¿Te has preguntado alguna vez cómo se ha fabricado tu instrumento? Visitar una fábrica de instrumentos musicales -en este caso de viento-metal- es una experiencia altamente recomendable. Conocer los materiales sin manipular, observar las partes que lo componen sin ensamblar y ver el proceso de fabricación nos ayuda a comprender qué estamos tocando y cómo funciona. En internet se pueden encontrar reportajes que lo explican, pero la experiencia de verlo in situ no es comparable…
Ha llovido bastante desde que visité la fábrica de Miraphone junto a Pablo Fernández y sus alumnos. Yo, que soy de natural curioso y disfruto averiguando cómo funcionan las cosas, lo pasé en grande conociendo el proceso de fabricación y probando todas las tubas del catálogo, que la casa pone a disposición de sus visitantes en una sala acondicionada para ello.
En aquel momento mi afición a la fotografía no era la de ahora, así que las fotos que tomé entonces con mi teléfono no tienen la calidad que me gustaría hoy, y de hecho muchos de los pasos del proceso de fabricación no aparecen por este motivo, muy a mi pesar. Aún así, el reportaje ha servido para poder ilustrar este post.
En el principio fue el latón….
Lo primero a destacar son los materiales. Entrar en un almacén lleno de bobinas de latón en plancha y tubos de innumerables diametros llama la atención. Resulta un poco difícil hacerse a la idea de que todo aquel metal almacenado y de alguna manera inerte terminará siendo algo tan bello como un instrumento que servirá para hacer musica. Pero así es.
El proceso de fabricación no es lineal. Las distintas partes del instrumento toman forma en sus respectivos departamentos. Así, la campana, el cuerpo y la maquinaria se fabrican por separado para posteriormente ser ensambladas. Como hay distintos modelos que comparten alguno de estos componentes resulta muy sencillo tener un stock mínimo de piezas y montarlos según demanda.
Campana
Los componentes se hacen por remesas; el día de nuestra visita estaban fabricando campanas de trombón, como se puede observar.
La construcción de la campana comienza en la sala de patronaje. Aunque pueda parecer increíble lo que aparece en esta fotografía son patrones para fabricar campanas de los distintos instrumentos.
A partir de estos patrones se cortan las planchas con la forma que terminará teniendo la campana una vez sea curvada , como las de esta estantería.
El siguiente paso es doblar la plancha (foto izquierda) y a continuación soldar el lado contrario para unir los dos extremos y convertir la superficie plana en un tubo. La soldadura no se hace borde contra borde, sino se que practican muescas en ambos lados, que se engarzan entre sí para reforzar la unión. A continuación se pica sobre un molde la plancha ya convertida en tubo para dar la forma a la campana. Finalmente se trabaja la unión de la soldadura para que se haga imperceptible al tacto (ya que suele traspasar visualmente), primero a mano y posteriormente sobre el torno (foto derecha):
El resultado es una campana preparada para su ensamblaje con el resto del instrumento:
Cuerpo
Los tubos que componen el cuerpo de los instrumentos se hacen a partir de unas matrices que dan el ensanchamiento necesario para cada una de las piezas que lo compondrán.
Una de las partes más complicadas del proceso de fabricación de los instrumentos es el curvado de los tubos. Para este proceso se utilizan varios métodos. Normarmente se rellena con algún material (habitualmente arena) que ayude a curvarlo sin doblarlo. En primer lugar se curva el tubo con ayuda de una máquina especializada (imagen izquierda) A continuación se introduce en un molde cerrado y se le inyecta agua a presión para eliminar las arrugas que haya podido dejar la primera parte del proceso.
El resultado es un tubo curvado preparado para su ensamblaje…..
Continuará….
Cómo se fabrica un instrumento de metal, publicado en el blog de Eduard Ruano. Blog sobre la tuba, la técnica en los instrumentos de viento metal y la interpretación musical.