La postura y el tejido conectivo o fascias

Gracias a Bibiana Badenes, fisioterapeuta, Rolfer y educadora en inteligencia corporal, descubrí el trabajo miofascial y su aplicación a la hora de corregir la percepción del propio cuerpo y su uso equilibrado. Os dejo su canal de Youtube donde encontraréis ejercicios valiosísimos.

En el siguiente video se explica el funcionamiento del tejido conectivo y sus aplicados en todos aquellos que trabajamos con el cuerpo. Es especialmente importante para los cantantes porque se necesita una correcta transmisión de vectores de fuerza a lo largo de todo el cuerpo para que la voz funcione a pleno rendimiento y se pueda explorar todo el potencial de la misma.

Para entender cómo funciona este equilibro fascial hay que pensar en la tensegridad, un término arquitectónico que explica que las tensiones de un extremo del una parte del edificio pueden transferirse a otro. Lo mismo sucede con el cuerpo humano y las fascias. 

Las fascias están compuestas por fibroblastos (las células del tejido conectivo) que recorren todo el cuerpo yproducen colágeno. Las fascias son tejido incoloro y pegajoso que recubre músculos, órganos y huesos. El tejido conectivo necesita movimiento para mantenerse sano y en forma. La falta de movimiento hace que las fascias se desordenen y se tornen caóticas y esto provoca una pérdida funcional. Si la fascia se vuelve rígida puede llegar a oprimir los nervios y los músculos.

La fascia lumbar conecta los hombros con la cadera, es una gran superficie de tejido conectivo. En personas sanas hay dos capas que pueden desplazarse la una sobre la otra un 65% de la superficie, cuando se padece dolor de espalda ese movimiento de deslizamiento se reduce un 50%. Si se produce demasiado colágeno se reduce el deslizamiento. El movimiento controla la sobreproducción de colágeno por parte de los fibroblastos. 

Los estiramientos activos y la acupuntura tienen un efecto relajante sobre las células y sobre el tejido desordenado. 

La fascia reacciona también independientemente de los estímulos musculares o nerviosos. Además el estrés emocional también puede provocar contracturas y dolores. 

El último factor que afecta a la salud del tejido fascial es el agua. El tejido conectivo es un gran almacén de agua. El ácido hialurónico es el lubricante del tejido conectivo que permite acumular agua y hace que se torne más o menos esponjoso. A menos ácido hialurónico menor movilidad. Entre dos capas de fascias hay ácido hialurónico, si no hay suficiente hidratación del cuerpo las fascias se mueven de manera rígida

Con el movimiento los fibroblastos liberan el colágeno desordenado, generan nuevo y las fascia se vuelve más ordenada. Cuando se hace deporte se hacen microheridas en el tejido conectivo y por ello se debe descansar después de la actividad intensa para que se regenere. Estirar y relajar el tejido conectivo reduce los dolores de espalda.