MANUEL ALEJANDRO: Memorias de un escribidor de canciones icono del género romántico

Por: Agustín Manuel Martínez, pianista y musicógrafo


La música en español ha sido moldeada por innumerables talentos, pero pocos han dejado una huella tan profunda y duradera como Manuel Alejandro.


Un viaje a través de las memorias de un genio musical

En "Vibraciones y elucubraciones de un escribidor de canciones", casi cuatro cientas páginas, 396 en total, Manuel Alejandro nos invita a recorrer los pasillos de su vida y obra, desvelando los entresijos de una carrera que ha definido la banda sonora de generaciones enteras. Este libro no es una simple autobiografía; es un testimonio vivo de cómo la pasión y el talento pueden converger para crear arte inmortal.


Los inicios: de Jerez al mundo

Nacido en Jerez de la Frontera en 1933, Manuel Álvarez-Beigbeder Pérez, conocido artísticamente como Manuel Alejandro, creció en un entorno impregnado de música. Hijo del compositor Germán Álvarez-Beigbeder, desde temprana edad estuvo inmerso en el estudio de la composición musical, formación que consolidó en los conservatorios de Sevilla y Madrid. Estas experiencias tempranas sentaron las bases de un estilo único que más tarde resonaría en todo el mundo hispanohablante.


El libro detalla cómo, en sus inicios, Manuel Alejandro acompañaba al piano a un joven Raphael en locales modestos, una colaboración que marcaría el comienzo de una era dorada para la música en español. Canciones como "Yo soy aquel" no solo catapultaron a Raphael al estrellato, sino que también establecieron a Manuel Alejandro como un compositor de referencia. 


Por el volumen desfilan capítulos sobre su trabajo y vivencias sucesivamente desde Raphael, como comentamos, recorriendo una estela dorada de la música en castellano: Mirla Castellanos, Rudy Márquez, Basilio, Julio Iglesias, Jeannette, Marisol, Gloria, Lolita, Hernaldo Zúñiga, Isabel Pantoja, Falete, Rocío Jurado, Plácido Domingo, El Puma, Emmanuel, José José, Luis Miguel, etc...

VER MÁS >

Conoce lo que tocas, e interpretarás mejor

Cada vez que montamos una nueva pieza, ya sea en solitario, en música de cámara o en orquesta; hay todo un universo histórico y estilístico detrás que debemos conocer. Cada pieza pertenece a un momento dentro de la vida de su autor, a un momento dentro de su estilo musical y a un momento dentro de la historia. Entender y conocer estos datos nos dará una visión mucho más amplia de lo que la pieza significa.

¿Qué debemos tener en cuenta?

La partitura es la primera clave

En la partitura tenemos las primeras pistas sobre el contexto de nuestra pieza. No sólo nos ofrece los datos más obvios, como autor, fecha de composición, título…etc. Si manejamos la edición adecuada, y ésta es fiel a la grafía del compositor; los matices, las direcciones y las articulaciones que indica ya nos estarán ofreciendo una información amplia sobre el estilo en el que debemos movernos.

Crescendos y diminuendo, varias f o p, puntos o líneas, ligaduras… Cada figuración y cada indicativo que incluye la partitura pertenece a un momento musical en la historia, y nos pone enseguida en contexto.

Claves históricas para interpretar con estilo

En el mundo de la música, cada vez se es más fiel al gusto musical de cada época, a las ideas de cada compositor… en definitiva, al estilo. Y tocar dentro de estilo implica conocer el momento histórico en que la partitura fue escrita. Esto no sólo se refiere a conocer e interpretar según la etapa musical de la obra: clasicismo, romanticismo, barroco… Son términos muy amplios para hablar de interpretación. Aunque hablemos de clasicismo, no será lo mismo interpretar una obra de 1756 que una de 1783. Estudiar las características interpretativas que regían en los años de la obra que tenemos entre manos hará nuestro trabajo interpretativo mucho más fino, marcará la diferencia.

Autores distintos con distintas almas

Los compositores que escribían música dentro de un estilo y de una etapa musical también tenían su propia visión del mismo, su propio sonido. Para darle aún mayor profundidad a nuestra interpretación, debemos entender cómo es la música del autor en cuestión. El momento de su vida en que la escribió, qué situaciones pasaba, cuáles eran sus modelos a seguir… etc.

De esta forma, no es lo mismo el Beethoven de la Primera que de la Séptima Sinfonía. Cada autor vive una evolución que se refleja en su música. Todas estas características personales harán que veamos más allá del forte y el piano para dar una nueva calidad interpretativa.

Obras con historia propia

Muchas composiciones están inspiradas en historias literarias, fábulas, mitos, historias reales, poemas… Es un gran error desconocer la trama de estas historias que dan vida a la música que vas a interpretar. Al conocer la historia podremos descubrir qué motivos o temas musicales describen a qué personajes o situaciones: la muerte, el destino, la juventud, tragedia, amor… etc. También nos ayudará a crear el ambiente propicio: una historia inspiró la partitura, y nosotros debemos descodificar esa música para que al público le llegue la historia.

¿Por qué nos puede ayudar?

En general, cada pieza tiene su propia historia detrás, en la que confluyen situaciones políticas, económicas, sociales, culturales, detalles personales del compositor, inspiración, gusto musical de la época… Conocer todo el contexto nos dará una perspectiva más acertada, y unos argumentos más sólidos para defender nuestra interpretación.

Gracias al contexto, le estaremos dotando a nuestra interpretación de un punto de profesionalidad más allá del puro instinto y la estética que cualquier músico pueda tener.

Si quieres tener un libro de referencia sobre historia de la música, te recomendamos Historia de la Música Occidental

¡Síguenos en Facebook, Twitter y YouTube!
Si te gustan nuestros post, ya puedes leer los mejores, con información ampliada y nuevas imágenes en nuestro ebook, ¡ya a la venta!
Suscríbete y recibe en tu email todas las convocatorias, audiciones y nuevos post.
Introduce tu dirección de email:

Una obra coral comentada por su propia autora, Marta Lozano


AITA GUREA (SATB)  - MARTA LOZANO MOLANO 

Aita Gurea es una pieza para coro mixto de tres minutos y medio de duración. La escribí en 2013 y fue galardonada con el premio Mención de Honor en el Concurso de Composición para Coros organizado por la entidad Donostia Kultura y la Federación de Coros de Gipuzkoa. La pieza fue estrenada en Abril de 2014 durante el XXV Ciclo de Música Sacra de San Sebastián en dos conciertos distintos. Uno ofrecido por el coro Landarbaso y otro por Eskifaia.

El título de la obra significa Padre Nuestro en euskera. Cuando me decidí a componer esta pieza, opté por hacer una doble lectura. Opino que no es necesario ser una persona religiosa para comprender un texto religioso. De modo que trasladé este sentimiento de amor a Dios al de un hijo o hija a su padre o madre.

Supongo que la mayoría de las personas, en algún momento de sus vidas se paran a reflexionar y echar la vista atrás. Y se dan cuenta de cómo han actuado. Yo aún no soy madre pero si que soy hija. Y cuando me puse a mirar atrás me di cuenta de todo lo que han hecho mis padres por mí y de cómo me han guiado en la vida.

Partiendo de este concepto, me decidí a escribir una música que reflejase ese sentimiento. Creé dos niveles de comunicación. Por un lado: las voces del coro transmiten el concepto y el significado del texto. Su discurso es concreto ya que utiliza palabras que todos entendemos o que podríamos entender. Por otro: las notas, la armonía, el registro de las voces y demás técnicas empleadas definen un estado reflexivo y amoroso, ofreciendo un discurso abstracto ya que se trata de una alegoría del texto.

FICHA TÉCNICA:

Título: Aita Gurea

Idioma: Euskera

Duración: 3’ 26”

Año de composición: 2013

Año de estreno: 2014

Año de publicación: 2014

Editorial: Lulú

ISBN: 9781326039387

Más información:

Sobre la obra:

Sobre la compositora:
LINKEDIN https://www.linkedin.com/pub/marta-lozano-molano/a9/706/286