El patio de mi cole

Hola a todos!!!! 
Hoy os queremos enseñar, l@s chic@s de 1er ciclo y yo, la canción que crearon la semana pasada para celebrar el día de la paz. Elegimos la canción "El patio de mi casa" para modifica su letra y adaptarla al día de la Paz. La aprendieron y la grabamos en clase. Esperamos que os guste.
El patio de mi cole
es particular,
y siempre es agradable
salir a jugar.
Abrázame y vuélveme a abrazar,
que los abrazaditos
no saben pegar.
H, I, J, K, L, M, N, A
que si tú no me quieres
otro niño me querrá.
Mucha paz, que te quiero,
a besar, a besar
que es el Día de la Paz.

El día de la paz… y el de Auschwitz-Birkenau

Las casualidades pueden ser invitaciones a la reflexión. Este año, la misma semana en la que acabábamos celebrando el día de la paz y la no violencia coincidía en fechas con la misma semana en la que se conmemoraba un aniversario muy especial: el septuagésimo tras el cierre de cierto lugar en donde la paz se hacía añicos y en donde la sí violencia cercenó la vida de más de un millón de personas. Me refiero a Auschwitz-Birkenau, en Polonia, el campo de concentración y de exterminio más tristemente célebre de la historia

Un campo de concentración es una cárcel a gran escala en donde un determinado gobierno —uno que no suele ser precisamente pacífico-- decide "concentrar" por la fuerza a grandes masas de habitantes, habitantes de pleno derecho que, sin embargo, considera que deben estar alejados de la sociedad; ya sabéis: por pertenecer a una determinada raza, por profesar alguna religión o no profesar ninguna, por enamorarse de alguien del mismo sexo, por protestar ante un gobierno así... o hasta por, simplemente, ser personas con alguna discapacidad física.

Un campo "de concentración" también puede ser "de exterminio", cuando las autoridades —los nazis en este caso- no se conforman con que estos presos mueran sin cesar a causa de torturas, trabajos forzados o condiciones de vida nada saludables; cuando ya se trata de acabar directamente con ellos, de exterminarlos para siempre. En Auschwitz-Birkenau, y en otros muchos lugares, solían hacerlo mediante "cámaras" (habitaciones) de gas venenoso, lo cual era siniestramente más barato que gastar balas. 

Existen multitud de obras artísticas que han tratado de reflejar, aunque solo logren un mínimo simbólico, el dolor y el sufrimiento de los prisioneros de estos campos de concentración y de exterminio nazis. Son piezas que funcionan, a la vez, como emotivo homenaje y como recuerdo aleccionador, y contribuyen así al mantenimiento tan necesario de la muy necesaria memoria histórica, pues lo primero que hay que hacer para no repetir bestialidades es no olvidar nunca las que ya se han perpetrado.

Os propongo escuchar un ejemplo musical de una película bastante conocida sobre el tema y que os recomiendo absolutamente: La lista de Schindler (que se llama así porque un general, Oskar Schindler, traicionó a los nazis y, tras apuntarlos en sus listas, aprovechó su posición para rescatar a muchos judíos de estos campos). 


Buena parte del filme transcurre en Auschwitz-Birkenau, por lo que John Williams, el gran compositor de bandas sonoras, creó la siguiente pieza y la tituló precisamente así:
Como ejercicio de sensibilización y de dominio léxico, os invito a participar en los comentarios de esta entrada del siguiente modo: escribiendo un adjetivo, solo uno, que creáis que representa mejor la música que acabáis de escuchar. El único requisito es que no os repitáis entre vosotros.

Josquin, Petrucci, la imprenta y un grillo

Imagen
"El grillo è buon cantore..."
He notado que una de las piezas que más os ha gustado de las que estamos tratando a cuenta del Renacimiento es "El Grillo" de Josquin, la divertida composición a cuatro voces que figuró entre las primeras obras difundidas por la imprenta de Petrucci.

Animado por vuestro interés he elaborado este arreglo para flautas dulces ¡A ver si os animáis a prepararlo por grupos!
Como habréis comprobado, lo que suena al darle al play no son flautas, ni siquiera flautas "midi", sino otros timbres diferentes por cada voz para que así podáis reconocer mejor cada parte cuando suenan todas a la vez. 

Para mayor comodidad aún, aquí tenéis las partituras por separado (sí, con las posiciones de las notas indicadas con dibujitos...):
Y no podíamos acabar sin escucharla en su versión original. Os propongo esta fantástica interpretación (fijaos cómo se meten en el papel los cuatro cantantes). A propósito, no hace falta que la toquéis tan rápido...