Si queremos escuchar nuestra canción favorita de nuestro grupo favorito solo tenemos que coger nuestro reproductor de música favorito, sentarnos en nuestro rincón favorito de la casa y darle al play tantas veces como queramos. 

Pero eso no ha sido así siempre, de hecho hasta finales del siglo XIX era prácticamente imposible escuchar otra música que no fuera la que podías oír en vivo y en directo. Ahora bien desde entonces hasta nuestros días, la carrera por enlatar el sonido, cada vez más y mejor, ha sido imparable. Pero ¿cuál fue el primero de estos aparatos, cuántos son, quiénes fueron sus inventores, cómo han evolucionado, hay alguno mejor que otro...? 

Esta era una tarea 2.0 para nuestros investigadores de 4ºESO, que por un lado tenían que pegar cada uno un aparato en este muro colaborativo: