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Abisai Cruella, vocalista de Prueba de Cargo |
Las
clasificaciones vocales existentes hacen referencia a los
tipos de voz según su amplitud o rango vocal y dividen en soprano, mezzosoprano y contralto para las voces femeninas y en tenor, barítono y bajo para los hombres.
Los libros de canto, por tradición, hacen referencia a las notas que pueden cantar cada tipo de voz teniendo en cuenta que las voces iban a cantar sin microfonos, en teatros y por lo tanto había que trabajar las voces según la técnica clásica, es decir potenciando aquellas notas que podían adquirir mayor brillo y proyección sin amplificación artificial.
Desde mi punto de vista, hoy en día, esta clasificación se ha quedado un poco obsoleta en el ámbito de la música moderna. Seguimos diciendo que una persona tiene voz de soprano, mezzosoprano o contralto, en el caso de mujeres, y sabemos que alcanzarán a cantar determinadas notas pero la realidad es que impera el cantar con la voz mixta con predominancia del registro de pecho (mientras que la escuela clásica trabaja con esta voz mixta pero predominancia del registro de cabeza) y en las canciones se emplean tesituras más graves. Esto no quiere decir que no se tenga que trabajar el registro de cabeza ya que no hacerlo limitará las posibilidades del cantante, quiere decir que en el empleo de la vox mixta y debido a las tesituras imperará en la voz mixta, el registro de pecho.
La manera de cantar en música moderna, debido a la amplificación, permite el empleo de la voz y de efectos sonoros mucho más amplios. Estos efectos en la técnica clásica no son recomendables y están fuera de estilo.
Concretando el tema de este post y poniendo un ejemplo de lo que quiero decir, para una voz aguda de mujer, es decir, una soprano cantará en lírico desde un do3 a un do5 mientras que en la música moderna su tesitura abarcará de un la 2 a un la4. Se podría decir que las tesituras en música moderna descienden una tercera como regla general.