A lo largo de mi experiencia como profesora de canto me he encontrado en muchas ocasiones personas que deseaban aprender a cantar pero pensaban que no tenían condiciones o simplemente asumían que no podrían aprender a cantar porque no sabían ya, o sería algo genético de manera que uno debe nacer sabiendo cantar.
Evidentemente, esto no es así. Desde este blog me gustaría aclarar que nadie nace sabiendo cantar perfecto.
Es posible que sí que se posean unas condiciones naturales para el canto, pero aún así, estas personas necesitan interiorizar y trabajar la técnica vocal para desarrollar su voz al máximo.
Una persona que se encuentre con unas condiciones naturales menos evidentes puede aprender a cantar bien trabajando su voz y adquiriendo una técnica vocal que le permita desarrollar todo su potencial.
Muchas veces me he encontrado alumnos que les ha costado simplemente dar el paso de contactar para preguntar por las clases de canto debido a su propia inseguridad o timidez que les hacía pensar a su vez que ellos no iban a ser capaces de poder cantar bien.
Por otro lado, existe el caso contrario, aquellas personas que poseyendo unas buenas condiciones naturales no se deciden a asistir a las clases de canto porque creen que ya lo saben todo y no les puede aportar nada. Es el caso, triste, de quien se enorgulleciera de "no haber asistido jamás a una clase de canto", lo cual es como decir "me creo físico cuántico y jamás recibí una clase de matemáticas" ;)
Está claro que encontrar a un profesor de canto que sepa valorar la especificidad de cada voz y sepa trabajar con cada una de ellas no es tarea fácil y el alumno debe buscar a aquel profesor que más se ajuste a sus necesidades. En cualquier caso, la guía de un profesor deviene imprescindible para un desarrollo integral de un cantante.