Los acordes básicos. Los acordes mayores y menores. Su construcción y deducción.

Para comprender correctamente esta entrada es conveniente leer el artículo anterior dedicado a los intervalos.

Los acordes más sencillos que podemos utilizar sobre cualquier tema son los acordes mayores y menores. Con ellos podríamos acompañar prácticamente cualquier melodía tonal.

En teoría con solo tres acordes (I IV y V grados) podríamos acompañar cualquier melodía que no modulara, aunque evidentemente no siempre se obtiene el resultado deseado con esa simplicidad. A mucha gente que no dispone de conocimientos musicales le sorprendería observar la sencillez (armónicamente hablando) con la que están realizados muchos temas de éxito, pero todo esto es un tema para otros artículos...

Los acordes simples, mayores y menores, están compuestos de tres sonidos. El principal y que da nombre al acorde, llamado fundamental, y los otros dos que se encuentran a distancia de tercera y de quinta con respecto al primero. Por ejemplo, el acorde de Do lo componen la nota Do, su tercera (Mi) y su quinta (Sol).

Podríamos decir que estos acordes se construyen superponiendo terceras. Como se aprecia de Do a Mi hay una tercera de distancia y de Mi a Sol otra tercera.

Si la primera tercera es mayor el acorde se considera mayor, pero si la tercera es menor el acorde será un acorde menor.


Mediante este sistema, haciendo uso de las notas de la escala mayor, obtendremos tres acordes mayores y tres menores. Fijarse que los acordes mayores tienen la primera tercera mayor pero la segunda menor, a los acordes menores les ocurre exactamente lo contrario.
Esto hace que la distancia entre la primera nota del acorde llamada “fundamental” y la tercera nota de siempre un intervalo de quinta justa. (ver intervalos).
El acorde que se crea a partir del VII grado de la escala contienes dos terceras superpuestas menores por lo que la distancia de quinta que hay entre la nota fundamental y la tercera nota del acorde (de Si a Fa) es de quinta disminuida (tres tonos entre las cinco notas). Por ello el acorde de VII grado se clasifica como acorde disminuido.

Como se aprecia en la imagen de Si a Re existe una tercera menor y de Re a Fa otra tercera menor, en total tres tonos que generan un intervalo de quinta disminuida.

Esta es la raíz de la armonía tonal, por ello el comentario inicial que expresaba que con tan solo el uso de acordes mayores y menores se puede acompañar cualquier fragmento melódico. El resto de acordes que solemos utilizar (7ª, 9ª, alterados, etc…) surgen a partir de esta base y se usan para definir mejor, en sus respectivos contextos, el sentimiento armónico o justificar verticalmente un discurso melódico más rico. Es obvio que el uso de tensiones añadidas sopbre estos acordes es indispensable para entender gran parte de la música tonal que hoy conocemos, pero salvo excepciones podríamos afirmar que los acordes mayores y menores forman el esqueleto armónico de la música tonal, con todo lo que ello abarca.

TALLER FLAMENCO 2º ciclo

Para rematar el taller de flamenco que hemos hecho en clase de música como trabajo posterior al espectáculo que vimos en La Pocilla, os dejo escuchando uno de los tangos cantados por esta magnífica cantaora, Estrella Morente. Fijaos en los ritmos que hemos trabajado, en la guitarra y en el acompañamiento de las palmas.

Congreso Escuela 2.0 (II)

Con el Ministro

Rafael García, Jefe de Servicio de Innovación Educativa, Ángel Gabilondo, Ministro de Educación, Antonio Escámez, Delegado Provincial de Educación, Maribel Del Río, profesora, Massimo Pennesi, profesor. (Foto: F. Muñoz)

Es muy probable que al oír hablar del Proyecto Escuela 2.0 lo primero que nos venga a la mente sean los ordenadores ultraportátiles que reciben los alumnos y alumnas de ciertos niveles educativos para utilizarlos en sus estudios, tanto en el aula como en casa. Eso tiene su lógica, pues mientras por un lado es la partida que más inversión económica ha necesitado, por el otro es lo único visible y tangible por el alumnado y sus familias. En otras palabras: es lo más vistoso. Pero, ¿es realmente lo más importante?

Por mi parte estoy convencido de que esa máquina es necesaria, pero su importancia no es intrínseca, sino que está estrechamente vinculada a su capacidad de convertirse en una ventana al mundo. Sin embargo, para eso también tiene que estar presente algo menos visible y tangible que el ordenador en sí, pero igualmente o aún más importante que éste: una  buena  conexión a Internet. Mientras no se dote a los centros educativos del ancho de banda y de la cobertura Wi-Fi necesarios, no será posible aprovechar plenamente el esfuerzo económico de la compra de los ordenadores y se desperdiciará gran parte del potencial educativo de la web 2.0.

Mi contribución al Congreso Escuela 2.0, una comunicación titulada La web 2.0 en el aula, no tenía mayor pretensión que presentar mi experiencia en el uso educativo del ordenador y el gran salto de calidad que ha comportado la entrada de la web 2.0 en la escuela. Antes de ese momento el ordenador era una útil herramienta de trabajo para el profesor pero no era capaz de producir ningún cambio metodológico: en otras palabras, nos ayudaba en una parte de nuestro trabajo, la elaboración de ciertos materiales curriculares, pero en el fondo todo seguía igual: el rol del alumnado era pasivo. De hecho, el ordenador desconectado no nos permite la búsqueda de la información más allá de los límites de lo que esté guardado en el disco duro, ni nos facilita la comunicación y el trabajo colaborativo, sólo por poner un par de ejemplos.

Podríamos hacer una comparación entre el ordenador y el autobús que lleva a mis alumnos y alumnas al instituto todas las mañanas: sin bus no hay clase, y no se aprende nada, de acuerdo, pero ¿de qué serviría el transporte si al llegar encontraran el centro vacío y cerrado? El uso del ordenador no puede limitarse a mejorar la presentación de las tareas, indudablemente más limpias y atractivas que hechas a mano (hoy he ido a la escuela con el bus, llovía y no me he mojado), sino que hay que aprovechar la posibilidad de conseguir información, analizarla, filtrarla y reelaborarla para construir nuevo conocimiento (hoy he ido a la escuela con el bus, llovía, no me he mojado y, una vez allí, he trabajado y aprendido mucho).

En ese contexto se movía mi intervención, con la intención de mostrar el potencial educativo del ordenador conectado a la web 2.0. La parte central de la charla consistió en la descripción de educacionmusical.es y, sobre todo, de la experiencia educativa que  este sitio web representa, destacando de manera especial el trabajo realizado por el alumnado, tareas que integran varios ámbitos curriculares y que estimulan el desarrollo de casi todas las competencias básicas. La exposición estuvo acompañada por la siguiente presentación.

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Congreso Escuela 2.0 (I)

Parte de la representación andaluza

Parte de la representación andaluza: Maribel Del Río, profesora del IES Torre del Prado, Massimo Pennesi, profesor del IES Vega de Mijas, Antonio Escámez, Delegado Provincial de Málaga, y Rafael García, Jefe de Servicio de Innovación Educativa de la Consejería de Educación

Las principales críticas que he podido leer en Twitter y en los blogs que, antes de éste, se han hecho eco del Congreso Escuela 2.0 que se celebró durante los dos días pasados en Madrid, se refieren sobre todo al poco espacio dedicado a experiencias en el aula y al poco tiempo destinado al debate.

De hecho, a pesar del programa muy intenso, sólo durante la primera tarde pudimos escuchar algo sobre lo que realmente nos apasiona a los que trabajamos en las aulas: una conferencia sobre innovación pedagógica que nos ofreció Manuel Área y dos horas y cuarto de comunicaciones organizadas por talleres que se desarrollaban simultáneamente en 5 salas. Cuando se publiquen los vídeos de esas 5 mesas podré escuchar las intervenciones a las que no pude asistir personalmente, cuyo contenido es seguramente el que más puede repercutir en mi trabajo de todo lo que nos ofreció el evento.

En la mesa en la que participé presentamos nuestra experiencia en las aulas de 1º y 2º de ESO. De mi intervención hablaré en otro momento: ahora sólo felicitar muy sinceramente a los otros 5 ponentes, que han demostrado cómo se puede motivar al alumnado llevando el mundo al aula y el aula al mundo gracias a Internet y la Web 2.0.

En este sentido, quiero destacar la intervención de Diego Sobrino, en la que describe, entre otras, dos interesantísimas experiencias: un estupendo trabajo de investigación, realizado colaborativamente por su alumnado en un contexto tan significativo como el de su propio pueblo, con el apoyo de la tecnología y de los sistemas de información geográfica e integrando varios ámbitos curriculares, y un congreso “ficticio” sobre la historia de la España del siglo XVII, en el cual los protagonistas fueron los mismos alumnos y alumnas.

La mañana siguiente empezó con una mesa redonda totalmente prescindible en la cual algunas empresas estuvieron magnificando su aportación al Proyecto Escuela 2.0 (y de paso aprovechando para hacer publicidad de sus productos, en algunos casos de manera muy descarada) en general bastante más de lo merecido. La mesa comenzó con el turno de las editoriales, empezando por las representadas por el presidente de ANELE, bien conocido por su animadversión a los repositorios institucionales de contenidos educativos, que en su momento no dudó en definir como competencia desleal, y al profesorado que comparte libre y desinteresadamente sus materiales curriculares, a quienes nos acusó de intrusismo. El tema es candente y merece ser tratado en una entrada aparte, que espero publicar muy pronto.

Por otro lado, sólo dedicaré pocas líneas a las empresas de telecomunicaciones, representadas ayer  por dos de las más importantes operadoras de nuestro país, más preocupadas por poner filtros, barreras, antivirus y limitaciones temporales al acceso a Internet que por proporcionar una conectividad de calidad a precios justos.

Tras las pizarras digitales, fue el turno de los representantes de las Administraciones Educativas de algunas de las comunidades autónomas que participan en el proyecto, que explicaron cómo se está llevando a cabo el desarrollo del mismo en la región de su competencia. Aunque estábamos en Madrid, estaba claro que nadie representaría a esta comunidad, que no participa en el Proyecto Escuela 2.0 debido a la infundada y politicamente interesada preocupación de sus gobernantes por la salud ocular de los niños y niñas madrileños: armada de valor y protegida por sus gafas potachóvicas, colándose en el evento al más puro estilo CQC, @yolajb se presentó ante el Ministro de Educación, que acababa de clausurar el congreso, para decirle cuatro verdades de las que destacaré una: “dos no se pelean si uno no quiere”.

tuit de @yolajb

Estaba suficientemente cerca como para oír las palabras que intercambiaron los protagonistas de esta escena imprevista y creo haber entendido muy bien el mensaje dirigido al mundo de la política: dejen de usar la escuela y al alumnado como rehenes inocentes de su lucha por el poder. Faltaba una de las dos partes: esperemos que alguien le haya transmitido el mensaje.

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Los Simpsons y el modo Lidio b7

 
















La escala lidia b7, frecuentemente llamada lidia de dominante por su asociación a los dominantes sustitutos, se genera a partir del IV grado del modo menor melódico.
Su uso, como comentaba, está ligado, sobre todo en el ámbito jazzístico y fusión, al acorde de IIb7 o IIb7#11, cuando realiza función de dominante sustituto. Un uso bastante menos común, entre otros, se encuentra en algunos enfoques dentro del Blues, cuando se utiliza la escala mayor en lugar de la pentatónica, se utiliza escala por acorde y se cambia el VII grado de la escala sobre el acorde de IV grado por la blue note.
Menos habitual es encontrarla como escala principal de un tema y bastante menos como única escala estructural. Esto es precisamente lo que ocurre con el tema principal de la serie de animación The Simpsons.
Su compositor, Danny Elfman aprovecha las características más llamativas que estructuran la escala, como son su IV grado elevado característico del modo lidio y el VII grado menor proveniente de la escala melódica, para generar un discurso melódico (valga la redundancia) que funciona de una manera altamente accesible para el oyente no acostumbrado a este tipo de lenguajes.
El tema principal es muy breve y se repite reiteradamente en diferentes tonalidades, lo cual ayuda a familiarizarse con él y a que se establezca como motivo. Un segundo tema con características similares utiliza la lidio b7 y elementos del motivo principal por lo que no se aleja demasiado de su enunciado y ayuda a que procesemos fluidamente el tema en las primeras escuchas.

Aquí se puede observar el uso de la escala en tono de Do Lidio b7 como materia prima del tema principal:
La parte b del tema también hace uso de la escala, en este caso en tono de Mi lidio b7:

Escala Mi lidio b7:
Perdiéndome por Internet encontré un artículo que asociaba el uso de la escala con “la inestabilidad de la familia tipo americana” y también realizaba ciertos paralelismos sobre parte de uno de los motivos principales del tema “Maria” del musical “West Side History”. Desconozco si es cierto o no y no he encontrado el momento de investigar sobre esto. En todo caso, sea cierto o no, me parece interesante que aquella disertación pasara por la cabeza de alguien…