Practicando escalas con Carl Flesch

Antes que nada, avisar que este compendio de escalas no es recomendable para principiantes.

Aqui tenéis el Método completo, podéis imprimirlo, descargarlo o solamente hojearlo. Tened paciencia porque, dado el tamaño del archivo, tardará en cargar.

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Casi nadie se libra de practicar escalas, y hay tantos métodos y guías para realizarlas que resulta difícil escoger alguna. Para este artículo he escogido este Manual, algo antiguo ya, pero que puede ser muy útil para aquellos que ya tienen cierto nivel y quieren perfeccionar mediante ejercicios técnicos de escalas, arpegios, etc. más profundos y específicos.

Porque este método es realmente amplio, recoge todas las escalas mayores y menores en todas las tonalidades y en toda la extensión del diapasón (yo no puedo con muchos de ellos) y además es descargable gratuita y legalmente (creo) de la red.

El hecho de que se han indicado diferentes tipos de digitación posible, y a que algunas de esas variantes no son demasiado amigables (al menos para mí) añaden dificultad a este tipo de ejercicio. Lo cierto es que yo llevo unos meses con ellas y tengo que avisar que no son los ejercicios más divertidos del mundo. Hacedlos despacio y con infinita paciencia, y si podéis ponerles un poco de gracia y personalidad a los ejercicios, mucho mejor

Creo que no hay mejor comentario que los propios prólogos al método editados hasta el momento. Os los traduzco.

Notas de Carl Flesch a su Primera Edición

He dudado mucho antes de decidirme a publicar mi Sistema de Escalas trasladado a todas las tonalidades. Porque nunca me ha gustado que hubiera demasiadas publicaciones de este tipo. Además, a menudo se parecen entre sí y no hay en ellas ninguna idea nueva, que es lo que debería ser su razón de existir.

En el primer volumen de mi Arte del violín había publicado una serie de esclas y acordes rotos bajo el título “El sistema de escalas” que considero constituía una significativa innovación. Había intentado dirigir el trabajo diario desde las rígidas fórmulas técnicas habituales a una visión que permitía al alumno no favorecer una parte del mecanismo en detrimento de otra, sino que le obligaba a dividir su trabajo igualmente entre las distintas combinaciones técnicas más usuales.

Además he intentado resucitar la antigua manera en la que la vieja escuela francesa realizaba las escalas, una tradición que yo seguí en casa de mi viejo profesor Eugène Sauzay.

Muchos años de práctica han fortalecido mi convicción de que gracias, a su universalidad, su concisión, este sistema no sólo constituye una garantía segura de progreso continuo sino que representa el mejor medio de economizar tiempos y esfuerzos. Para llegar a este resultado era necesario sin embargo que el alumno cambiara cada día de tonalidad, transponiendo sucesivamente el modelo en Do mayor a los demás tonos, dado que en la primera edición por falta de espacio pude publicar solamente esa tonalidad.

Tres años después he tenido la ocasión de comprobar la influencia de mi sistema sobre los estudiantes. Fue una pequeña decepción observar que la mayoría sólo trabajaban en la tonalidad de Do mayor, con lo que el efecto era mucho menor. Pero el violinista que practica en todas las tonalidades tiene una gran ventaja sobre el que se contenta con una sola, siempre la misma. Y es es la razón que me empujó a publicar el sistema completo de escalas.

Algunas observaciones útiles para la realización de los ejercicios:

    1. El sistema de escalas puede servir tanto de ejercicio de afinación como de ejercicio de velocidad. En el primer caso debe ser tocado lentamente corrigiendo cada nota fallida, en el segundo caso es necesaria cierta velocidad acorde a la técnica individual.
    2. Se debe practicar una tonalidad distinta cada día.
    3. Los modos menores en dobles cuerdas están escritas en el modo harmónico, no melódico, para hacer uso de esos intervalos de segunda aumentada que habitualmente se descuidan. Sin embargo he utilizado por contra en las escalas menores simples la forma melódica, mientras ambas variaciones han sido combinadas en las terceras partidas.
    4. A fin de aprovechar al máximo el tiempo disponible he combinado los ejercicios de escalas con los ejercicios de arco. Estos golpes de arco pueden aplicarse también en los ejercicios de dobles cuerdas, en cuyo caso los intervalos no sonarían simultaneamente, sino alternativamente.
    5. El alumno puede, si es su deseo, añadir anotaciones dinámicas.
    6. Me ha parecido útil añadir, al final de cada escala algunos ejercicios en simple o doble cuerda en armónicos, dado que se practica escasamente esta especialidad.
    7. El orden de acordes introducidos aquí son los mismos que Sevcik introdujo en su Método de violín.

Consejos y comentarios del Editor (Por Max Rostal)

Se han incluido nuevas digitaciones acordes a los nuevos gustos, y se han situado debajo de las notas, mientras que las de Flesch se encuentran sobre las notas.

Algunos dedos de Flesch corren riesgo de ser malinterpretados. Por ello, he añadido explicaciones sobre ellos.

Mis dedos no son correcciones, sino alternativas al gusto de nuestros días y que pueden usarse en alternancia con los de Flesch. No comparto la opinión de que todas las escalas deben tocarse de la misma manera, porque, por razones musicales, cada una requiere a menudo digitaciones propias y adecuadas.

He indicado a veces dedos que facilitan la interpretación pero, ocasionalmente he utilizado dedos más difíciles con el fin de que los estudiantes practiquen las excepciones o por razones técnicas. El hecho de que pasajes parecidos se digiten de forma diferente proviene de mi intención de hacer experimentar ejercicios más diversos.

Si no se indican otras alternativas, los dedos de Flesch son los válidos.

He de lamentar que ocasionalmente mis dedos no son realmente comprendidos y parecen a algunos veteranos incluso absurdos. Para mí, es evidente que los dedos más fáciles no son siempre los más musicales y juiciosos. Si aceptamos que la idea artística está subordinada a la seguridad de ejecución, la práctica del violín se vuelve más fácil.

Cuando las digitaciones no se corresponden a los estereotipos habituales y conocidos, se les declara, demasiado a la ligera, “intocables y arriesgados”, e incluso, a veces, “absurdos”. Pero, en un instrumento de cuerda, la digitación es algo más que un intento de evitar dificultades. Hay en ello una parte importante del arte de la interpretación y, si no se presentan dificultades técnicas, no se elevaría el nivel técnico para resolver los problemas de interpretación.

En los suplementos, que creo importantes, aparte de los pasajes propuestos por Flesch he usado también escalas extendidas para ser tocadas en cada cuerda de una a dos octavas, y de la escala de tres octavas a la de cuatro.  En mi versión, las formas harmónica y melódica de la escala menor se han tratado separadamente. Para los ejercicios de dobles cuerdas, añado los intervalos no tratados por Flesch, tales como los unísonos, las cuartas, quintas y séptimas, y también he extendido el uso de sextas, octavas y décimas. Para los armónicos, aparte de los tocados de la forma habitual con el primer y cuarto dedos, también incluyo ejercicios de preparación para los dobles armónicos. Se han añadido escalas de tono completo y de cuarto de tono, usadas en la música del siglo XX. La técnica de la mano izquierda incluye también pizzicato, que debe ser ampliamente estudiado.

Algunos comentarios al Prefacio de Carl Flesch

  1. Propongo practicar las escalas no sólo como ejercicio de entonación y velocidad como sugiere Flesch, sino como entrenamiento de los cambios de posición y, más adelante, de vibrato. En los ejercicios de entonación no basta con corregir cada “nota fallida o falsa nota”. Es necesario sobretodo trabajar el ataque a la nota que reconocemos falsa para conseguir, de un movimiento seguro, el tono exacto sin corrección posterior, que siempre se nota. Así, mejoramos al mismo tiempo la apreciación de las distancias y los cambios de posición. Como punto de partida, tomaremos siempre la nota que se encuentra delante del tono reconocido como fallido. En los ejercicios de cambio de posición, hay que practicar el cambio de forma inaudible, contrariamente al expresivo glisando intencionado. Una de las formas de conseguirlo es comenzar realizando el cambio de posición preferentemente en un intervalo de semitono. Si he recomendado incluir también la práctica del vibrato, no aconsejo hacerlo sin embargo en la fase en la que aún cometeríamos muchos errores de entonación. Practicar invariablemente sin vibrato como muchos profesores recomiendan es un método desfasado, en mi opinión, puesto que la entonación también debe ajustarse cuando tocamos con vibrato. Actualmente los violinistas utilizan el vibrado para reforzar la belleza tonal, la intensidad y expresividad de diversas maneras. No se trata de utilizar el vibrato porque sí, sino de evitar los errores de vibrato no intencionados e incontrolados. Demasiado a menudo, la línea de sonido de tonos iguales se interrumpe involuntariamente, sobre todo en la últimas notas antes de un cambio de posición, sobre todo si nos servimos del cuarto dedo. Esta parada del vibrato se debe casi siempre, no a razones artísticas o interpretativas, sino a cierta pereza y negligencia. Es cierto que, en este caso, el ejercicio del vibrato continuo e ininterrumpido es mi objetivo, pero eso no implica que siempre haya que aplicar el mismo tipo de vibrato.
  2. Flesch aconseja cambiar de tonalida cada día, pero eso será el esfuerzo final sólo cuando las iniciales dificultades hayan sido vencidas, cuando no se trate ya de aprender la técnica, sino de mantenerla. Al principio debemos cambiar la tonalidad como mucho dos veces por semana.
  3. El sistema de Flesch de alternar entre las escalas harmónica y melódica cuando tratamos con tonalidades menores homofónicas y dobles cuerdas, puede en algunos casos llevar a confusión. Según mi experiencia hay que separar clara y estrictamente las escalas melódica y harmónica.
  4. Antes de comenzar con los ejercicios de arco recomendados por Flesch, el estudiante debe concentrarse antes en notas ligadas para separar los problemas de la mano izquierda de los de la mano derecha. Realmente es necesario comenzar por abordar cada dificultad técnica antes de combinar varias, mucho más adelante. El sistema de escalas sirve, en primer lugar, para desarrollar la técnica de la mano izquierda. El ejercicio de legato es precisamente el punto medio más adecuado para controlar que sean inaudibles los cambios de posición y los cambios de cuerda.
  5. Antes de practicar los reguladores dinámicos, aconsejo practicar el pianissimo con una presión fuerte de los dedos de la mano izquierda para conseguir la separación de ambas manos y evitar las presiones iguales de ambas cuando deben ser distintas. Demasiado a menudo, las fuerzas de las dos manos se igualan en lugar de comportarse de forma independiente. Además, el hecho de tocar pianissimo (fenómeno psicológico curioso) aumenta la capacidad de concentración de muchos violinistas, intensificándose durante los ejercicios. No será por tanto hasta más tarde cuando los ejemplos dinámicos indicados (piano subito, forte subito, crescendo,etc.) deben ser practicados.
  6. Con respecto a los armónicos, Flesch utiliza sólo los típicos en cuartas, de modo que los estudiantes son incapaces de tocar dobles armónicos correctamente. Por ello he añadido armónicos simples en terceras mayores y menores.
  7. He usado notación gráfica para evitar la notación alemana:

arch simbols

 

Cómo practicar el Sistema de Escalas:

  1. Al principio, y durante cierto tiempo, se evitarán las variaciones indicada por Flesch sobre los golpes de arco, que se deben ejecutar legato para conseguir buenos e inaudibles cambios de posición y cambios de cuerdas. Al principio, trabajar muy lentamente sucesiones de dos notas. Con gradual y cuidadosa aceleración para llegar a ligaduras de duración de una negra, dos negras, etc…
  2. En las partes de una octava (números de 1 a 4), señaladas separadamente para cada cuerda, trabajar primer la cuerda de la posición más baja y gradualmente ir subiendo a la posición más alta. En otras palabras, no empezar siempre en la cuerda Sol o en la secuencia impersa.
  3. Para todas las escalas menores practicar separadamente el modo melódico y el harmónico.
  4. Comenzar el ejercicio de escalas cromáticas en terceras con la digitación estática.
  5. Los pizzicato se practicarán y variarán a voluntad
  6. El sistema de escalas es demasiado extenso como para ejecutarlo cada día, ni siquiera limitándonos a una sola tonalidad. Para aprovecharlo mejor se puede seguir esta planificación:

1er Día: Escalas homofónicas números 1 a 4 con extensiones, terceras, octavas normales, décimas, armónicos normales anotados como 1/4.

2º Día: Escalas homofónicas sobre 3 octavas, número 5, unísonos, cuartas, sextas, octavas normales.

3er Día: Escalas de tonos entereos, quintas, octavas normales, octavas digitadas, armónicos digitados 1/3 y 1/4.

4º Día: Escalas homofónicas números 1 a 4, escala de cuarto de tono, octavas normales, armónicos de quinta, pizzicato de la mano izquierda.

5º Día: Escalas homofónicas de 3 octavas número 5, quintas, séptimas, octavas normales digitadas, armónicos de tercera mayor.

6º Día: Escalas de tono entero, unísonos, quintas, octavas normales, armónicos en tercera menor, pizzicato.

7º Día: Escalas homofónicas sobre tres octavas número 5, terceras, quintas, octavas normales.

Según esta planificación algunas secciones no son practicadas más que una vez a la semana, mientras que otras más importantes se ejecutan dos o tres, y las octavas normales todos los días.

Pero todas las propuestas son susceptibles de modificar según las necesidades.

ecientemente, sobre todo a partir de 1980, han surgido dudas acerca de la conveniencia o necesidad de practicar escalas, quizás en una búsqueda aparentemente falsa de originalidad y a una falta de capacidad. Pero estos ejercicios han rendido servicio a generaciones de intérpretes célebres. Heifetz, por ejemplo, estaba convencido de su valor y las exigía a sus alumnos tanto como a sí mismo.

En la edición de “Ejercicios y escalas” de Engène Ysayë, los hijos del autor comentaban: “podemos afirmar por otra parte que estos “Ejercicios y escalas” constituían la base de la gimnasia técnica matinal de Eugène Ysayë, a los cuales él añadía variaciones improvisadas de deslumbrante fantasía.”

Joseph Szigeti escribió, en el prefacio de esta misma edición, que las escalas constituyen un factor tan invariable en nuestro bagaje,  que cada sistema de escalas sólo se parece a sus predecesores y contemporáneos cuando se los observa superficialmente y sin perspectiva histórica.”

Además, la necesidad de practicar sistemas de escalas se refuerza por el hecho de que, en los programas de los grandes concursos internacionales de violín, como los Yehudi Menuhin en Paris o el Fritz Kreisler de Graz, la interpretación de escalas es obligatoria.

Max Rostal, Berna, 1986

Ivry Gitlis, alumno aventajado de Carl Flesch, con su insultante facilidad.

Empezando a improvisar con el violín

Muchos violinistas, cuando oyen la expresión “improvisar” se quedan petrificados, miran hacia otro lado y hacen como si no hubieran oído nada. A mí me pasaba (y todavía me ocurre un poco) 🙁

Y es que en la formación violinística clásica no se suele prestar demasiada atención a esta forma de enfrentarse a la música, sin partituras, plan previo y sin red de seguridad.

Así que, si tenéis ya ganas de comenzar hacer un poco el loco con el violín de vez en cuando, os voy a enseñar la forma en que yo empecé a desbloquearme el coco y a soltar mis dedos, haciendo lo que me salía de dentro en vez de lo que ponía en un papel.

Y es que, lo que al principio era terrorífico, poco a poco fue convirtiéndose en algo divertido y fresco que todo violinista (y todo músico) debería practicar. Sobre todo, recurriendo a música tradicional, en este caso americana y sus múltiples variantes, (folk, blues, bluegrass, country, etc.).

En primer lugar debo agradecer a Geoffrey Fitzhugh Perry su amabilidad al haberme dado permiso para publicar un par de temas de su libro Fiddle Jam, que fue la herramienta que me empezó a ayudar con el tema de la improvisación, y del cual voy a transcribir algunos de sus divertidos contenidos. A partir de aquí, puede que esté hablando yo, o puede que esté transcribiendo a Geoffrey 😉

La creatividad es un músculo cerebral que hay que entrenar a diario. Los niños son naturalmente libres y creativos pero también es cierto que alrededor de los 8 ó 9 años (edad en que muchos niños empiezan a tocar en la escuela) es cuando empiezan a sentir sus impulsos creativos aplastados.

Los niños son probablemente la tierra más fértil que tenemos en el mundo. Planta las semillas. La autoestima, confianza, autoridad, obediencia, concentración, relajación, son sólo algunos de los conceptos positivos necesarios para la improvisación. Hay muchas evidencias de que la improvisación actualmente mejora el crecimiento neurológico en ciertas partes del cerebro (y ése es un beneficio permanente). Terapia, salud, desórdenes de atención, estado de ánimo positivo, o sólo por ver a un chico interesado merece la pena intentarlo.

Los principiantes suelen marcar el mástil con líneas horizontales. Usaremos ese sistema para indicar las posiciones de los dedos.

marcas mástil violín

LA ESCALA MAYOR

La mayoría de estudiantes primerizos conocen una o dos escalas mayores. Es una de las primeras cosas que aprendemos después de Estrellita. Las escalas mayores son muy claras y con un sonido muy familiar. Una gran parte de lo que solemos escuchar está basada en ellas. Aunque algunos piensan que esta escala es quizás demasiado dulzona y plana para el rock’n roll, se pueden hacer cosas chulas tocándola en los siguientes ejemplos:

Recomendaciones antes empezar:

  1. Reláx. Respira profundamente y tómate tu tiempo. Las prisas y sus primas las preocupaciones son obstáculos para la creatividad.
  2. La idea básica  es usar las notas de las plantillas de dedos para tocar sobre el audio correspondiente, tocando lo que a ti te guste y te parezca que quede bien mientras escuchas y tocas a la vez.
  3. La zona EZ (más adelante veréis cuál es) es la mejor manera para empezar a tocar sin pensar. Toca cualquiera de las notas de esa zona y simplemente empieza y termina en la nota tónica (la nota “tónica” es la nota clave y da nombre también a la escala y tonalidad del tema) ¡y no te equivocarás nunca!
  4. El audio que acompaña a cada ejemplo te dará algunas ideas sobre riffs, frases, motivos, etc. para tocar.

“En resumen: adelante, no pienses, simplemente toca”.

 

Raven’s Daughter

  • Escala: Sol Mayor
  • Notas que puedes tocar: cualesquiera Sol, La, Si, Do, Re, Mi o Fa#
  • Zona EZ: 0, 1, h2, 3 en las cuerdas Sol y Re.
  • Carácter: luminoso, puro, fuerte.
  • Preparación: Recorre la zona EZ arriba y abajo, entonces empieza a alargarlas o acortarlas, a saltar y siéntete libre hasta que lo hagas sin pensar.
  • Instrucciones:
    • Modo sencillo: Empieza y termina en nota Sol. ¡Quédate en la zona EZ y no puedes equivocarte! Recuerda, es obra tuya, así que toca cualquier cosa que te guste o te parezca que queda bien.
    • Modo avanzado: Escucha el audio con el ejemplo que acompaña para tomar una o dos ideas. Recorre la zona exterior de la EZ un rato. Intenta evitar las notas Do y Fa# algo más que las demás (esto se llama escala pentatónica, ya hablaremos…). ¡Y no tengas miedo de excederte en intensidad!

Raven's Daughter fingers violin

Primeros consejos (en inglés).

 

Ejemplo de improvisación

 

Tema sin la parte del violín

 

  • Lección de audición: fíjate en que el audio es básicamente un riff de guitarra repetido y una parte diferente (un acorde de Do) que vuelve varias veces al principio ¿puedes oírlo? Intenta tocar algunas cosas durante ese fragmento que contraste con la sección de riff repetido (a lo mejor más picado, o algo más rápido, o más rítmico o a diferente velocidad…). Fíjate también cómo termina en el acorde de Do en vez de en el acorde de Sol (el acorde de tónica en esta clave) para proporcionarle un poco de misterio y suspense.
  • Problemas: ¡no toques demasiado! deja un poco de espacio para respirar… como si fueras un cantante.

P.D. Dite a ti mismo (o ten a alguien que te lo diga) que ¡eres el violinista más chulo del mundo por cómo has improvisado en este tema!

Le Bomb

  • Escala: La Mayor
  • Notas que puedes tocar: cualesquiera La, Si, Do#, Re, Mi, Fa# o Sol#
  • Zona EZ: 0, 1, h2, 3 en las cuerdas La y Mi.
  • Carácter: brillante, feliz, dulce.
  • Preparación: Recorre la zona EZ arriba y abajo, saltando, corriendo, arrastrándote, brincando, hasta llegar a tocar casi sin pensar.
  • Instrucciones:
    • Modo sencillo: Usa las notas de la zona EZ como te venga en gana y te parezca que suena bien con el audio. Comienza y termina en La y no podrás equivocarte.
    • Modo avanzado: Escucha el audio con el ejemplo que acompaña para tomar una o dos ideas. Intenta ser consciente y escuchar dentro de ti lo que deseas tocar antes de hacerlo.

Le Bomb fingers violin

  • Lección de audición: Este ejemplo es básicamente una idea repetida de 2 compases seguida de una sección de 4 compases (acorde de Mi) que te lleva de regreso al riff básico. Imagínate también el riff de dos compases durante el “break” de percusión ¿puedes oírlo?
  • Problemas: Mantén el movimiento pero no demasiado lejos, nunca más lejos que una o dos notas de la nota deseada, si no te gusta sobre la que estás.

Primeros consejos

 

Ejemplo de improvisación

P.D. Arruga la nariz y di para tus adentros: “no sabes lo que estás haciendo”… entonces ríete alto y fuerte y di: “¡pues claro que no! Esto es IMPROVISACIÓN, excepto por conocer la escala, mi mente está absolutamente vacía”.

¿Cómo obtener el “sonido fiddle”?

 ¿Estáis interesados en el Método?

En este libro encontraréis muchos más temas explicados, trucos, consejos, fotografías, adaptaciones para viola y cello, etc, etc… sólo necesitáis un nivel medio de inglés y una mente abierta. Enjoy!

Fiddle Jam
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Fiddle Jam
(Finally! A Way-Cool Easy Way to Learn How to Improvise). For violin, fiddle, viola and cello. Jazz Instruction. Improvisation, Jazz, Blues, Folk, Play Along. Instructional book and examples CD. Introductory text, instructional text, black & white photos, instructional photos, illustrations, fingerings, standard notation and examples CD. 46 pages. Published by Hal Leonard (HL.695716)Smp_stars30
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Links:

www.fiddlejam.com (sitio web del libro Fiddle Jam)
www.fiddlejaminstitute.com (academia online Beyond the Book!)
www.outlawfiddle.com (productos para violinistas)
www.geoffreyfitzhughperry.com (web personal de Geoffrey Fitzhugh Perry)

El cuello del violinista

Hoy traigo a Deviolines un artículo invitado, de parte del violinista y musicólogo Jesús Martín. Me parece interesante porque el cuello de violinista es un tema que me ha afectado personalmente durante bastante tiempo, a veces mucho, ahora poco, pero que, aunque parezca un problema menor, a menudo afecta de tal manera que perjudica la interpretación e incluso impide ensayar lo que deseamos. Quizás no esté totalmente de acuerdo en la idea de que este problema tenga como causa principal una mala postura; en mi caso también es debido a una tensión exagerada al sujetar el instrumento, sobre todo en los ejercicios de vibrato (uno de mis talones de Aquiles) que no termino de dominar todo lo que me gustaría. Esta angustia por trabajar algunos ejercicios sin la debida relajación termina produciendo presión excesiva en el cuello, de la barbada o de los tornillos metálicos que la sujetan, de manera que los bordes duros terminan causando un moretón que puede llegar a ser doloroso e incluso complicarse con pequeños granos, pelos de la barba que no crecen normalmente (sobre todo aquellos a los que les gusta la barba de 3 días), etc. Es un problema de la piel que en la mayoría de los casos no proviene de alergias a ningún material del violín, sino del continuo rozamiento de un borde o superficie dura con la piel. Así que, antes de pensar en buscar soluciones de otros materiales pensando que así no nos van a afectar lo mejor es relajarse antes de tocar, y trabajar junto con el profesor la postura para conseguir una sujeción más natural de instrumento.

Lo cierto es que incluso he visto en algunos conciertos a miembros de la OCNE con el famoso manchurrón (cuántas bromas de los amigos habré recibido insinuando que en realidad es una consecuencia de una noche de pasión…) y seguramente muchos de los pañuelos que se usan sobre la barbada responden también a ese problema.

Sin más, os transcribo el interesante artículo.

“Cualquier persona que ha pululado por un conservatorio ha distinguido a algunos estudiantes de violín y viola por una mancha en el cuello asociada a un roce o reacción alérgica. Su denominación internacional es “Fiddler’s neck” (cuello de violinista). Realmente se trata de una irritación de la piel por contacto que se presenta como un foco de liquenificación y pigmentación en el lado izquierdo del cuello justo por debajo del ángulo de la mandíbula. Son varios los factores que intervienen en estos cambios en la piel, probablemente una combinación de factores, entre ellos la excesiva presión, la fricción, una higiene deficiente y el exceso de sudor. Si que hay casos que nada tienen que ver con esto y que si son producidos por reacciones alérgicas a algunos materiales del instrumento.

Fiddler's neckPero dejemos atrás tecnicismos y leyendas populares para adentrarnos en una realidad, en muchos casos dolorosa y no precisamente por el dolor producido por el famoso “callo”. En mi experiencia he encontrado alumnos desesperados en busca de almohadillas “antialérgicas” o de marcas de lo más extrañas, mentoneras “x”, “y” o “z”, etc etc… y todo ello recomendado por el profesor de turno para proporcionarle comodidad para sujetar el instrumento o aliviar su molestia con el dichoso “callo”. Paradójicamente ellos mismos han podido ser los responsables de este problema dermatológico y ahora proponen una solución totalmente equivocada. Lo cierto es que todo violinista, estudiante o profesional, que tenga esa típica mancha en la piel del cuello es debido a un defecto en la sujección y apoyo del violín sobre la clavícula. Sí, sobre la clavícula… porque va siendo hora de eliminar la palabra “hombro” de nuestras explicaciones de como se sujeta el instrumento. Todo aquel que tenga el “callo” puede “agradecer” a sus profesores, especialmente a los que les iniciaron los primeros 3 años y a los que han pasado años después sin explicar o intentar poner solución al asunto, el tener este problema al que se tiende a quitar importancia por parte de los docentes y estudiantes (solo es un callo) pero que puede ser mucho más importante puesto que este defecto, como ya he explicado, es mucho más que una simple irritación en la piel.

¿Soluciones? El problema surge por un mal posicionamiento del violín y una presión excesiva. Esta claro que hay que reconsiderar nuestro contacto en ese punto con el instrumento. No es tarea fácil pero en manos de un buen profesional de la docencia y algún especialista en otros menesteres (relajación, fisioterapia,…) podemos llegar a corregir el problema. En cuanto este problema de posicionamiento este corregido el “callo” pasará a la historia.

Para terminar, cada violinista que lea este pequeño artículo y tenga esta mancha en el cuello puede reflexionar sobre el propio sistema educativo y en las manos de que profesionales ha realizado su carrera.

J.Martín

Fuente: Blog de Jesús Martín

Para aliviar esta dolencia se han creado, como bien dice Jesús Martín en su blog, algunas soluciones. Os dejo como ejemplo una (bastante cara) que he encontrado por la red, pero que no he probado, a base de una barbada con un recubrimiento de piel natural.

Fiddler'w neck neckguard

Si os tienta, debéis saber que ronda los 150€ , así que mejor intentar corregir la postura antes que probar este tipo de inventos.

Mi vida con el Método Suzuki

-“Tú eres un Suzuki puro.” 

La frase de mi profesor de violín me desconcertó momentáneamente, quizá por ciertas connotaciones “raciales” que me asaltaron de repente. Y me puse a pensar que tenía razón hasta cierto punto porque, aunque es verdad que he sido un fiel seguidor del Método Suzuki, también lo es que he picoteado por muchos tipos de ejercicios de todo tipo: los Sevcik, los Wolfhart, los Kreutzer, las dobles de Polo… escalas y ejercicios de la ABRSM, e infinidad de temas de los muchos libros de partituras de todos los estilos, libros a los que soy adicto. Así que no creo ser tan “puro”.

Comencé ya adulto, sintiéndome un poco extraño por haber decidido meterme en ese jaleo entre montones de niños que alborotaban y me miraban como si hubiera repetido curso 15 veces. –“Tú ya irás por el volumen 5 por lo menos ¿no?”– me preguntaban-

Shinichi SuzukiHe estudiado hasta el volumen 7 con mi profesor, he mirado por mi cuenta el volumen 8 e incluso he probado la versión del concierto de Mozart del volumen 9 (el 10 está en tareas pendientes), así que creo que conozco bastante bien el sistema. Un sistema al que se acusa desde los estamentos pedagógicos tradicionales de producir violinistas que tocan muchas cosas pero desafinan. Lo cual es injusto puesto que no se puede exigir resultados profesionales a un sistema que no tiene como su razón de ser el virtuosismo excelso, sino el acceso natural de los niños (y cada vez de más adultos) al mundo de la interpretación a todo aquel que se sienta atraído por él y quiera vivirlo desde una perspectiva que no tiene porqué ser profesional, pero podría serlo.

Siempre me ha llamado la atención la diferencia de actitud de las personas ante unos instrumentos u otros. Parece que cualquiera puede tocar la guitarra, más o menos como afición, pero nadie espera que toques el violín sólo por placer o como pasión desinteresada, siempre se le presupone una finalidad seria. Y la verdad es que lanzarse al estudio del violín es una aventura enriquecedora de autoconocimiento, de disciplina, de descubrimiento, de dejarse llevar por la música, de aprender a sentirla, que me atrevería a recomendar a todo el mundo con unas mínimas aptitudes.

Al final importa menos el método que se use que la actitud con la que lo trabajes. Como se suele decir, no es el qué, es el cómo. Tocar una escala o cualquier típico ejercicio puede ser aburrido pero no lo hagas mecánicamente; busca afinación y rapidez, claro, pero ponle un día swing, otro día melancolía, otro día intenta que sea como un chiste… El Método Suzuki busca mucho eso: minimizar el puro ejercicio sin musicalidad, alcanzar la técnica sin darte cuenta gracias a que siempre estás interpretando música. Otros métodos buscan también lo mismo (El Método O’Connor...)

Ahora ayudo a mi hija con el Método Suzuki y, enseñando, estoy re-aprendiendo cosas que casi había olvidado.

Mis 10 consejos:

Son consejos sencillos según mi experiencia; vosotros debéis valorar si os pueden ser útiles o no.

  1. No te limites al método Suzuki (o al que haya elegido tu escuela o profesor). Seguro que hay un tipo de música (jazz, blues, rock, pop, de videojuegos, celta…) que te encanta y ésa es la que, en cuanto tengas un mínimo de conocimientos, debes interpretar.
  2. Toca siempre que puedas. A veces no apetece sacar el violín del estuche y ponerse a practicar. Pero a mí me ocurre a menudo que, una vez vencida la pereza o fatiga inicial, pensando en que ese día me voy a aburrir tocando, al poco ya estoy metido en la música y disfrutando, olvidando todos los problemas.
  3. Dedícale tiempo a tu estado físico. No sólo el violín es tu instrumento, también lo es tu cuerpo. Debes sentirlo relajado, en buena postura, con buen tono muscular, sin agarrotamientos. No es que debas hacer pesas, pero cuidar tu salud física influye en la interpretación. Lee estos consejos sobre estiramientos y calentamiento.
  4. El lugar es importante. Busca una habitación en la que sientas que puedes concentrarte, con buena iluminación, sin ruidos exteriores. No deberías tocar con miedo a que te oigan los vecinos, o tu familia o quien sea. Si es así, tocarás con miedo y timidez, con el brazo derecho encogido y el sonido pobre. Si no puedes evitar pasar vergüenza de que te oigan, utiliza una sordina, hazte con un violín eléctrico con auriculares ¡o aísla tu habitación!
  5. Intenta estar cómodo. No te pongas a tocar con la ropa con la que llevas todo el día trabajando. Ponte algo cómodo, puedes quedarte descalzo o en calcetines, sin ninguna prenda como cinturones, sujetadores o lo que sea que te oprima.
  6. La gente sabe que estás empezando a aprender, de modo que seguramente serán benévolos; aunque te dé vergüenza, muéstrales de vez en cuando tus progresos, para acostumbrarte a tocar ante público. Es cierto que el violín es (para mí) uno de los sonidos más bellos, pero también puede ser uno de los más insufribles tocado mal. Sin embargo, a menudo los que te escuchan no se dan cuenta de los errores que tú sí detectas al tocar. Si esperas a que te salga algo “perfecto” nunca te decidirás, así que lánzate cuando te salga “casi perfecto”.
  7. De vez en cuando, y aunque hayas progresado mucho, vuelve a lo más básico. Toca una nota simple, tenida, lentamente, procurando que sea una nota perfecta del talón a la punta o de la punta al talón, varias veces, manteniendo una postura perfecta de los  brazos y el cuerpo, o tócala procurando matizarla en volumen, intensidad, vibrado, etc. Luego vuelve a twinkle twinkle o algún otro tema primario y haz de él un tema más complejo, aportándole matices, expresividad, incluso alguna improvisación.
  8. ¿Tocar de pie o sentado? En mi opinión, mejor de pie al principio, pero no te prohibas sentarte si te cansas o simplemente te apetece un rato. Se debe cuidar la postura en ambos casos. Yo como ya estoy muy mayor ya siempre toco sentado XD.
  9. No busques la rapidez como objetivo principal. Lo fundamental es siempre la afinación, después el ritmo, más tarde la musicalidad y los matices con el brazo derecho. La velocidad vendrá poco a poco al practicar los anteriores conceptos.
  10. Solfeo. El coco. El horror. El hueso. No te obsesiones con el solfeo. Pero tampoco pases de él. Irás aprendiéndolo sin darte cuenta poco a poco, igual que el violín, pero también conviene que estudies un poco de teoría de forma paralela, sin prisa y sin agobios pero sin pausa.

 

Os dejo una recopilación de vídeos y consejos sobre los primeros temas del volumen 1 del Método Suzuki, recopilados en la comunidad de violinistas aficionados de Taringa, por .

Estos vídeos no deben sustituir la labor del profesor, que es imprescindible, pero pueden servir de orientación en casa o para aquellos que aún no han elegido a su profesor. Están en inglés, de modo que incluyo algunas explicaciones en castellano de  cada uno.

Twinkle, Twinkle, Little Star

Hay que tener en cuenta que hay 3 ejercicios para realizar antes de las variaciones del Twinkle en el Vol.1:

  1. Ejercicio para la postura correcta de la cuerda mi.
  2. Ejercicio para cambiar de cuerda.
  3. Ejercicio para colocación rápida de dedos.
  • 0:42 Asegurarse siempre de tener una postura correcta. Comprobar que el pulgar y el meñique de la mano derecha esten curvos. Y tambien del espacio que debe haber entre el indice y el pulgar de la mano izquierda sobre el diapasón.
  • 1:15 Variación A: Para esta y las demas variaciones solo utilizaremos la parte media del arco. (atencion al Staccato)
  • 1:37 Mover el codo un poco hacia adentro al cambiar de cuerda. Luego colcoar los dedos 1, 2 y 3 al mismo tiempo para continuar.
  • 1:56 Detener siempre el arco antes de cambiar de cuerda. Y mantenerlo siempre en contacto con las cuerdas.
  • 3:05 Al levantar los dedos deben mantenerse curvos y no muy alejados del diapasón. No hay que estirarlos, es un mal hábito que se debe evitar.
  • 4:03 Variacion C
  • 6:26 Asegurarse de detener el arco antes de mover los dedos.
  • 7:08 Variación B
  • 0:00 Variación D
  • 0:45 Movimiento del brazo. Sólo se mueve el codo y no todo el brazo.
  • 1:45 Esta vez no apoyaremos los 3 dedos a la vez, sino de a uno para acostumbramos poco a poco a la posición de cada dedo en el diapason sin depender de los demas.
  • 3:45 Variacion E: esta variacion no está en la version del Suzuki que se consigue on-line, pero consta básicamente de tresillos, es decir, 3 notas por  tiempo.
  • 7:14 No hay que estirar los dedos para llegar a las otras cuerdas. Simplemente movemos el codo hacia adentro para que toda la mano se mueva y así alcanzar las demás cuerdas manteniendo la posicion de los dedos. Así es más sencillo tocar cada nota afinada.
  • 7:40 Theme (Tema) Utilizamos 2 movimientos de arco: uno normal (para las negras) y otro lento (para las blancas), ambos con la misma cantidad de arco.

Lightly Row

  • 1:51 Movimiento con el arco. Básicamente son 2 movimientos: corto (negras) y lento (blancas).
  • 3:04 Con la mano izquierda también podemos practicarlo de este modo, memorizando la digitación.
  • 4:22 Se utiliza la parte central del arco.
  • 4:38 Emplear la misma cantidad de arco para el movimiento Corto (Negras) y Lento (Blancas).
  • 5:05 Ahora combinamos las 2 manos y tocamos la pieza muy lentamente. Tocar de forma pausada. Detener el arco en cada nota. Mover el codo un poco hacia adentro cuando nos cambiamos a la cuerda La. Se cambian los dedos con el Arco detenido. Es mejor tocar de forma lenta y precisa hasta que se domina la coordinación de los brazos, dedos y oído.


Song of the Wind

  • 2:28 El tercer compás es el más difícil. Para tocar bien esta parte hay que mover el brazo al cambiar de cuerda, no sólo los dedos.
  • 5:14  En el cuarto compás, después de tocar Mi y aprovechando el silencio de negra, hacemos un círculo en el aire con el brazo para volver a la posición inicial del arco, .
  • 5:41 Realizar ese movimiento circular correctamente.
  • 6:40 Practicar los dos primeros compases deteniendo el arco entre cada nota..
  • 8:20 Playthrough.

Go Tell Aunt Rhody

 

  • 1:50 Para esta pieza podemos utilizar todo el arco o comenzar utilizando solo la parte central para que sea más fácil.
  • 2:12 Aquí se realiza un movimiento completo por cada negra, y la mitad superior del arco para las corcheas.
  • 2:51 Se colocan el primer dedo y segundo dedos a la vez como punto de partida, o sólo segundo y el primero cuando lo necesitemos. La mejor manera de ubicarse en el diapasón es sintiendo cuanto debe estirarse cada dedo con respecto al otro, por ejemplo: cuánto debe estirarse el segundo dedo con respecto al primero. Asi iremos desarrollando la llamada memoria muscular. Esto es tarea de muchos años.
  • 3:28 Cómo empezar.
  • 4:30 Fijarse en que hay que mover un poco el brazo para trasladarse desde la primera a la segunda cuerda.
  • 4:47 Se mueve el brazo, no la mano, para que los dedos estén siempre en posición correcta.
  • 5:10 Seguimos con el tercer compás. 5:30: los dedos segundo y tercero han de estar juntos.
  • 5:45: El primer dedo se ubica aproximadamente a medio camino entre el segundo y la cejilla.
  • 5:57 Los dedos deben acostumbrarse a buscar la posición pero sin ir deslizándose para buscarla, hay que intentar llegar a la nota a la primera. La práctica es la que proporcionará esa habilidad.
  • 6:34  El pulgar debe estar al costado (cerca de la cejilla) no enganchado en el diapasón. También prestar atención a colocar los dedos en el diapasón suavemente, con la presión mínima y necesaria para que suene bien. Así es más sencillo y rápido cambiar su posición.
  • 7:55 Segunda linea (quinto compas).
  • 9:15 Al tocar la blanca se debe dejar un margen (con el arco) para continuar con la siguiente nota. Si no ocurrirá esto: 9:25.
  • Así es como hay que hacerlo 10:15. La ultima linea (compas 9 a 12) es igual a la primera.
Playthrough:

O Come Little Children

  • 0:37 Comenzamos en la parte media del arco.
  • 2:08 Mantener el mismo movimiento de arco durante todo el tema.
  • 2:25 Sólo movemos el codo y no todo el brazo haciendo un movimiento corto para las corcheas. No hay que pasarse de la mitad del arco al hacer el movimiento corto.
  • 4:05 En los compases 4, 8 y 12 y 16 (el último) se mueve el arco 3/4, se realiza una pausa y se continua en la misma direccion con la siguiente nota.
  • 5:42 Playthrough

May Song

  • 0:25 Ésta es la primera canción en la que aparecen notas con puntillo.
  • 2:28 Éste será el movimiento del arco para el comienzo y para todos los compases que comiencen con una negra con puntillo.
  • 3:00 Allyson comenta que podemos imaginar el movimiento del arco como si fuese similar a la forma de un rayo.
  • 3:05 Comienza el primer compás.
  • 3:30 En el segundo compás el movimiento del arco es igual que en “Go tell Aunt Rhody”
  • 3:36 Detener el arco entre cada nota. No debe ocurrir esto: (4:40).
  • 5:11 Mantiene el ritmo del primer compás (con otras notas).
  • 6:08 Es importante practicar esta pieza muy lentamente. No deben intentar tocarlas rapido solo porque que creen que pueden hacerlo. Al principio lo más importante es que suene bien afinado, no la rapidez. La forma de saber cuando agregar un poco mas de velocidad es simple: Si sigue sonando bien tocando un poco mas rápido, entonces esta bien, pero si no suena bien, quiere decir que aún no es tiempo de tocarla a esa velocidad. Al principio es mejor concentrarse mas en dominar los distintos movimientos del arco y en la posición correcta de los dedos en el diapasón, que en la velocidad.
  • 6:30 La segunda línea es más sencilla.
  • 8:30 La tercera línea, igual que la primera. Después se repite todo desde el principio.
Playthrough:

Long, Long Ago

Esta canción incluida tanto en el volumen 1 como en el 2 del Método Suzuki. La única diferencia es que en el primero está en La y en el segundo esta en Sol. Allyson no realizó el video para la version del volumen 1, pero esta pieza es sencilla. El ritmo es fácil y el movimiento del arco es similar al de “O come, little children”. Además, tocaremos la tercera cuerda (Re) por primera vez.

  • 0:33 Primero practicamos el ritmo. Simplemente tocamos negras y corcheas. (Para las blancas utilizamos la misma cantidad de arco que para las negras solo que mas despacio).
  • 1:10 La canción completa. Recuerdad que ella esta tocando la versión en Sol del volumen 2, así que no sigáis la digitación.
  • 1:42 Al terminar el octavo compás levantamos el arco ya que en el próximo comenzamos hacia abajo en la primera cuerda.
  • Esta es la versión del Vol. 1:
  • 0:30 Fijarse en cómo hay que levantar arco en el compás 8.
  • 0:34 Para tocar la tercera cuerda (RE) simplemente movemos el hombro un poco mas para levantar el brazo.
  • 0:40 La cuarta línea es iguala que la segunda.

Espero que estas primeras consideraciones os sean útiles para empezar. Y espero que también comentéis vuestras experiencias y consejos con el Método Suzuki, o cualquier otro.

PODEIS ADQUIRIR LIBROS, DISCOS,ETC DEL METODO SUZUKI, AQUI

Links:

Suzuki violín

Federación Método Suzuki

European Suzuki

Plantillas para el mástil

Desde hace mucho tiempo, la pedagogía del violín tiene un aura de tarea ciclópea, larga y muy difícil, sólo apta para los especialmente dotados de gran talento musical y fuerza de voluntad incansable. Por eso, son muchos los intentos que se han realizado para popularizar y facilitar su aprendizaje, intentos que a menudo se suelen menospreciar por todos aquellos que han realizado sus estudios “a la antigua”,  es decir, con puro trabajo y férrea disciplina. Lo cierto es que es excesivo el contraste entre el trabajo y esfuerzo necesarios para aprender y el también necesario placer que debería ser siempre interpretar música. La exigente técnica impide en muchos casos llegar a disfrutar de tocar el violín ¿cuántos abandonos hay en este camino? seguramente demasiados.

El Método Suzuki (o el Método O’Connor, comentado también en esta web) es uno de los más conocidos intentos por hacer del aprendizaje del violín una tarea más natural y accesible, fomentando que los niños aprendan a tocar casi sin darse cuenta.

Pero hay otros sistemas, o trucos, que buscan proporcionar una curva de aprendizaje, una “entrada al violín”, menos frustrante, y más satisfactoria.

Plantillas LarrytabEntre estos intentos hemos encontrado las plantillas LarryTab para el mástil del violín, un producto inspirado en una habitual práctica de los profesores que consiste en marcar en el violín de los niños las principales posiciones de los dedos, de modo que, al principio, puedan saber visualmente dónde deben colocarlos, permitiendo centrar toda su atención en otros aspectos de la difícil toma de contacto inicial.

“El objetivo es que el estudiante acceda rápidamente a las posiciones sobre el diapasón de forma precisa, viendo dónde están ubicadas las notas. Quien no tenga un instructor para corregirlo logrará educar su oído rápidamente sin perder tiempo en un sinfín de intentos. Así mismo, para un profesor de violín la ayuda que puede brindarle la plantilla es inmensa.”

LarryTab

Gracias a este sistema, tocar el violín se acercaría más a la forma en que se suele empezar con una guitarra, mediante tablaturas y números. Así, se incluyen numeraciones para poder interpretar sencillos temas que producen una satisfacción inmediata a los esfuerzos, y animan a los novatos a profundizar en el estudio.

 

Plantillas LarryTab

 

“La tablatura para violín es fácil e intuitiva, le indicará sobre qué cuerda y traste presionar. Con los ejercicios que se acompañan aprender será entretenido. No es necesario tener conocimientos sobre teoría musical. De todas maneras, los ejercicios en este libro están escritos en tablatura y notación musical estándar. Usted puede utilizar cualquiera de los dos sistemas.
La notación en tablatura es similar a la notación tradicional pero simplificada. La ventaja radica en aprender melodías populares y conocidas por el alumno. De esta forma gran parte del aprendizaje es intuitivo. Mientras el alumno lee la tablatura y la ejercita, reconocerá la melodía y sabrá cuándo cambiar de cuerda y posición. También tendrá una idea previa de la duración de las notas. Se comenzará con melodías fáciles continuando con las más avanzadas.
Si usted desconociera alguna de las melodías, sería necesaria  una orientación rítmica para poder tocarla. Todas las que se presentan aquí son muy conocidas y fáciles de encontrar y oír en Internet.

En la tablatura se encuentran cuatro líneas, cada una representa una de las cuerdas del violín. Las barras verticales dividen la tablatura en compases.”

LarryTab

Plantillas LarryTab

Según el fabricante, el producto carece de adhesivos que puedan dañar el instrumento, consiguiéndose una sólida sujeción mediante un sistema autoadherente que se puede colocar y retirar las veces que se quiera. Además, no mancha, ni se deteriora con el uso continuado. Se instala de forma sencilla.

Desde este punto de vista, el sistema es interesante porque facilita los difíciles inicios con el instrumento, cuando cualquier cosa, desde cómo poner los dedos en el arco, hasta cómo colocar la muñeca izquierda nos resulta complicado.

Plantillas LarryTab

MI OPINION

La verdad es que no puedo opinar de forma objetiva porque no tengo el producto, así que simplemente comentaré las impresiones que me produce este sistema según lo muestra el fabricante:

Lo bueno:

  • Disminuye el esfuerzo inicial a realizar para llegar a conseguir interpretar una melodía.
  • Al rebajar la posible frustración, reduce el nivel de abandonos en los primeros años.
  • Los profesores ya no tendrán que andar pegando cinta adhesiva en los mástiles.
  • Menor dependencia del profesor a la hora de aprender a tocar, permitiendo un mayor autoaprendizaje.

Lo malo:

  • Buscar las notas mediante la vista, hace que no se trabaje el oído, pudiendo producir malas costumbres. Es tarea del profesor saber cuándo y cómo ir retirando esta ayuda.
  • Evitar esfuerzos no siempre es bueno. A menudo, un poco de sufrimiento (ese sufrimiento dulce de buscar la música sin red, que nos hace crecer y nos forma el carácter…), una dificultad no desmedida ayuda a enfrentarse, no sólo a la búsqueda de la mejora en la música, sino a la vida en general.

Al principio este sistema me recordaba a esos cuadros con siluetas numeradas en las que uno sólo tenía que rellenar los huecos con el color que te decían para conseguir pintar un cuadro más o menos conseguido. Pero… ¿realmente eso era pintar? ¿se aprendía algo con ese sistema? Realmente creo que era mucho más creativo pintar monigotes en los márgenes de los libros de texto.

Pero por otro lado estas plantillas pueden ser beneficiosas si ponemos en la balanza los pros y los contras. Siempre que se sepa cuándo y cómo ir abandonándolas, y siempre que no se intente usar en sustitución de un buen profesor.

Las plantillas LarryTab pueden adquirirse online desde la web del fabricante.

Fuentes:

Larrytab

En este hilo se puede leer un interesante debate sobre ellas:

Debate Taringa