¿No sientes que tu voz sea una sola voz? ¡Vamos a homogeneizarla!

una voz homogeneaA veces parece que sólo tenemos que conseguir una o dos cosas más en nuestra voz para conseguir la voz que queremos, ¿verdad?

Me refiero por ejemplo a ser capaz de cantar esa nota aguda, o a conseguir más volumen en cierta parte de una canción, a no quedarte sin aire en una frase muy larga, …

¿Te ha pasado?

Es normal que te pase, porque nunca dejas de aprender a usar mejor tu voz, y cada vez que descubres algo nuevo y avanzas, te das cuenta de las cosas que quedan por aprender de las que antes no te habías dado cuenta.

Pero, en mi opinión, si alguien me preguntase qué es lo más importante a tener en cuenta al entrenarte como cantante mi respuesta sería:

El objetivo más importante que debes tener en cuenta es que tu voz sea homogénea, desde la nota más grave de tu rango hasta la más aguda.

Y esa sería mi respuesta porque es lo que te va a llevar en la dirección correcta a nivel técnico.

Pero profundicemos un poco más.

¿Qué quiere decir tener una voz homogénea?

Una búsqueda rápida en el señor Google me da esta definición para la palabra homogénea:

Que es igual para los diversos elementos que forman un determinado grupo o conjunto.

Traduciendo esto a tu voz me refiero a que no debe haber ningún cambio drástico en la forma en la que emites el sonido, ni en el sonido en sí.

Seguro que esto te recuerda a lo que hemos hablado con anterioridad en innumerables artículos, como mantener un volumen estable, no distorsionar las vocales, conectar tu voz de pecho y tu voz de cabeza, que tu laringe no suba a medida que haces notas más agudas, …

Y te lo recuerda porque de eso se trata.

Se trata de no manipular tu voz para conseguir que haga lo que quieres que haga.

¿Por qué es importante homogeneizar la voz?

Por motivos artísticos

Primero porque no puedes interpretar una canción con libertad si tienes que estar pensando en cómo cantar las notas que tienes que cantar en vez de centrarte en simplemente cantarlas.

O peor aún, que no puedas interpretar una canción porque requiere que hagas justo las notas que te son difíciles tanto si las cantas de una forma o de otra, es decir, con una de tus “dos voces”.

Normalmente esas notas suelen ser las notas de tu primer puente, que precisamente son las más difíciles de dominar.

Por cierto, ¿te interesa saber más sobre ese puente? Échale un ojo a este artículo.

Por motivos técnicos

Por otra parte, si no tienes una voz homogénea significa que tienes algún tipo de desequilibrio vocal.

Los motivos pueden ser muchos.

Veremos algunos en un momento, pero ahora lo que quiero recalcar es que si existe algún desequilibrio va a ser muy fácil que abuses de tu voz.

Este problema es evidente si tratas de hacer una escala que empiece en una nota cómoda de tu rango y llegue hasta una nota por encima de tu primer puente.

Si ya es difícil en un ejercicio, imagínate en una canción.

Debes tener cuidado con esto, porque insistir en cantar en esta condición va a frenar tu avance como cantante, y si no te andas con ojo puede ser que retrocedas ( ¡¡espero que no te pase!! ).

Por poner un ejemplo, puedes cantar las notas agudas de una canción en falsete o incluso en voz de cabeza, pero no puedes cambiar gradualmente a tu voz de pecho.

¿Por qué no tienes una voz homogénea?

Los motivos son igual de variados que colores hay en el mundo, pero te voy a explicar un poco los más comunes.

Poca aducción cordal

O lo que es lo mismo, poca compresión vocal.

Si lo que te pasa es que a medida que haces notas más agudas llega un punto donde tu voz cambia a falsete, necesitas enseñarle a tus cuerdas vocales cómo deben configurarse en el registro agudo de forma correcta, manteniéndose juntas.

Es muy normal que tus cuerdas vocales se separen la una de la otra al acceder a tu registro agudo, normalmente de forma brusca.

Hay que tener cuidado porque es fácil confundir esto con el próximo problema común.

Falta de coordinación entre voz de pecho y voz de cabeza

Esto puede parecerse mucho al problema anterior, pero la voz de cabeza y el falsete son cosas diferentes.

Si no rompes a falsete pero sí se nota un cambio abrupto en el sonido cuando cambias de registro, el problema es completamente diferente.

Es diferente porque aquí sí estás haciendo correctamente las coordinaciones vocales.

Sólo te falta coordinarlas mejor entre sí.

Es decir, tienes que aprender a cambiar gradualmente de un registro a otro.

Aunque no hay una forma específica para conseguir esto, lo mejor que suele funcionar es tomarte tu tiempo haciendo los ejercicios y hacerlos de forma muy lenta.

Existe la posibilidad de que estés usando demasiada voz de pecho en las notas de tu puente ( o incluso en las previas ) o demasiada voz de cabeza.

Y también puede ser que estés usando demasiada voz de pecho en las notas de tu puente o en las posteriores.

Al final se trata de encontrar un equilibro, una mezcla entre la liberación que aporta tu voz de cabeza y la fuerza de tu voz de pecho.

Tu voz de pecho y tu voz de cabeza no están igual de entrenadas

De nuevo, necesitas encontrar un equilibrio entre los dos registros para poder mezclarlos.

Si necesitas añadir más voz de cabeza en un punto determinado pero no la tienes bien entrenada, es imposible que lo consigas.

Este es el motivo de por qué a tantas personas les cuesta conseguir ampliar el rango hacia los agudos.

Si sientes que tu voz de cabeza es muy débil, permite que suene débil, pero sigue entrenándola.

Con el tiempo te acostumbrarás a ella, poco a poco aprenderás a usarla de forma más eficiente y se irá haciendo más fuerte.

Al mismo tiempo también es el motivo de por qué a tantas otras personas les falta potencia en su voz, incluso en los graves.

Si tu registro grave es débil, no temas aumentar ahí el volumen. Eso te permitirá ir ganando potencia en todo tu rango.

Una voz homogénea es una voz conectada, pero no al revés

Algo que quiero destacar antes de seguir es que conectar tu voz de pecho con tu voz de cabeza no significa que ya tengas una voz homogénea.

La conexión es sólo uno de los factores.

Además de eso, tu voz debe sentirse y oírse como una sola.

Puedo conectar mi registro grave con mi registro agudo, pero noto que no estoy libre de tensiones…

No es lo ideal, pero es un buen comienzo.

Si puedes hacerlo quiere decir que tienes mucha parte del camino hecho, pero es necesario que quites esa fuerza que sientes.

No lo vas a conseguir de forma rápida, como por arte de magia, pero sí puedes ir consiguiendo pequeños avances que te permitan sentir que cada vez te es más fácil.

¿Cómo? ¡Experimenta!

Volvemos a lo de siempre. Cantar tiene que ser fácil, ¿no?

Y tu sabes cómo hacerlo más fácil, aunque no suene bien o incluso tus registros no conecten.

Aunque eso pueda parecer un paso hacia atrás, no tiene por qué serlo.

Recuerda que estás experimentando para descubrir nuevas sensaciones al utilizar tu voz.

Sensaciones de facilidad, concretamente.

No bases tu entrenamiento en ello, porque aunque conectar tus dos registros sintiendo un poco de presión no es lo ideal, tampoco es incorrecto del todo.

Algo bueno está pasando ahí, porque si no no podrías conectar ambos registros.

Pero si consigues conectar tus dos registros de forma más fácil y menos forzada, da igual con qué sonido lo hagas, porque cuando lo consigas ese será el momento de volver a intentar conectarlos como lo hacías antes, cuando sentías que tenías una voz pero con esa fuerza de más.

Ahora sentirás lo mismo pero de forma mucho más libre.

No olvides compartir este artículo en las redes sociales para poder ayudar a gente con tus mismas ilusiones. ¡Gracias!

Imagen: AtribuciónNo comercialSin obras derivadas Algunos derechos reservados por Mike Shaheen

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El fantasma de la crítica por Laura Martínez, autora invitada


La autora del blog www.sermupsico.blogspot.com Laura Martínez ha escrito este post como autora invitada en La brújula del canto. Desde esta bitácora recomendamos que visitéis esta interesante página en la que habla de la psicología del músico y aporta consejos muy valiosos tanto para estudiantes como para profesionales.


Hay un fantasma al que los cantantes, y los músicos en general, nos enfrentamos en nuestro día a día y que nos ocasiona alguno que otro quebradero de cabeza: las críticas.

El resultado de nuestro trabajo es valorado por diferentes personas, a veces de forma positiva y otras de forma negativa. Estas críticas negativas, pueden afectarnos emocionalmente, generando sentimientos de impotencia, incompetencia, inferioridad, rabia, enfado, negatividad… Golpean nuestra mente, nos bloquean y no nos permiten avanzar. Afectan a nuestro rendimiento, no permitiéndonos dar el cien por cien.

Pero, ¿qué podemos hacer ante tal situación? ¿Cómo podemos combatir esas críticas que tanto nos afectan? ¿Qué podemos hacer con esas personas que nos critican? ¿Podemos “librarnos” de ellas?

Aquí te ofrezco unas pautas sencillas que te ayudarán.

1. En primer lugar, asúmelo: las críticas son inevitables. Creo que cualquiera estará de acuerdo con esta afirmación. Los mejores cantantes de la historia también han recibido críticas. Por muy bien que realices un trabajo, siempre habrá alguien que le saque punta. Y muchas veces, no podemos sacar a esas personas que nos critican de nuestra vida. Sea como sea, las críticas estarán ahí. En tu mano está, aprender a lidiar con ellas o dejar que te consuman.

2. No reacciones a la crítica de manera inmediata. Párate y analízala. Tal vez sea justa. Sé objetivo/a. Quizá has cometido un error y la crítica sea cierta. Si es así, no pasa nada. Eres una persona, no una “máquina de cantar” perfecta. Aprende de tu error y utilízalo para mejorar. Recuerda que equivocarse no es malo, lo malo es no aprender de los errores.

3. Hazte responsable de tus propios sentimientos. Las críticas tienen la importancia que tú les das. Ni más, ni menos. Si una crítica te afecta es porque tú has decidido que así sea. Nadie puede hacerte daño a menos que tú le des permiso para ello.

4. Extrae de la crítica aquella parte que te permita aprender algo. Intenta buscar en ellas una parte positiva, un aprendizaje. El resto… es basura emocional. ¡Tírala! ¡A la papelera con ella! No nos sirve para nada. Aléjala de tu mente lo antes posible. Y si vuelve (que lo hará) vuelve a alejarla. Una y otra vez, hasta que los pensamientos negativos se den por enterados de que no tienen cabida en tu cabeza.

5. Toma las cosas de quien vienen. Sabes que hay personas especialistas en encontrar defectos. Sabes que hay personas de las que no vas a recibir halagos. Sabes que hay personas que no aprecian o no entienden tu música. Sin malas intenciones, pero es así. No esperes otra cosa de ellas. No vas a cambiar a esas personas por mucho que lo intentes. Es su forma de ser. Cambiarles está en sus manos, no en las tuyas. Sonríe y apela al sentido del humor. Es la única manera de hacerles frente.

6. No atribuyas mala intención a la persona que te critica. Vale, reconozco que en algún caso puede haber mala intención. Pero… ¿te sirve de algo pensar que es así? Ese pensamiento sólo hará que te sientas mal. Mejor ser feliz ¿no? Aleja las malas vibraciones de tu mente. Sólo te harán mal.

7. Ten en cuenta que las personas que tienden a ver a los demás de manera negativa, son personas infelices y con una baja autoestima. Criticar a los demás, es la única manera que conocen para sentirse mejor. No es la adecuada, estamos de acuerdo, pero es la que conocen. Pensar esto, te ayudará a entender a esas personas que te critican y a quitar importancia a sus críticas.

Conseguir llevar a cabo estas pautas, es cuestión de constancia y esfuerzo, ya que supone, en muchos casos, un cambio de pensamiento radical. Si eres de las personas a las que las críticas le afectan, no conseguirás librarte de ellas de la noche a la mañana. Pero no decaigas. Puedes conseguirlo si te lo propones. Día a día. Paso a paso. No hay atajos, pero es posible. Puedes hacerlo. 
Puedes conocer más artículos de la autora en www.sermupsico.blogspot.com

Cómo sentir la música mientras cantas con tu banda

sentir la música mientras cantasComo buen cantante, tienes que sentir la música mientras cantas.

No vale con ir a tu rollo mientras la música va sonando.

Tiene que haber una simbiosis entre música y voz para que el público cuando te escuche perciba que el resultado es homogéneo.

Lo más importante es que no sólo oigas la música, sino que también la escuches, que la sientas.

Te parecerá algo enormemente lógico, pero a muchos cantantes les cuesta estar atentos a los demás instrumentos durante la actuación y de hecho, si lo hacen se distraen de su parte.

Es algo que hay que entrenar de igual forma que entrenas tu voz.

¿Sabes lo que hacen los demás instrumentos?

¿Podrías tararear la línea instrumental de la guitarra o el piano?

¿Podrías marcar los golpes de la batería?

Cuando lo pruebes, te darás cuenta de la riqueza que adquiere la canción para ti.

Escuchando a los demás instrumentos tienes la ventaja de añadir a la canción el feeling de tus compañeros de grupo, no sólo el tuyo propio.

Observa mientras tocan y déjate llevar por sus emociones, ¡deja que te contagien!

Simplemente con escuchar la música no lo tienes todo hecho, aunque te ayudará un montón en todo lo demás.

Tres aspectos básicos que te ayudarán a cuadrar tu voz con la música

Escuchar lo que están haciendo tus compañeros es vital y sin lugar a dudas te va a ayudar un montón, pero hay tres cosas en las que tienes que poner especial atención cuando trabajes en cuadrar la música con tu voz.

Cuando una de ellas falla, tú eres el primero que siente que algo no marcha bien y que hay algo que no encaja.

Afinación

Si tus compañeros tocan en un tono y tú cantas en otro, algo está mal.

No te preocupes, pues no serás ni el primero ni el último cantante al que le pasa esto.

Aunque afines perfectamente cuando haces tus ejercicios de canto y tengas un oído impecable, te puede pasar alguna vez o con alguna canción que tengas cruzada.

En ese momento, tú mismo notas que algo no va bien.

Si estás en un ensayo no pasa nada, paras y se repite.

Si te pasa en un concierto tienes que intentar volver al tono correcto lo antes posible.

Es probable que el público ni siquiera se de cuenta, pero tú sí lo vas a notar y tus compañeros también.

Cuando ensayas muchísimo con tus compañeros, seguro que detectarás antes del concierto si tienes un problema de este estilo en alguna canción.

Es necesario que la practiquéis juntos un millón de veces para evitar que te vuelva a pasar.

A parte de practicarla juntos, te recomiendo que la grabes cuando estés en un ensayo para practicarla en casa tal y como la escuchas en los ensayos.

Otra cosa muy diferente es que tengas problemas de afinación con cualquier canción e incluso con los ejercicios.

Si ese es tu caso, te recomiendo que leas este artículo sobre cómo cantar afinado.

Aunque he de decir, que también te aconsejo escuchar muy bien la música aunque tengas este problema incluso con ejercicios.

Muchos casos de desafinación se deben a que el cantante se anticipa al instrumento.

Ritmo

Tienes que seguir el tempo.

Ir a tempo es una de las asignaturas pendientes de muchos cantantes y es de las cosas que más pueden llegar a desentonar en una canción.

Para los demás músicos también es algo a lo que lleva tiempo acostumbrarse y que han de trabajar, pero cuando todos van a tempo y sincronizados, es cuando se produce la magia.

Los grupos con más horas de ensayo son los que mejor llevan esta parte, siempre que todos pongan de su parte y se entiendan.

Si a ti te cuesta seguir el tempo, te recomiendo que prestes especial atención a lo que hace la batería.

La batería es un metrónomo humano. Puede que toque con metrónomo o puede que no y también depende del nivel que tenga puede ser que siga mejor o peor el tempo.

De cualquier modo, la batería es el metrónomo que tú tienes que seguir.

Si él cambia el tempo en mitad de un tema, tú tienes que acompañar ese cambio, no puedes seguir el mismo tempo que había, porque la cosa se va a descuadrar.

Así que por mucho que ensayes con metrónomo y entrenes tu voz para que suene al tempo, por quien te tienes que dejar guiar es por el batería.

Si quieres saber más sobre cómo seguir el tempo, lee este artículo.

Humor

No puedes poner voz alegre cuando la música es muy triste ni cantar con una voz triste una canción alegre.

¡Ojo! Esto no tiene nada que ver con la letra.

Es el sonido de la música.

Una canción puede tener una letra de lo más triste y ser alegre (aunque es raro).

A eso se le llama humor negro.

Es como dar una mala noticia con una sonrisa, un poco raro y deshumanizado, pero existe y hay a quien le gusta como queda ese contraste.

Tener en cuenta el humor de la canción es muy importante cuando estás componiendo la melodía de voz.

Quizás al principio te cueste un poco dar con la adecuada, al final te saldrán solas escuchando un poquito la música.

Escucha bien la canción.

Si tiene partes muy diferenciadas, quédate con cada una de ellas y trabájalas por separado.

Piensa en qué te inspira cada parte, ¿qué sientes al escuchar la música?

Y canta en función de eso.

Si necesitas más ayuda para componer una melodía de voz, échale un ojo a este artículo.

Y para acabar… ¡Un truquillo!

Prueba a cerrar los ojos.

Privarte de un sentido te hará agudizar los demás y el que más se va a agudizar en este caso será el oído.

Piénsalo, el gusto no lo vas a utilizar porque no estarás comiendo, al tacto te habrás acostumbrado si llevas un rato sosteniendo el micrófono y al olfato igual si llevas un rato oliendo el ambientador (por decir algo agradable!) :D

Cerrar los ojos te ayudará a concentrarte mucho más en lo que estás escuchando y a sentir la música mientras cantas.

¡Ayúdame a llenar el mundo de emociones musicales compartiendo este artículo!

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Cómo moverte en el escenario mientras cantas

moverte en el escenarioCómo moverte en el escenario mientras cantas es una de las dudas que empiezan a aparecer cuando por fin ves un poco de luz en tu aprendizaje como cantante.

Llega un buen día en el que ya empiezas a visualizarte a ti mismo en un escenario y empiezas a imaginar cómo será.

Es algo muy bueno y positivo, porque significa que empiezas a creer en ti mismo tanto como para querer que otros te vean cantar.

Y estarás de acuerdo conmigo en que tú eres la primera persona que tiene que creer en ti para conseguir tus objetivos.

Manual para aprender a moverte en el escenario

Lo siento, ¡era una pequeña broma!

No hay una fórmula o unos pasos a seguir para moverte en el escenario.

Ten en cuenta que para que quede natural y sea lo mejor posible tiene que tener mucho que ver con tu personalidad.

Pero no te preocupes, porque te ayudaré a que tú mismo elabores tu propio manual de instrucciones.

Primero vamos a ver algunas cosas que sabemos que hacen los demás para moverse en el escenario cuando cantan:

  • Bailar
  • Mover los brazos
  • Andar de un lado para el otro
  • Dirigirse al público
  • Relacionarse con el resto del equipo (los demás músicos)
  • Contar chistes

¿Significa que tú tienes que hacer todas estas cosas también?

¡No! Tienes que hacer sólo las cosas que te salen de manera natural.

Son cosas que quizás te parecen muy lógicas o muy normales para hacer en un escenario, pero puede que algunas de ellas se vean totalmente artificiales en ti.

Párate un momento a pensar si son cosas que van contigo. ¿Normalmente las haces o salen de ti?

Por ejemplo, lo de bailar, ¿sientes la necesidad de seguir el ritmo cuando escuchas música?

Entonces déjate llevar por la música y sigue el ritmo cuando estés en el escenario.

¿Cómo puedes saber qué cosas son las que harías tú de manera natural?

¿Alguna vez has explicado una historia a alguien con quien tienes mucha confianza?

Seguro que no lo has hecho una vez, sino cientos.

Quiero que recuerdes una de esas veces.

Para meterte de lleno en el recuerdo, puedes pensar en algún detalle sensorial.

¿A qué olía? ¿Qué día hacía? ¿Donde estabais?

Una vez tengas ese recuerdo localizado en tu mente, quiero que te observes desde los ojos de la persona que te estaba escuchando.

Las expresiones de tu cara, los movimientos de tu cuerpo, qué hacen tus ojos y donde miran…

Cualquier detalle, te va a servir para ser consciente  de ti mismo.

Tendrás ideas de cómo reaccionas tú de manera natural cuando estás en un estado de relajación y tranquilidad.

Cuando estas encima de un escenario, tienes que ser tú mismo.

Así que no te fuerces a hacer nada distinto de lo que haces de manera natural.

Habrá gente que te diga que tienes que hacer esto o lo otro, porque son las cosas que hacen ellos y se sienten cómodos, pero si no es algo que vaya contigo, en ti va a quedar muy artificial y eso la gente lo va a notar.

Por ejemplo:

Hay muchas personas que mueven los brazos mientras cantan.

Si tú cuando te expresas no eres de esas personas que gesticulan con los brazos, no lo hagas cuando estés en el escenario porque no se va a ver natural.

¿Cuál es la clave cuando estás en un escenario?

Es muy obvio.

La clave es disfrutar de lo que estás haciendo.

En ese momento tienes que olvidarte de la técnica, de si esa parte difícil de la canción te va a salir bien o no.

Relájate y disfruta. Vive el momento.

Realmente es algo precioso subirse a un escenario y compartir algo que te gusta, que es cantar, con todos los demás.

Cada una de las veces que lo hagas se va a convertir en un recuerdo imborrable que va a acompañarte para siempre.

¿Puedes mejorar la habilidad de moverte en el escenario?

Por supuesto.

Cada nueva actuación es una oportunidad de mejorar y tienes que aprender a sacarle provecho.

No te obsesiones con la respuesta del público, no siempre vas a conseguir que se animen por mucho que te muevas de una manera o de otra.

Algunas personas puede que te critiquen. Tienes que aprender a sobrellevar las críticas.

Es mucho más importante lo que pienses tú mismo y qué consejos te darías a ti mismo para mejorar.

¿Cómo puedes hacer eso?

En los tiempos en que vivimos, no hay nada más fácil.

Todo puede quedar registrado en vídeo, así que pídele a alguien que te grabe en vídeo para poder después repasar las cosas que has hecho y que quedan “raras” y para identificar las que más te han gustado.

Hay personas que cuando les he dado este consejo me han respondido que no puede ser, que no son capaces de verse a sí mismos porque les parece que lo hacen fatal y se deprimen.

Si también es tu caso, te aconsejo que te mires sin juzgar, que lo mires como si fuera la actuación de alguien a quien quieres mucho.

¿Qué crees que le ayudaría más a mejorar a esa persona a la que tanto quieres?

¿Que le digas que lo hace fatal y que lo deje o que le aconsejes de alguna manera que le ayude a hacerlo mejor?

Si has elegido la primera, te recomiendo que te leas este artículo.

Y si has elegido la segunda, es genial! Si lo harías por una persona a la que quieres mucho, ¿por qué no vas a hacerlo por ti, a quien has de querer aún más?

Así que ponte las pilas y date a ti mismo esos consejos que le darías a otra persona para mejorar tus actuaciones.

¿Quieres ayudar a que otras personas se sientan más a gusto al moverse en un escenario y disfruten más del mundo de la música? ¡No lo dudes! ¡Comparte este artículo!

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Cómo mantener notas largas y emocionar a tu público

mantener notas largasMantener notas largas es una de las claves para mejorar tus actuaciones.

Cuando lo haces bien, puedes dejar impresionados a todos los que te escuchan, eso sí, conseguir hacerlo de manera correcta no es tarea fácil ya que entran en juego muchos factores.

Vas a necesitar mejorar en todos esos aspectos para hacer brillar tu voz en esas notas largas.

Cuando esas notas sostenidas no salen como quieres el problema radica en un desequilibrio vocal.

Cuando hablamos de equilibrio vocal, nos referimos al equilibrio entre la presión de aire que ejercemos y la masa muscular de las cuerdas vocales, así que cuando hay un desequilibrio, es porque falla alguno de estos dos aspectos clave:

1. Demasiada presión de aire

En este caso, lo que está pasando es que ejerces demasiada presión de aire sobre tus cuerdas vocales.

Cuando esto pasa, no sólo corre peligro tu salud vocal, sino que hay desequilibrios en tu voz, que producirán diversos resultados:

  • Tu voz sonará demasiado airosa, lo que hará que pierdas potencia
  • Para que tu voz no suene airosa necesitarás utilizar mucho volumen, con lo que no serás capaz de bajarlo sin que el sonido se vuelva airoso.
  • Podrás sostener durante menos tiempo esa nota porque se te acabará el aire.
  • Puedes llegar a tener algún gallo al sostener la nota.

Para evitar todo esto, tienes que aprender a regular la cantidad de aire que exhalas al cantar.

Aunque te parezca que no puedes evitarlo, tú eres la única persona que tiene el control sobre la fuerza con la que sale el aire. Para empezar a controlarlo, el primer paso es bajar el volumen.

Aunque te parezca que suena demasiado débil, es el camino.

Ten en cuenta que cuando estás en un extremo (demasiado volumen) tienes que tomar medidas drásticas y eso se consigue yendo al otro extremo, es decir, bajando el volumen todo lo que puedas.

Poco a poco podrás irlo subiendo sin que se desequilibre tu voz, así que ¡no tengas miedo si al principio no suena como quieres!

2. Poca aducción de cuerdas vocales

Cuando pasa esto, significa que tus cuerdas vocales no se juntan lo suficiente o se separan en algún punto de tu rango.

Cuando esto pasa, los resultados serán los siguientes:

  • Tu voz sonará débil y sin fuerza.
  • No tendrás mucho volumen en tu voz.
  • Podrás sostener durante menos tiempo las notas porque se te acabará el aire.
  • Si tus cuerdas vocales se separan en un punto de tu rango, en ese punto puedes tener un gallo.

En este caso, lo tienes que solucionar mejorando tu aducción cordal en todo tu rango.

Necesitas ejercitar tu voz con un sonido que mantenga tus cuerdas vocales juntas y con un ejercicio que abarque gran parte de tu rango.

Un buen ejercicio para esto es el siguiente:

4 claves que hacen que tu voz brille más al mantener notas largas

Una vez tienes controlado el tema del equilibrio vocal, tienes que tener en cuenta que mantener notas largas y que suenen bien, no sólo consiste en que puedas aguantarlas durante más tiempo.

Hay 4 factores clave que pueden hacer que tu voz brille aún más.

Potencia

Una voz potente impresiona y más aún si va creciendo en potencia.

Empezar una nota sostenida a menor volumen y poder ir incrementando su potencia poco a poco es una de las cosas que dan mayor calidad a una nota sostenida.

Como siempre, partimos de la relajación, así que cuando empieces con ese sostenido, simplemente deja caer tu mandíbula para ganar más potencia.

Te dejo un artículo sobre el proceso de incrementar la potencia.

Afinación

Una nota sostenida que oscile entre notas o se desafine no llama la atención, así que hemos de intentar luchar contra esto.

Para ello tienes que entrenar tus notas sostenidas,  intentando quitarles el vibrato, simplemente aguantando la nota.

Intenta que no haya variaciones en la nota, que se mantenga estable.

Si quieres saber más sobre cómo cantar afinado, haz clic aquí.

Vibrato

El vibrato es una de las cosas que traen de cabeza a muchos cantantes.

La mayoría de las veces que una voz no tiene vibrato es porque existe un desequilibrio vocal.

Es bastante habitual que a base de trabajar tu voz acabe apareciendo de manera natural y ese es el vibrato que más bonito queda en una nota sostenida.

Un vibrato natural no será ni demasiado rápido ni demasiado lento y por supuesto y como todo, practicándolo se puede mejorar.

En este artículo encontrarás más información sobre el vibrato.

Duración

Es importante tener en cuenta la duración de la nota sostenida.

Hay quien piensa que cuanto más rato mejor, pero tampoco quieres aburrir al público. Una misma nota sostenida durante demasiado rato sin ninguna variación de intensidad o sin vibrato no tiene gracia.

Tampoco es apreciada cuando es demasiado corta o tienes que cortarla por falta de aire.

Como en todo, hay que buscar un punto intermedio.

Aunque si quieres que dure mucho rato, te recomiendo que hagas variaciones. No dejes la misma nota todo el rato, muévete entre varias notas y utiliza vibrato y cambios de intensidad.

Todo esto, son cosas que van a ayudarte no sólo a mantener notas largas, sino también a hacerlas crecer, a darles más brillo y ese toque personal tuyo.

Si te ha gustado el artículo, me gustaría que lo compartieras para hacerlo llegar a más personas y llenar entre todos, el mundo de gorgoritos!

Imagen: AtribuciónCompartir bajo la misma licencia Algunos derechos reservados por Suedehead

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