Que hermosa aportación la de este blog. Fundamentada y profunda.
Que ganas de que un día pueda yo llegar a manejar los elementos de este arte que es la educación -que trabaja con elementos mágicos y brillantes que son personas- con la misma elegancia y profundidad que lo hace la autora de este blog.
“Time will tell…”, que dicen los ingleses, sí… pero mientras tanto, está el ardor de la necesidad frente a generaciones que pasan y no pueden esperar a que uno tenga diez años más de experiencia. Como decía Pablo en su carta, es “un sí, pero todavía no”… y en esta tensión, hecha de múltiples intentos mejorables, se va pasando el tiempo y la vida…
Mi esperanza —cada vez más austera, más libre de otras adiposidades, y más pobre… pero también más pura, más centrada y revelando una necesidad más profunda— es que un día llegue a gestionar en mis manos las riendas de la cuadriga, en un cierto Flow state, y sepa dirigir los empujes de sus diversos corceles con la maestría que se apunta aquí, sintiendo que identifico los elementos y sus relaciones y hallar que la interacción adecuada esta dentro de mis habilidades, siendo solo cuestión de concentración y benevolencia.
Solo queda ser humilde y paciente, perseverante. Recoger los resultados del último experimento realizado, reconocer y separar el trigo de la cizaña —el mineral de la mena, lo que se pueda salvar…— y aprovecharlo para volver a plantar el bastón y continuar concentrado en el siguiente paso, sin quitar la esperanza del horizonte.