Cuando repetimos un ritmo constantemente (obstinadamente), sin parar, estamos interpretando un obstinato u ostinato rítmico. Generalmente se trata de un esquema o patrón de corta duración (1 ó 2 compases) que sirve de acompañamiento a una obra musical, una canción, un recitado, etc. Podemos interpretarlo utilizando nuestro propio cuerpo (palmas, pitos...) o con instrumentos de percusión (triángulo, caja china...).
Si a ese ritmo repetitivo le añadimos notas musicales lo convertimos en un obstinado melódico que podremos interpretar bien con nuestra propia voz, bien con instrumentos de viento o de cuerda como la flauta y la guitarra, respectivamente. Prueba a crear y grabar un obstinato rítmico o melódico e improvisa (inventa) otros ritmos y melodías a la vez que se reproduce la base grabada, con la práctica conseguirás excelentes resultados.
Para que vayáis practicando algunos obstinatos os dejo el siguiente vídeo que he elaborado con la sintonía de apertura de la serie de televisión animada "El Asombroso Mundo de Gumball", serie que aúna con gran brillantez diversión, humor y un grafismo atrevido.