Como flautista, fui "fan" (ya hace unos años), del grupo de rock etiquetado como "sinfónico" Jethro Tull. Seguír las histriónicas evoluciones en el escenario de su líder Ian Anderson sigue siendo un placer gracias a la magia de YouTube. En algunos de los variados vídeos en los que despliega sus saltos y cabriolas ( y su considerable virtuosismo y creatividad), podemos escuchar su peculiar adaptación de una bourrée de Bach que se convirtió en una de sus obras más conocidas.
Así que fue una agradable sorpresa encontrar una grabación en la que interpreta de nuevo, ahora a dúo, esta versión ya clásica. El vídeo tiene interés no sólo por el hecho de encontrarlo convertido en respetable señor (al menos de aspecto), sino por interpretar el dueto nada menos que con la astronauta norteamericana Cady Coleman, quien toca directamente desde la Estación Espacial Internacional. La interpretación es un homenaje a Yuri Gagarin, el cosmonauta ruso que dió el primer salto al vacío exterior.
Encuentro emocionante esta grabación con referencias tan diversas, en la que el aéreo sonido de la flauta nos llega desde el espacio, hablándonos de Bach, del rock, del impulso humano por conocer, del respeto sin fronteras al valor por encima de la vieja rivalidad, y sobre todo, del poder de la música para unir y representar todas estas cosas. No dejéis de pasárselo a los alumnos.