Historia del rock, de Jordi Sierra

Editado por Siruela, en un volumen de tapas flexibles, de práctica y cuidada presentación, con papel de máxima calidad y blancura, letra de tamaño muy legible, escrito de manera ágil y directa, clara y comprensible, por un icono de la crítica musical moderna, Jordi Sierra i Fabra (Barcelona, 1947), autor también de John Lennon y Diario de los Beatles, entre otras obras.

Destaca asimismo por sus interesantes ilustraciones, rebosantes de alegría y colorismo, realizadas por la mente creativa de Xavier Bartumeus (Manresa, 1965).

Historia del rock es un recorrido por los cantantes, los estilos, los soportes, las ciudades principales, los sellos, las estéticas... que es también un viaje por la historia no sólo musical, sino político-cultural, de la segunda mitad del siglo XX y los inicios de nuestro "convulso" siglo.

Por sus páginas desfilan de Bill Haley a Amy Winehouse (última célebre representante de ese luctuoso club de "los 27", es decir, los fallecidos a esa temprana edad: Brian Jones, Jim Morrison, Janis Joplin, Jimi Hendrix y Curt Cobain...).

Un género, más que un estilo, que es en realidad un polícromo cuadro de variadas escenas, ramificaciones, hibridaciones o fusiones (a veces intentos, a veces logros) de las que se da cuenta en sus páginas.

Muy interesantes sus reflexiones sobre la irrupción de los videoclips, walkmans, internet y cómo influyó en la industria y el consumo de la música. Sobre su futuro vaticina: "ha perdido parte de su componente rebelde, de agitación social, pero en el fondo sigue ahí, tal vez dormido, tal vez agazapado".

Habla de conciertos "holográficos", en los que quizá se reúnan por obra y gracia de los avances tecnológicos a los Beatles y Michael Jackson, a Elvis y la citada Amy Winehouse... No muy tarde quizá lo veremos :)

¡Nos hallamos ante un libro de referencia, muy ameno y bien escrito! 

Historia del rock, de Jordi Sierra

Editado por Siruela, en un volumen de tapas flexibles, de práctica y cuidada presentación, con papel de máxima calidad y blancura, letra de tamaño muy legible, escrito de manera ágil y directa, clara y comprensible, por un icono de la crítica musical moderna, Jordi Sierra i Fabra (Barcelona, 1947), autor también de John Lennon y Diario de los Beatles, entre otras obras.

Destaca asimismo por sus interesantes ilustraciones, rebosantes de alegría y colorismo, realizadas por la mente creativa de Xavier Bartumeus (Manresa, 1965).

Historia del rock es un recorrido por los cantantes, los estilos, los soportes, las ciudades principales, los sellos, las estéticas... que es también un viaje por la historia no sólo musical, sino político-cultural, de la segunda mitad del siglo XX y los inicios de nuestro "convulso" siglo.

Por sus páginas desfilan de Bill Haley a Amy Winehouse (última célebre representante de ese luctuoso club de "los 27", es decir, los fallecidos a esa temprana edad: Brian Jones, Jim Morrison, Janis Joplin, Jimi Hendrix y Curt Cobain...).

Un género, más que un estilo, que es en realidad un polícromo cuadro de variadas escenas, ramificaciones, hibridaciones o fusiones (a veces intentos, a veces logros) de las que se da cuenta en sus páginas.

Muy interesantes sus reflexiones sobre la irrupción de los videoclips, walkmans, internet y cómo influyó en la industria y el consumo de la música. Sobre su futuro vaticina: "ha perdido parte de su componente rebelde, de agitación social, pero en el fondo sigue ahí, tal vez dormido, tal vez agazapado".

Habla de conciertos "holográficos", en los que quizá se reúnan por obra y gracia de los avances tecnológicos a los Beatles y Michael Jackson, a Elvis y la citada Amy Winehouse... No muy tarde quizá lo veremos :)

¡Nos hallamos ante un libro de referencia, muy ameno y bien escrito! 

7 ideas para componer tus canciones

1. Ten una buena estructura armónica. Hay quien parte de crear primero una melodía y luego armonizarla y quien parte de una base de acordes (por favor, más de tres si quieres que tenga algo de interés musical:) y luego genera una melodía, generalmente los profesionales usan el segundo camino.

2. Puedes contrastar las melodías que inventes con los miembros de tu grupo y con tu profesor, quienes seguramente te sugerirán algún aspecto interesante que no has tenido en cuenta.

3. Las letras: intenta que la acentuación esté bien, es decir, no digas "me cómpre un cóche nuevó"... Procura que los tiempos fuertes del compás se correspondan con las notas más largas, más agudas o con dinámica más fuerte.

4. Crea primero el ritmo de tu poema y luego la letra, para así después cuadrarla mejor en la canción.

5. Usa un diccionario de sinónimos, en internet ya hay, puede darte mucho juego.

6. Usa un diccionario de la rima, fundamental para creadores. 

7. Aprovecha la grabadora de tu móvil para grabar cualquier momento de inspiración musical, cualquier idea que te parezca interesante... No la dejes pasar... Si generas muchas ideas, podrás seleccionar las mejores.

7 ideas para componer tus canciones

1. Ten una buena estructura armónica. Hay quien parte de crear primero una melodía y luego armonizarla y quien parte de una base de acordes (por favor, más de tres si quieres que tenga algo de interés musical:) y luego genera una melodía, generalmente los profesionales usan el segundo camino.

2. Puedes contrastar las melodías que inventes con los miembros de tu grupo y con tu profesor, quienes seguramente te sugerirán algún aspecto interesante que no has tenido en cuenta.

3. Las letras: intenta que la acentuación esté bien, es decir, no digas "me cómpre un cóche nuevó"... Procura que los tiempos fuertes del compás se correspondan con las notas más largas, más agudas o con dinámica más fuerte.

4. Crea primero el ritmo de tu poema y luego la letra, para así después cuadrarla mejor en la canción.
5. Usa un diccionario de sinónimos, en internet ya hay, puede darte mucho juego.

6. Usa un diccionario de la rima, fundamental para creadores. 

7. Aprovecha la grabadora de tu móvil para grabar cualquier momento de inspiración musical, cualquier idea que te parezca interesante... No la dejes pasar... Si generas muchas ideas, podrás seleccionar las mejores.

El valor de la musicoterapia en la vida de las personas, por Carmen Salvador, III

¿Cuál ha sido tu experiencia más enriquecedora y emociante?
En el 2010 realicé un viaje a México con cuatro amigas más, con la intención de trabajar de voluntaria en el Hogar Comunitario Yachil Antzetic, en San Cristóbal de las Casas 



Llevamos medicinas y nuestra primera misión era apoyar y ayudar a las mujeres – niñas que llegaban en su última entapa del embarazo, para dar a luz, viajábamos con Yoana, quien era enfermera, podía ayudar a asistir en partos. También estaban Celia y Belén, quienes hicieron un trabajo de lujo con los niños ofreciéndoles un taller de teatro -. Mi amiga Maite ayudó a digitalizar un libro de remedios y curas que las mujeres habían escrito. La mayoría de las mujeres que acuden al Hogar venían de comunidades indígenas, pero otras venían de la propia ciudad de San Cristóbal, porque habían sido repudiadas en sus casas al saber que estaban embarazadas. Algunos embarazos eran no deseados y otros eran causados por violaciones. 

Cuando llegamos al Hogar, nos reunimos con Sandra, para repartir tareas y trabajos. Al principio yo iba a ayudar a Maite, pero me di cuenta de que yo podía aportar mi trabajo de musicoterapia. Si lo unía a la terapia que ella utilizaba en el empoderamiento de las mujeres – la Comunicación No Violenta – podía ser beneficioso. Hablé con ella y comencé a pensar y desarrollar mi proyecto.

El primer problema que me encontré parecía insalvable. Mi acordeón estaba en Navarra, no tenía a mi instrumento conmigo. Le dí varias vueltas a por dónde o cómo empezar y se me ocurrió algo: no tengo mi música, pero sí tengo la suya. Investigué un poco sobre la música prehispánica, música que me unía a los sonidos de la tierra, a la lluvia, a los sonidos de éstas mujeres – en concreto las que viven en comunidad y están asustadas por los ruidos de la ciudad – y decido utilizar la quinta pura – re, mi, sol, la, si- para hacer acompañamientos con un pequeño xilófono que había allí. Compro CDs de música con éste contenido: canciones a mi niño/a, trabajar el vínculo materno, sonidos de la naturaleza, nanas, cancioncillas infantiles mexicanas y tzotziles. (El idioma era algo importante, unas mujeres hablan Tzotzil y otras Celtal además del castellano. 

En la formación nos dijeron que era importante partir de lo que el cliente conoce, de sus sonidos, de su música; y es lo primero que intento proporcionarles. Yo sola, sin mis instrumentos y con la ayuda de grabación de una simple cámara de fotos que tiene vídeo, inicio ésta aventura. Hablo con Sandra y me pone en contacto con un músico que ella conoce. Es flautista, toca la guitarra, tiene una chocolatería y se llama Alberto Dominguez. No dudo en pedirle ayuda. Me presta algún instrumento y yo compro un par de maracas, y algún instrumento de percusión típico de allí. En su construcción, utilizan materiales naturales, por lo que sus sonidos se asemejan a los de la naturaleza. Junto con Sandra, creamos una estructura de sesión, y comienza mi trabajo. 

El principal cambio, comparando con mis trabajos anteriores, es la percepción del tiempo. No hay un tiempo, no hay una hora. Tienen un tiempo biológico, que parece transcurrir más despacio. No están tan “enrelojadas” como yo. Me centro en la metodología que plante Willems: melodía (sentimientos), Armonía (inteligencia) y ritmo (corporal). El ritmo es el que más les afecta. El sentir su cuerpo, el tener su tiempo, el ser. Hasta ahora, ninguna de ellas ha tenido un espacio propio: primero son los padres, los maridos, los hijos… ellas no son. Y eso, que, muchas indígenas, están metidas en movimientos zapatistas, y la verdad, que su situación, es un poco mejor. Es el caso de M – ella escucha, escucha, piensa y después de mucho tiempo, decide tímidamente expresar lo que piensa – y cuando lo hace, dices: qué maravilla, qué mujer. Ha venido embarazada, pero su caso es diferente. Tiene 29 años y es su primer embarazo. Su pareja no quiere saber nada, Echa de menos su comunidad, la ciudad no le gusta. 

Mi taller de musicoterapia se realiza con 5 mujeres. Una de ellas, vino embarazada y la acompañé musicalmente cuando dio a luz. Descubrimos que los sonidos suaves del xilófono, la reconfortaban durante las contracciones. Estuve dos horas con ella, en silencio, solamente la apoyaba musicalmente cuando ella me lo pedía. Al final, me pidió que saliese, porque ya el dolor era insoportable. Estaba de parto. Después siguió acudiendo con su niña a las sesiones, le venía bien para dar el pecho, le relajaba. Esta misma chica, me dice que tiene un secreto, que ha estudiado hasta secundario, que toca la flauta y me pide que le traiga una flauta. Alberto, me presta una. Sin él, no hubiera podido hacer estos talleres. Me dice que le gustaría recordar canciones y tocar para su niña. Y mi niña, C. Se me parte el alma. Siempre sonreía. Sus ojos transmitían un amor infinito. Y sé que la ayudé, que se sintió mejor, y que tuvo momentos muy bonitos. Vivía solita con su padre. Su madre había fallecido. Su embarazo fue causa de una violación, un vecino. Así es. Duro. Muy duro. Vino a la asociación y quería tener a su niño. Lo adoraba desde que lo supo. Cuando lo tuvo en brazos, irradiaba amor. Y yo, con mi música, fui testigo de esto. Con esa bondad en su mirada cantaba, susurraba y acunaba a su bebé. Creó un vínculo fuerte con él. Fuimos a visitarla, cuando abandonó el hogar. 

La salida del Hogar de cada mujer, no se hace de manera brusca, se les prepara para ello y se aúnan esfuerzos en trabajar lo que más le va a fortalecer y ayudar una vez que estén fuera, se intentan cerrar heridas. Ellas saben que pueden volver tanto a formarse, como de visita. Fuimos a su comunidad y nos recibió en su humilde casa, con los brazos abiertos. En cuanto me vio, se dirigió a su radiocassete, puso una música muy alegre, me agarró de las manos y nos pusimos a bailar. No puedo expresar lo que sentí, gratitud, cariño, felicidad…y miedo. Y aquí es donde entra el impermeable: no me lo podía traer a España. Su vida estaba allí, y la mía en otro lugar. No la podía “salvar”. Y estaba bien. Quiero decir: es duro vivir esas situaciones, pero tenemos que ser realistas y humildes: no las podemos transportar a una vida maravillosa y feliz. Sé que en ella, la música y la terapia de Comunicación No violenta, junto con el empoderamiento, sirvieron. Le sirvieron a ella, para vivir con su hijo, y para sentirse importante, viva y querida. ¿A quién no le gusta eso? Le dio fuerza y esperanza. Y eso le abre otro mundo: puede seguir en contacto con el Hogar, y no estará sola. Me gustaría añadir algunas de las canciones que utilicé en las sesiones de musicoterapia. Algunas son aportaciones mías y otras son peticiones de las mujeres:

“Marinelaren zain”: es una canción vasca, con letra, del grupo Sorotan bele. Toco la melodía en la flauta y cuando lo considero necesario, también la canto. Les ayuda a relajar y puedo provocar el movimiento de mecer/se. https://www.youtube.com/watch?v=ip4dTlKUqc4

“Ella”, “Corazón, corazón”. https://www.youtube.com/watch?v=O0HhqVdDnZM


Haurtxo polita” es una nana tradicional vasca. Se la canto con el objetivo de que conecten con sus respiraciones, se relajen y sirva también para esos bebés que están en camino, para que haya una sensación de sosiego, de tranquilidad, y que se lo transmitan a sus bebés. 

“El burrito”: canción infantil que canta una de las mujeres. Ella la canta con la melodía de “debajo de un botón”. No tengo la grabación original de la sesión y no recuero la letra, por lo que no puedo poner ningún enlace o vídeo. Yo grababa las sesiones con la cámara de vídeo que tenía incorporada mi cámara de fotos, las escuchaba allí, apuntaba lo más importante, y las borraba, para tener espacio de grabación, por lo que, no cuento en éste momento con todo el material.

“El arrullo de la mujer luna” Julio Reyes. https://www.youtube.com/watch?v=l-JyJoqEKOY

“Llegaremos a tiempo” Rosana. https://www.youtube.com/watch?v=FNGGhuKd7eo

“Total eclipse of the Heart”. Bonnie Tyler. https://www.youtube.com/watch?v=lcOxhH8N3Bo

En julio de 2016 me encontré de nuevo con Sandra. Hemos tenido algún encuentro otras veces, cuando ella viene a vender material para sacar dinero para la comunidad. Y ésta vez vino con una muy buena noticia. Están consiguiendo implicar a los hombre s – a los maridos, padres…- los están formando. Y eso, aún es mejor.