San Silvestre de Gijón

Correr la San Silvestre de Gijón significa participar en la segunda San Silvestre más antigua de nuestro país.
 
En la edición de este año se volvió a batir el récord de participación al alcanzar los 4500 inscritos a los que, a buen seguro, se deberían sumar otros muchos participantes que la corrieron sin dorsal, aunque eso...es mejor no hacerlo, especialmente en las categorías superiores. La organización cuenta con un número determinado de participantes y las medidas de seguridad se pueden ver desbordadas ante una participación más numerosa de lo esperado.
 
Esta entrada no va dedicada a sus vencedores absolutos, Marcos Peón en categoría masculina y Beatriz Álvarez en la femenina. Desde aquí la más que merecida enhorabuena para ellos y el resto de personas que se subieron al podium, pero esta entrada va dedicada al resto de participantes, a todas las personas que corrieron esa carrera, cada una de ellas con una motivación, con un fin en mente.
 
Además, en esta edición había más clarinetistas y saxofonistas, y guitarristas, que en otras ocasiones. Mi enhorabuena para todas esas personas y que esta no sea su primera y última San Silvestre. Que esta carrera sea la primera de otras muchas a lo largo de toda su vida. Por que correr es mucho más que correr. Es mucho más que un ejercicio físico. Es además un ejercicio mental. Os dejo con este vídeo que lo demuestra.
 

El Principito y el nativo digital


¿Conocéis el libro titulado "El Principito", de Antoine de Saint-Exupéry? Entonces lo primero que deberíais hacer es pedir un ejemplar del mismo como regalo de Reyes Magos. Es muy breve! Merece la pena.
 
 
Lo que os presento en esta entrada es un guiño relacionado con dos anteriores en las que os invitaba a reflexionar sobre el uso de móviles, redes sociales, etc. Me refiero a Aprendiendo a decir no y a Realidad virtual y soledad.
 
En este caso, y siguiendo con la temática de esas entradas, os dejo con el trabajo de Carlos Lavida y Regina Carrá. El primero ilustra el acertado texto creado por ella, y los dos han imitando a Saint-Exupéry para presentarnos lo que ellos llaman "el capítulo perdido" de El Principito. 

 
¿Qué os parece? Las fechas navideñas son por tradición momentos en las que los buenos propósitos afloran. Quizás más de una persona se sienta identificada con el Principito y otras muchas con el nativo digital.
 
Os dejo reflexionando y para quien se haya quedado intrigado con el libro y su autor, aquí os dejo tres enlaces para saciar esa curiosidad:
 
- el enlace a wikipedia donde se explican todas las metáforas que encierran los personajes del libro. Quienes no lo hayan leído, por favor, que se aguanten las ganas de consultarlo hasta después de completar la lectura.
 
- un artículo de El País donde se dan a conocer dos páginas inéditas, éstas sí de verdad son de Saint-Exupéry.
 
- y otro artículo de El País, en el que se someten a estudio las extrañas circunstancias en las que falleció el autor de "El Principito" en un "accidente" aéreo.
 
Curiosamente antes de su muerte, dejó una nota en su casa que decía: "Si me derriban no extrañaré nada. El hormiguero del futuro me asusta y odio su virtud robótica. Yo nací para jardinero. Me despido, Antoine de Saint-Exupéry".
 
Insisto, el libro no tiene más de 100 páginas y puede despertar vuestra imaginación mucho mejor que las imágenes. De todos modos os dejo con la película, que tampoco está nada mal.
 
 

Feliz Navidad, con protector solar!

 
Soy de esas personas que aún escriben a mano felicitaciones tradicionales por navidad. Que seleccionan la felicitación por su imagen según a quién va dirigida. Que no se conforma con dejarlas en Correos para que las selle una máquina, sino que pide los sellos que necesita y los coloca uno a uno (ahora son pegatinas) antes de echarlas al buzón, aún a sabiendas de que tardarán un poco más en llegar. 
Se me ha duplicado el trabajo. Ahora también felicito con ayuda de las nuevas tecnologías. Y esta entrada es mi Postal virtual: Feliz Navidad y Próspero Año Nuevo! Y no se olviden del protector solar, con este buen clima que tenemos!! Os dejo con un vídeo que me parece una joya.
 

Realidad virtual y soledad

¿Estar virtualmente conectado...te aleja de los demás? ¿Te aisla de la realidad?
 
¿Detrás de esa necesidad de estar conectado... hay mucha soledad? ¿Detrás de esos regalos de adultos a menores no habrá un "soborno" o un "es la única forma de que nos dejen tranquilos"?
 
En estas fechas muchas personas recibirán el esperado regalo de última generación que les permitirá estar conectados. Espero que sepan utilizarlo en su justa medida. Ya lo decía Aristóteles: "La virtud está en el medio".
 
Os dejo con un breve vídeo que me parece muy significativo.




Deportividad

El gesto de Iván Fernández, en el Cross Hiru Herri de Burlada (Navarra), merece un aplauso.
 
Este atleta que llegaba a la meta en segundo lugar, se dio cuenta que el primer clasificado, Abel Mutai, se despistaba y frenaba antes de proclamarse realmente vencedor. 
 
En vez de adelantarle y aprovecharse del error del keniata, lo que hizo fue animarle a que siguiera corriendo hasta realmente cruzar la línea de meta.
 
¿Es un gesto elogiable, verdad? Y más en los tiempos que corren. Es un modelo a imitar que podemos extrapolar como lección a cualquier ámbito de la vida y no solamente el deportivo. Me parece que es un ejemplo para la sociedad.
 
En el siguiente vídeo, realizado con una sucesión de fotos, vemos el momento de la llegada. Lo he encontrado en el blog de Patxi Mendiburu.
 
Y en el blog que Iván Fernández tiene en su web, en la entrada fechada el 3 de diciembre, él mismo nos relata su experiencia en primera persona.
 
Mi enhorabuena para Iván. Y gracias por su muestra de deportividad.