Estas técnicas o efectos son muy divertidas y a menudo es lo primero que todo el mundo quiere aprender. La mayoría son bastante fáciles pero hay otras que requieren cierta práctica.
1. Chicharra
Para este efecto debes tocar detrás del puente, sobre el entorchado de hilo de color de la cuerda Re. Asegúrate de que has puesto resina hace poco y coloca la zona del talón sobre la cuerda. También se puede cambiar la posición de la mano, como aparece en el vídeo.
Se producirá un sonido rasposo que se usa a menudo para acompañamientos rítmicos.
2. Tambor
Este es un tipo de pizzicato en el que los dedos de la mano izquierda se colocan de forma diferente. Coloca el segundo dedo de la mano izquierda sobre la cuerda Re, donde normalmente tocarías Sol#, pero coloca el dedo de manera que el borde esté cerca de la cuerda Sol.
A continuación, pulsa la cuerda Sol de forma bastante brusca, y de manera que la cuerda rebote en el dedo, creando un sonido similar a una batería sorda.
No se debería oír ninguna nota ni armónico; debe ser un sonido totalmente seco
3. Látigo
Se trata de una especie de glisando rápido ascendente que a menudo termina en armónico.
Puede abarcar todo el diapasón, pero también se pueden hacer versiones cortas en dirección descendente, sobre las cuerdas Mi o La.
4. Sirena
Como las sirenas de aviso en las antiguas guerras. Se realiza tocando dobles cuerdas en cualquier par de cuerdas, empezando arriba y realizando un glisando lento hacia abajo. A menudo acaban en silencio, puede ser muy efectivo usado con moderación en tangos como algunos de Piazzolla.
5. Cepillo
Se inicia con el arco sobre el diapasón y moviéndolo en 90º hacia el puente. Se produce así un sonido como de rascado o frotado, que se puede utilizar para comenzar acordes y notas rítmicas. Ramiro Gallo usaba mucho esta técnica.
6. Golpe de caja
Esta técnica se utiliza mucho en chelo y contrabajo, pero también se puede realizar con violín. Puedes percutir de muchas maneras -con el pulgar, los nudillos o la palma de la mano-. Cada una produce un sonido diferente.
7. Strapata
Esta técnica sería solo para contrabajo y chelo, ya que no funciona bien con las cuerdas más cortas del violín y la viola.
Toca las cuerdas con el arco a mucha velocidad, ya sea con las cerdas o col legno y hazlo rebotar, cerrando la mano hacia abajo sobre las cuerdas al final para crear un sonido de batería tipo redoble ¡Es genial!
8. Pizzicato de Banjo
Esto solo se hace con violín. Es un tipo de redoble de pizzicato antes de la nota real. Se pueden utilizar uno o dos dedos de la mano derecha.
9. Pizzicato de milonga
Este pizzicato se usa solo en milongas, y se realiza sobre la zona de las cuerdas detrás del puente.
10. Crujido atrás
Este efecto se produce presionando el arco en la parte posterior del instrumento, y girando la vara sobre las cerdas de un lado a otro. Suena como si algo estuviera crujiendo y rompiéndose -¡me encanta hacérselo a violinistas clásicos y ver la cara de horror que ponen!-
No produce ningún daño al instrumento, sólo unos pocos restos de resina que se pueden limpiar fácilmente.
11. Arrastres
Esta técnica se usa de forma habitual en piano y contrabajo. Básicamente es un efecto rítmico mayoritariamente usado para potenciar un efecto sincopado. Colocas el arco y los dedos más bajos que la nota final que deseas y realizas un slide con ambos creando una especie de crujido terminado con un acento. Es algo utilizado por todos los grupos de tango.
12. Chirrido brasileño
Es un sonido llamado así por su semejanza con el sonido chirriante que hace un tipo de tambor pequeño brasileño. Se realiza colocando las yemas de los dedos en la parte posterior del violín o violonchelo y moviéndolos hacia ti rápidamente a lo largo del dorso del instrumento.
Los dedos no deben estar demasiado secos o no funcionará.