola vez, ya que la primera vez es muy emocionante, pero no disfrutas tanto como cuando adquieres más experiencia. Las llamadas "tablas" te dan una seguridad que no tienes en el primer bolo, por no decir que actuar es algo que para algunas personas resulta adictivo! Sobretodo si tu fin es divertirte y disfrutar de la música.

Si resulta que quieres divertirte y disfrutar de la música o vivir de tu voz cantando o hablando en público o en grabaciones (doblaje, radio, etc.) y quieres asesoramiento profesional, para hacerlo de manera segura y durante más tiempo, recuerda que en Vox Technologies ofrecemos clases de canto y técnica vocal muy asequibles! Son tanto presenciales en Barcelona como online via Skype. Anímate a probarlas!! Sólo tienes que ponerte en contacto con nosotros para decírnoslo!