Cómo pintar en cristal, cerámica o porcelana DONLUNATIC

Hola, Donlunático.

En el post de hoy te voy a enseñar a usar la pintura para cerámica, cristal, vidrio y porcelana. Es muy fácil y lo único que tienes que hacer es hornear el trabajo una vez terminado y listo.

Te traigo 3 IDEAS para usar este tipo de pintura: un portavelas, un azulejo y una taza.

Para no perderte las novedades, PINCHA AQUÍ.

Materiales para pintar en cristal, cerámica y porcelana

  • Pintura para vidrio y porcelana
  • Pinceles
  • Agua
  • Rotuladores permanentes
  • Bastoncillos de algodón

Procedimiento para pintar en cristal, cerámica y porcelana

En este vídeo te traigo el paso a paso de cómo realizar estas tres manualidades. Son muy fáciles, perfectas para hacerlas con niños en tardes aburridas y fines de semana. Lo bonito de esta técnica es que puedes personalizarlas y ponerle nombre, dibujos favoritos, etc.

Y si te gusta la pintura, te traigo otras ideas que pueden resultarte interesantes.

CAJA DE “EL PRINCIPITO”.

Esta caja es mágica y será un regalo súper especial para alguien que sea fan de esta historia. en este vídeo puedes ver cómo pinto la caja de madera y puedes descargar el dibujo por si no se te da muy bien dibujar.

PINTURA EN TELA

En este vídeo seguimos con la pintura, pero esta vez es para tela. Te traigo varias ideas para usar este tipo de material: una camiseta, una mochila y una bolsa elegante. ¿Cuál es tu favorita?

PINTURA EN BARRIGA DE EMBARAZADA

Hace poco una amiga me pidió que si le podía pintar la barriga cuando estaba embarazada. Se me ocurrió esta idea y aquí te la dejo, un unicornio en el cielo con mucho brillo y estrellas. ¿Qué te parece?

Y hasta aquí las ideas de hoy, espero que te hayan gustado. Si haces alguna, me encantaría verlas, mándame una foto por cualquiera de mis redes sociales.

Nos vemos en la próxima idea. Chao!!!

MIS REDES SOCIALES

TWITTER   FACEBOOK   INSTAGRAM  YOUTUBE


Archivado en: MANUALIDADES Tagged: azulejo pintado, azulejos infantiles, cajas decoradas, cajas pintadas a mano, cerámica, como pintar azulejos, como pintar barriga embarazada, como pintar una mochila, cristal, manualidades para niños, pintar camiseta, pintar taza, pintura, porcelana, portavelas, portavelas original, portavelas pintado a mano, tazas originales, tazas pintadas a mano, tela, vidrio

7 consejos para los que quieren dedicarse al violín moderno.

No cabe duda que la formación que recibe un intérprete de clásico es una de las más completas que cualquier músico puede recibir, pero aun así no es suficiente para enfrentar cualquier tipo de música. Las músicas populares tienen características específicas que hay que interiorizar para llegar a desempeñar una interpretación convincente. Por muy virtuoso que uno sea, nunca llegará a dominar cualquier estilo sin antes haber investigado y trabajado duramente las características propias de ese estilo. Pensemos por ejemplo en el gran Yehudi Menuhin acompañando con toda humildad a un Stéphane Grappelli que, probablemente no posea ni la mitad de su técnica o conocimientos musicales, pero tiene el don natural del “swing”, y eso amigos, me gustaría pensar lo contrario pero, “se tiene o no se tiene”.

El gran violinista de jazz y pedagogo Christian Howes, algunos de cuyos artículos publicamos a menudo por aquí, apunta estos 7 consejos a la hora de enfrentarse al violín moderno:

1. Toca siempre dentro del groove.

Nunca pierdas el groove por ir a buscar una nota.

El groove es el ritmo específico del estilo. No sólo el ritmo en un sentido metronómico, el escrito en la partitura, sino el ritmo con la intención y las características del estilo que estemos tocando. Es una palabra muy utilizada en funky, soul, etc., pero tiene otras palabras aplicadas en otros estilos que se le asemejan, como el “swing” en el jazz, el “flow” del hip hop, el “compás” flamenco, el “shuffle” en bluegrass, etc. Cada estilo tiene sus características, una mayor o menor elasticidad respecto al patrón apuntado en la partitura que le da su personalidad. Cuando entramos en ese ritmo, cuando todos los componentes del grupo comparten ese sentido del ritmo se dice que “el tema camina”. En música clásica no se suele estar tan constreñido a un patrón rítmico fijo, salvo en formas musicales como el bolero, el pasacalle, etc., pero en el violín moderno es esencial.

Así que, suceda lo que suceda, debes subirte a ese ritmo y no salirte jamás. No puedes perderlo por titubear buscando notas. Si hay que elegir entre fallar una afinación o fallar el ritmo, busca siempre seguir en el ritmo, así además no perjudicarás al resto de compañeros músicos. Sólo cuando te toque algún solo podrás quizás tomarte libertades.

2. Toca menos. Quédate por detrás.

El groove ya tiene suficiente energía. 

Y es que no hay que estar constantemente creando frases o buscando improvisaciones, sólo cuando te toque hacer algún solo o seas solista. Si ayudas al ritmo del tema con una buena base armonizada y estarás haciendo mucho. Quédate por debajo la mayor parte del tiempo o se formará un caos de músicos intentando destacar alardeando de tocar muchas notas muy rápidamente. No se trata de demostrar lo que sabes, de demostrar que puedes tocar de forma increíble, sino de hacer una música que emocione.

3. Espera y escucha el espíritu de la música.

No te pongas a tocar a lo loco sin haber entrado en el tema.

Interioriza su espíritu, para que lo que hagas sea realmente una música creada en armonía entre varios, coherente e intensa.

4. Busca inspiración con cada nota.

Que cada nota tenga un sentido dentro del tema general.

Que lo lleve a algún sitio, que no sólo sea acumular locos arpegios o escalas sin ton ni son (los músicos tienen un nombre para ese tipo de instrumentista: “patilludo”). Si estás perdido, quédate en una sola nota hasta que sientas adonde debes ir.

5. Sé humilde, sé amable.

Y eso vale para todo en la vida.

No te pongas a quejarte, a compararte con los demás, a criticar, a competir con tus compañeros para llamar la atención: al contrario, intenta realzar lo que ellos tocan, ayudándoles.

6. Grábate a ti mismo y escucha con atención.

La grabación nunca miente.

Es duro, porque descubrirás todo lo que haces mal, pero es necesario escucharnos desde fuera. No te desalientes al escucharte, porque es normal que nos juzguemos más duramente que si escucháramos a otro, pero toma nota de todo lo que puedes y debes mejorar y trabaja en ello.

7. Canta lo que escuchas y después tócalo al violín.

Aunque no sepas cantar.

Porque deberíamos llegar a poder tocar cualquier cosa que se nos pase por la cabeza, sin tener en cuenta la facilidad para los dedos o el brazo de lo que hemos concebido, o de las hábitos por las mismas escalas y arpegios tantas veces practicados.


Fotografía: https://pxhere.com/en/photo/953111