El sonido se produce gracias a la acción del arco sobre las cuerdas, concretamente a la acción de las cerdas sobre ellas. Las cerdas del arco están hechas de pelo de caballo. Éstas tienen pequeñas rugosidades visibles con un microscopio, que hacen que las cuerdas se pongan en vibración pero para que esta acción se produzca es necesario aplicar resina al arco. Por eso es importante aplicar un poco de resina cada vez que vayas a tocar. No olvides limpiar con un trapo seco tu violín cada vez que lo guardes para retirar el polvo que ésta produce. Esto ayudará a conservar mejor tu violín.
¡Feliz viernes!