Música prohibida: Los nazis.

¿Qué poder tiene la música para que algunos regímenes totalitarios hayan querido manipularla, prohibirla o alterarla?. Imagino que en algunos casos porque la música representa parte de una cultura, a menudo de un modo particularmente intenso, que se quiere reprimir. En otros porque esos “efectos emocionales” e intensos eran considerados contrarios a unos determinados valores.
No hace mucho publiqué un artículo en hispasonic sobre la percepción de poder que durante la historia hemos tenido de este arte. En él me planteaba lo inocua que, para mí, es la música en sí misma y lo tremendamente poderosa que puede resultar si se mezcla con otras cosas, como ideas políticas o capítulos de nuestra vida cotidiana

La música es algo inocente si no la mezclan con otros elementos, incluso en sus géneros más “agresivos”. Es más, lo que se puede considerar música agresiva o dura con el tiempo suele contemplarse de un modo mucho más suave. La agresividad y brutalidad real del hombre no caduca con el paso de los años y los siglos.

Es de sobra conocido el odio que tenían los nazis por toda música negra y de origen judío. Por ejemplo la música de Mendelshon fue prohibida en 1934 por ser el compositor de origen judío (aunque luego se convirtiera al cristianismo) . Así mismo el fervor de los nazis por la música nacional de compositores alemanes como Bach, Beethoven y como no, Wagner con su peculiar “antisemitismo” ,era exagerada. Precisamente Wagner, en particular, fue ensalzado y “utilizado” en numerosas ocasiones por Hitler debido a su visión sobre la pureza racial de los Alemanes.

En 1938 fue organizada en Alemania por Goebbels, ministro de Propaganda del Tercer Reich, una exposición que llevaba por título “Música degenerada” (ya había organizado otra el año anterior titulada “Arte degenerado” en los que incluía a Kandinsky o Picasso entre otros). En ella se incluían grabaciones y partituras de Artistas “degenerados” como Mendelshon, Malher, Hindemith, Stravinsky, así como, obras de Jazz y música negra. Curiosamente este evento tuvo el efecto contrario, fue mucha la gente que descubrió nuevas músicas a las que hasta ese momento no había tenido acceso y Goebbels no dejó que la prensa hiciera mención sobre ella.

El orden ( o al menos la visión que los nazis tenían de él) también era objeto de obsesión por lo que toda música atonal y la mayoría de la música moderna o innovadora de la época también se prohibía y con ella el vasto repertorio de importantes (y menos importantes) compositores. La música debía cumplir con los standares clásicos, especialmente los románticos.

En el libro “El saxofón bajo” de Josef Skyorecky. El autor relata en el prólogo sus experiencias personales bajo la invasión nazi e incluye, a modo de ilustración, un decálogo que fue enviado a las agrupaciones musicales del momento (agradezco a los colegas del blog “la clave de Fa” que en su día lo publicaran) Un documento histórico que representa, de forma explícita, el control que pretendían tener los Nazis sobre la música. La primera vez que lo leí me costó creer que no se tratara de un texto ficticio.


Ozzy Osbourne, Offenbach y Pink Floyd entre las Novedades literarias de este mes

I am Ozzy (confieso que he bebido): Memorias de Ozzy Osbourne
Ozzy Osbourne

Nacido en Aston, Birmingham, en 1948, Osbourne es uno de los pocos roqueros del ala dura que ha vendido más de 100 millones de discos junto al mítico grupo Black Sabbath y a lo largo de su laureada carrera en solitario.

«Mi padre siempre me dijo que un día haría algo grande. “Tengo un presentimiento, John Michael Osbourne”, solía decirme, después de haberse tomado unas cuantas cervezas: “acabarás haciendo algo muy especial… o acabarás en prisión”. Y lo cierto es que el viejo llevaba razón: fui encarcelado poco antes de alcanzar la mayoría de edad...» Ozzy Osbourne

De cualquier “príncipe de las tinieblas” que se precie esperaría uno encontrarse con la crónica pormenorizada de una existencia no exenta de vertiginosos descensos a los infiernos. Lo cierto es que muchas de sus gestas no nos son desconocidas. ¿Qué queda entonces por contar en unas memorias? Felizmente, mucho, y tan patético e hilarante como sus célebres y celebradas excentricidades de antaño. Osbourne perdió, si jamás lo tuvo, el poco sentido del ridículo que le asistía hace ya mucho tiempo y el decoro no parece quitarle el sueño. Su vida ya era un culebrón mucho antes de que la cadena de television MTV empezará a documentarla. […] Su “negro” ha conseguido preservar la oralidad de la crónica, vertida previamente en cinta, confiriéndole a su voz su idiosincrásica y horrísona
impronta. Probablemente les resulte imposible reprimir la tentación de contar muchas de las anécdotas que en este libro se cuentan. The Guardian.

Editorial: Global Rhythm Press
Año de la edición: 2011
Traductor: Pablo Álvarez
Encuadernación: Rústica con solapas
Formato: 13x23
Páginas: 450
Idiomas: Castellano

Isaac Offenbach y su hijo Jacques o "No todos los días se festeja Purim"
Kaufmann, Jacobo

En casi cada una de las obras de Jacques Offenbach (óperas, operetas, canciones y composiciones para el violoncelo) aparecen frecuentemente melodías inesperadas que no tienen prácticamente nada que ver con las culturas y artes musicales de Alemania o Francia. Anton Henseler fue el primero en ocuparse de los ingredientes judíos presentes en la música de Jacques Offenbach, y ofrece varios ejemplos en los que se detecta un marcado parecido entre algunas obras de Jacques y ciertos temas de la liturgia judía. En este libro, Jacobo Kaufmann profundiza en las composiciones litúrgicas de su padre, Isaac Offenbach, cantor de sinagoga, y en el profundo vínculo que establecieron padre e hijo en la vida y en la música.



Editorial: Sefarad Editores (Horacio-A. Kohan Starcman)
Año de la edición: 2011
Encuadernación: Rústica con solapas
Formato: 22x14,5
Páginas: 254
Idiomas: Castellano

The Wall: Pink Floyd
Muniesa, Mariano

The Wall a pesar de ser hoy en día un disco clásico de una de las grandes formaciones del rock, como fueron los británicos Pink Floyd, en su momento fue un álbum que no caló en la prensa musical que lo criticó agriamente y lo defenestró. La repercusión en los medios especializados y generalistas no fue buena. No fue así en cambio la repercusión en las ventas de discos y de entradas de sus conciertos, a pesar de que la gira fue ruinosa para el grupo. En cambio la película que idearon junto al director Alan Parker fue un rotundo éxito de taquilla, que del mismo modo que el álbum, fue criticada negativamente por la prensa. Esta es la narración de una paradoja que se ha dado en diversas ocasiones a lo largo de la historia del rock, los gustos de los fans vs los de la llamada crítica musical.
Todas las aristas, ángulos, facetas, interpretaciones que esa gran obra llamada The Wall contiene son ampliamente analizadas y explicadas en el desarrollo de este libro, la primera obra en castellano monográfi ca sobre el inagotable mundo de ideas, visiones y sensaciones que The Wall ofrece a quienes se acercan a adentrarse en su mundo.

Editorial: Quarentena Ediciones
Año de la edición: 2011
Colección: Discos que marcaron una época
Encuadernación: Rústica con solapas
Formato: 15x21
Páginas: 144
Idiomas: Castellano


Fuente: El argonauta/prensa

Ozzy Osbourne, Offenbach y Pink Floyd entre las Novedades literarias de este mes

I am Ozzy (confieso que he bebido): Memorias de Ozzy Osbourne
Ozzy Osbourne

Nacido en Aston, Birmingham, en 1948, Osbourne es uno de los pocos roqueros del ala dura que ha vendido más de 100 millones de discos junto al mítico grupo Black Sabbath y a lo largo de su laureada carrera en solitario.

«Mi padre siempre me dijo que un día haría algo grande. “Tengo un presentimiento, John Michael Osbourne”, solía decirme, después de haberse tomado unas cuantas cervezas: “acabarás haciendo algo muy especial… o acabarás en prisión”. Y lo cierto es que el viejo llevaba razón: fui encarcelado poco antes de alcanzar la mayoría de edad...» Ozzy Osbourne

De cualquier “príncipe de las tinieblas” que se precie esperaría uno encontrarse con la crónica pormenorizada de una existencia no exenta de vertiginosos descensos a los infiernos. Lo cierto es que muchas de sus gestas no nos son desconocidas. ¿Qué queda entonces por contar en unas memorias? Felizmente, mucho, y tan patético e hilarante como sus célebres y celebradas excentricidades de antaño. Osbourne perdió, si jamás lo tuvo, el poco sentido del ridículo que le asistía hace ya mucho tiempo y el decoro no parece quitarle el sueño. Su vida ya era un culebrón mucho antes de que la cadena de television MTV empezará a documentarla. […] Su “negro” ha conseguido preservar la oralidad de la crónica, vertida previamente en cinta, confiriéndole a su voz su idiosincrásica y horrísona
impronta. Probablemente les resulte imposible reprimir la tentación de contar muchas de las anécdotas que en este libro se cuentan. The Guardian.

Editorial: Global Rhythm Press
Año de la edición: 2011
Traductor: Pablo Álvarez
Encuadernación: Rústica con solapas
Formato: 13x23
Páginas: 450
Idiomas: Castellano

Isaac Offenbach y su hijo Jacques o "No todos los días se festeja Purim"
Kaufmann, Jacobo

En casi cada una de las obras de Jacques Offenbach (óperas, operetas, canciones y composiciones para el violoncelo) aparecen frecuentemente melodías inesperadas que no tienen prácticamente nada que ver con las culturas y artes musicales de Alemania o Francia. Anton Henseler fue el primero en ocuparse de los ingredientes judíos presentes en la música de Jacques Offenbach, y ofrece varios ejemplos en los que se detecta un marcado parecido entre algunas obras de Jacques y ciertos temas de la liturgia judía. En este libro, Jacobo Kaufmann profundiza en las composiciones litúrgicas de su padre, Isaac Offenbach, cantor de sinagoga, y en el profundo vínculo que establecieron padre e hijo en la vida y en la música.



Editorial: Sefarad Editores (Horacio-A. Kohan Starcman)
Año de la edición: 2011
Encuadernación: Rústica con solapas
Formato: 22x14,5
Páginas: 254
Idiomas: Castellano

The Wall: Pink Floyd
Muniesa, Mariano

The Wall a pesar de ser hoy en día un disco clásico de una de las grandes formaciones del rock, como fueron los británicos Pink Floyd, en su momento fue un álbum que no caló en la prensa musical que lo criticó agriamente y lo defenestró. La repercusión en los medios especializados y generalistas no fue buena. No fue así en cambio la repercusión en las ventas de discos y de entradas de sus conciertos, a pesar de que la gira fue ruinosa para el grupo. En cambio la película que idearon junto al director Alan Parker fue un rotundo éxito de taquilla, que del mismo modo que el álbum, fue criticada negativamente por la prensa. Esta es la narración de una paradoja que se ha dado en diversas ocasiones a lo largo de la historia del rock, los gustos de los fans vs los de la llamada crítica musical.
Todas las aristas, ángulos, facetas, interpretaciones que esa gran obra llamada The Wall contiene son ampliamente analizadas y explicadas en el desarrollo de este libro, la primera obra en castellano monográfi ca sobre el inagotable mundo de ideas, visiones y sensaciones que The Wall ofrece a quienes se acercan a adentrarse en su mundo.

Editorial: Quarentena Ediciones
Año de la edición: 2011
Colección: Discos que marcaron una época
Encuadernación: Rústica con solapas
Formato: 15x21
Páginas: 144
Idiomas: Castellano


Fuente: El argonauta/prensa

Ozzy Osbourne, Offenbach y Pink Floyd entre las Novedades literarias de este mes

I am Ozzy (confieso que he bebido): Memorias de Ozzy Osbourne
Ozzy Osbourne

Nacido en Aston, Birmingham, en 1948, Osbourne es uno de los pocos roqueros del ala dura que ha vendido más de 100 millones de discos junto al mítico grupo Black Sabbath y a lo largo de su laureada carrera en solitario.

«Mi padre siempre me dijo que un día haría algo grande. “Tengo un presentimiento, John Michael Osbourne”, solía decirme, después de haberse tomado unas cuantas cervezas: “acabarás haciendo algo muy especial… o acabarás en prisión”. Y lo cierto es que el viejo llevaba razón: fui encarcelado poco antes de alcanzar la mayoría de edad...» Ozzy Osbourne

De cualquier “príncipe de las tinieblas” que se precie esperaría uno encontrarse con la crónica pormenorizada de una existencia no exenta de vertiginosos descensos a los infiernos. Lo cierto es que muchas de sus gestas no nos son desconocidas. ¿Qué queda entonces por contar en unas memorias? Felizmente, mucho, y tan patético e hilarante como sus célebres y celebradas excentricidades de antaño. Osbourne perdió, si jamás lo tuvo, el poco sentido del ridículo que le asistía hace ya mucho tiempo y el decoro no parece quitarle el sueño. Su vida ya era un culebrón mucho antes de que la cadena de television MTV empezará a documentarla. […] Su “negro” ha conseguido preservar la oralidad de la crónica, vertida previamente en cinta, confiriéndole a su voz su idiosincrásica y horrísona
impronta. Probablemente les resulte imposible reprimir la tentación de contar muchas de las anécdotas que en este libro se cuentan. The Guardian.

Editorial: Global Rhythm Press
Año de la edición: 2011
Traductor: Pablo Álvarez
Encuadernación: Rústica con solapas
Formato: 13x23
Páginas: 450
Idiomas: Castellano

Isaac Offenbach y su hijo Jacques o "No todos los días se festeja Purim"
Kaufmann, Jacobo

En casi cada una de las obras de Jacques Offenbach (óperas, operetas, canciones y composiciones para el violoncelo) aparecen frecuentemente melodías inesperadas que no tienen prácticamente nada que ver con las culturas y artes musicales de Alemania o Francia. Anton Henseler fue el primero en ocuparse de los ingredientes judíos presentes en la música de Jacques Offenbach, y ofrece varios ejemplos en los que se detecta un marcado parecido entre algunas obras de Jacques y ciertos temas de la liturgia judía. En este libro, Jacobo Kaufmann profundiza en las composiciones litúrgicas de su padre, Isaac Offenbach, cantor de sinagoga, y en el profundo vínculo que establecieron padre e hijo en la vida y en la música.



Editorial: Sefarad Editores (Horacio-A. Kohan Starcman)
Año de la edición: 2011
Encuadernación: Rústica con solapas
Formato: 22x14,5
Páginas: 254
Idiomas: Castellano

The Wall: Pink Floyd
Muniesa, Mariano

The Wall a pesar de ser hoy en día un disco clásico de una de las grandes formaciones del rock, como fueron los británicos Pink Floyd, en su momento fue un álbum que no caló en la prensa musical que lo criticó agriamente y lo defenestró. La repercusión en los medios especializados y generalistas no fue buena. No fue así en cambio la repercusión en las ventas de discos y de entradas de sus conciertos, a pesar de que la gira fue ruinosa para el grupo. En cambio la película que idearon junto al director Alan Parker fue un rotundo éxito de taquilla, que del mismo modo que el álbum, fue criticada negativamente por la prensa. Esta es la narración de una paradoja que se ha dado en diversas ocasiones a lo largo de la historia del rock, los gustos de los fans vs los de la llamada crítica musical.
Todas las aristas, ángulos, facetas, interpretaciones que esa gran obra llamada The Wall contiene son ampliamente analizadas y explicadas en el desarrollo de este libro, la primera obra en castellano monográfi ca sobre el inagotable mundo de ideas, visiones y sensaciones que The Wall ofrece a quienes se acercan a adentrarse en su mundo.

Editorial: Quarentena Ediciones
Año de la edición: 2011
Colección: Discos que marcaron una época
Encuadernación: Rústica con solapas
Formato: 15x21
Páginas: 144
Idiomas: Castellano


Fuente: El argonauta/prensa

Acordes de séptima. Acordes en movimiento o notas de color

 Hace poco hablamos del acorde de 7ª de dominante. Pero no es el único tipo de acorde con séptima que podemos generar a partir de los acordes que surgen de las siete notas de la escala mayor.
Vimos también anteriormente los intervalos y comprobamos que existían principalmente dos tipos de séptimas: Las mayores y las menores. La combinación de estos dos tipos de séptimas unido a la modalidad de los acordes simples triada (de tres sonidos) mayores y menores darán lugar a cuatro tipos de acordes de 7ª diferentes. Veamos los acordes que se forman sobre cada una de las notas de la escala mayor:


El I es mayor séptima, el II menor séptima, el III también menor séptima, el IV mayor séptima, el V séptima de dominante, el VI menor séptima y el VII menor séptima con la quinta disminuida (este último suele ser considerado un acorde de novena con la fundamental omitida).

Como se observa las diferencias se encuentran ntre los intervalos de tercera (M o m) y de septima (también M o m), el intervalo de quinta, salvo en el VII que es disminuido, es el mismo, el de una quinta justa.

La séptima es una disonancia ya que genera una fricción entre dos sonidos consecutivos.
En la escritura musical tradicional, la séptima que al principio no era más que un intervalo contrapuntistico que se formaba verticalmente (acorde) por el movimiento horizontal (melodía) de las voces más o menos independientes, estaba sujeta a unas estrictas normas de preparación y resolución que compensaban la tensión que generaban al producirse.
Las principales normas eran que estas notas descendieran por movimiento conjunto en el siguiente acorde (o ascendiera si la séptima era la nota sensible) o fueran absorbidas por este último. En cuanto a la preparación consistia en que la séptima fuera escuchada en el acorde anterior y prolongada sobre el acorde que la convertía en nota séptima.
Preparación de la séptima


Resolución de la Séptima
En la práctica actual el oído esta acostumbrado a todo tipo de resoluciones por lo que existe una libertad completa al respecto. En todo caso recurrimos a la resolución tradicional si buscamos una sonoridad estilistica concreta o a un mayor control de la disonancia desde el punto de vista horizontal.

Desde hace más de un siglo las séptimas en muchos casos, al igual que otras disonancias, son incorporadas a los acordes para “colorealos”, darles una sonoridad especial y no necesariamente como un elemento melódico. Por lo que una resolución especial, de tipo melódico, no resulta tan recurrente.

Las séptimas pueden utilizarse libremente como notas de “adorno” en nuestros acordes o dotarlas de un movimiento melódico y por consiguiente ser más influyentes en la transición entre acordes. Para muchos oidos resultara casi imposible abstraerse, si no se hace un esfuerzo, de ese movimiento horizontal ya que la música no es un arte estático y esto resulta importante tenerlo en cuenta al hacer uso de ellas. En todo caso el carácter resolutivo de las disonancias puede ser explicito o sutil dependiendo del contexto y arquitectura de la obra. De nosotros depende hacer un uso u otro del lenguaje, y de él dependerá el carácter que cobre nuestra música.