El valor de la musicoterapia en la vida de las personas, por Carmen Salvador, II

¿Cómo definirías para los neófitos el significado y los campos de actuación de la musicoterapia?
Según mi experiencia, musicoterapia sería para mí la utilización del sonido, como un medio a través del cual se posibilitan sentimientos y emociones; un potenciador de recuerdos - reminiscencia - y un tiempo presente – el de la sesión - “sano”, en el que poder participar y colaborar en el desarrollo de un proyecto tanto personal – “yo toco este sonido” y “yo canto esta canción” – como común - ¿Tocamos?, ¿Cantamos? ¿Bailamos? – con la prioridad de sentirse contenido, escuchado, atendido, querido, respetado y sobretodo válido. Para una definición más científica, os recomiendo la lectura de éstos libros: 

“Definiendo musicoterapia” Keneth Brucsia.

“La música como proceso humano” Patxi Del Campo.

“Introducción a la musicoterapia” William B. Davis, Kate E. Gfeller y Michael H. Thaut.
¿Qué cualidades crees que debe tener un buen musicoterapeuta?
La formación como musicoterapeuta es fundamental. Yo he realizado un postgrado de 3 años de duración, formación en seminarios de fin de semana – de viernes a domingo, y se incluía la Escuela de Verano – en total unos 188 créditos. 

En cuanto a la formación en general, quien realice estudios de medicina, enfermería, pedagogía, derecho, bellas artes… si también tiene formación musical complementaria, son candidatos a hacer la formación. Eso es lo que yo vi en mi promoción, además de músicos o gente formada exclusivamente en música, había personas de otras disciplinas. En mi caso concreto, realicé la entrevista con Patxi Del Campo y en ese momento mi formación era una diplomatura en maestro especialidad musical, y grado medio de acordeón y lenguaje musical, junto con 5 años de piano complementario y 1 de armonía – en una escuela de música –. 

Mi formación en canto, con Maria Eugenia Echarren fue posterior. Tengo una espinita clavada en cuanto a la formación musical en el conservatorio. No pude formarme ahí, debido a que yo vivía en un pueblo, y mis padres no podían llevarme a la ciudad todas las semanas. Siempre ha habido afición musical en mi familia, mucha afición a cantar, pero mi padre se propuso aprender a tocar algún instrumento y comenzó con la guitarra. Después vino el acordeón y a mí ahí me picó el gusanillo. Me gustó su sonido, alegre y fuerte. Empecé a tocar el acordeón con ayuda de mi padre y por mi cuenta, después aprendí un poco de solfeo con 11 años - con una profesora de un pueblo de al lado - y luego tocaba por mi cuenta. En ésta época en EGB, nosotros no teníamos la asignatura de música en la escuela y en 1º de BUP solo tuve acceso a Historia de la música. 

Una vez que me aceptaron en el postgrado, tenía mucho miedo de no dar el nivel. De no tener suficiente formación musical. Pero todo fue bien. Con lo que yo sabía era capaz de improvisar, de apoyar lo que tocaban otros, y de interpretar. Durante estos tres años, fue algo crucial para mí, el atreverme a realizar una terapia personal – con una terapueta Gestalt - . Mi profesor y supervisor Patxi, me lo recomendó, porque detectó que yo tenía ciertos “enganches” personales, ciertos problemas emocionales que no estaban cerrados, y que podían ser negativos para mi trabajo, ya que corría el riesgo de no separar lo que era del cliente de lo que era mío. Por lo que mi formación se completó con un trabajo psicoterapéutico personal, muy duro, pero muy enriquecedor. Gracias a él mi trabajo en la escuela y en las sesiones de musicoterapia mejoró. 

Poniendo distancia a eso, sabiendo cuál era mi enganche personal en algo, pude trabajar realmente con el niño, y tratar sus verdaderas necesidades. Esto me sirvió tanto para dar mis clases de música como para mis intervenciones musicoterapéuticas. Concluyendo: en mi opinión, un buen musicoterapueta tiene que tener tanto formación en música, como en musicoterapia y sería recomendable, en mi opinión, realizar un proceso terapéutico propio, con el que saber qué es personal y qué es del paciente, con el objetivo de no hundirte con él, de no hacer tuyo lo suyo o viceversa, ya que esto es muy peligroso. No sería una correcta intervención. Al hablar de sentimientos y emociones, puede quedar una herida abierta en el cliente, si no se sabe poner cada cosa en su sitio y cerrar bien cada sesión y todo el proceso en sí.

El valor de la musicoterapia en la vida de las personas, por Carmen Salvador, II

¿Cómo definirías para los neófitos el significado y los campos de actuación de la musicoterapia?
Según mi experiencia, musicoterapia sería para mí la utilización del sonido, como un medio a través del cual se posibilitan sentimientos y emociones; un potenciador de recuerdos - reminiscencia - y un tiempo presente – el de la sesión - “sano”, en el que poder participar y colaborar en el desarrollo de un proyecto tanto personal – “yo toco este sonido” y “yo canto esta canción” – como común - ¿Tocamos?, ¿Cantamos? ¿Bailamos? – con la prioridad de sentirse contenido, escuchado, atendido, querido, respetado y sobretodo válido. Para una definición más científica, os recomiendo la lectura de éstos libros: 

“Definiendo musicoterapia” Keneth Brucsia.

“La música como proceso humano” Patxi Del Campo.

“Introducción a la musicoterapia” William B. Davis, Kate E. Gfeller y Michael H. Thaut.
¿Qué cualidades crees que debe tener un buen musicoterapeuta?
La formación como musicoterapeuta es fundamental. Yo he realizado un postgrado de 3 años de duración, formación en seminarios de fin de semana – de viernes a domingo, y se incluía la Escuela de Verano – en total unos 188 créditos. 

En cuanto a la formación en general, quien realice estudios de medicina, enfermería, pedagogía, derecho, bellas artes… si también tiene formación musical complementaria, son candidatos a hacer la formación. Eso es lo que yo vi en mi promoción, además de músicos o gente formada exclusivamente en música, había personas de otras disciplinas. En mi caso concreto, realicé la entrevista con Patxi Del Campo y en ese momento mi formación era una diplomatura en maestro especialidad musical, y grado medio de acordeón y lenguaje musical, junto con 5 años de piano complementario y 1 de armonía – en una escuela de música –. 

Mi formación en canto, con Maria Eugenia Echarren fue posterior. Tengo una espinita clavada en cuanto a la formación musical en el conservatorio. No pude formarme ahí, debido a que yo vivía en un pueblo, y mis padres no podían llevarme a la ciudad todas las semanas. Siempre ha habido afición musical en mi familia, mucha afición a cantar, pero mi padre se propuso aprender a tocar algún instrumento y comenzó con la guitarra. Después vino el acordeón y a mí ahí me picó el gusanillo. Me gustó su sonido, alegre y fuerte. Empecé a tocar el acordeón con ayuda de mi padre y por mi cuenta, después aprendí un poco de solfeo con 11 años - con una profesora de un pueblo de al lado - y luego tocaba por mi cuenta. En ésta época en EGB, nosotros no teníamos la asignatura de música en la escuela y en 1º de BUP solo tuve acceso a Historia de la música. 

Una vez que me aceptaron en el postgrado, tenía mucho miedo de no dar el nivel. De no tener suficiente formación musical. Pero todo fue bien. Con lo que yo sabía era capaz de improvisar, de apoyar lo que tocaban otros, y de interpretar. Durante estos tres años, fue algo crucial para mí, el atreverme a realizar una terapia personal – con una terapueta Gestalt - . Mi profesor y supervisor Patxi, me lo recomendó, porque detectó que yo tenía ciertos “enganches” personales, ciertos problemas emocionales que no estaban cerrados, y que podían ser negativos para mi trabajo, ya que corría el riesgo de no separar lo que era del cliente de lo que era mío. Por lo que mi formación se completó con un trabajo psicoterapéutico personal, muy duro, pero muy enriquecedor. Gracias a él mi trabajo en la escuela y en las sesiones de musicoterapia mejoró. 

Poniendo distancia a eso, sabiendo cuál era mi enganche personal en algo, pude trabajar realmente con el niño, y tratar sus verdaderas necesidades. Esto me sirvió tanto para dar mis clases de música como para mis intervenciones musicoterapéuticas. Concluyendo: en mi opinión, un buen musicoterapueta tiene que tener tanto formación en música, como en musicoterapia y sería recomendable, en mi opinión, realizar un proceso terapéutico propio, con el que saber qué es personal y qué es del paciente, con el objetivo de no hundirte con él, de no hacer tuyo lo suyo o viceversa, ya que esto es muy peligroso. No sería una correcta intervención. Al hablar de sentimientos y emociones, puede quedar una herida abierta en el cliente, si no se sabe poner cada cosa en su sitio y cerrar bien cada sesión y todo el proceso en sí.

“YouTuber”, un manual para convertirse en una joven estrella del vídeo en internet

Los youtubers han sido el gran boom comunicacional de 2016 en todo el mundo. Estos adolescentes que crean vídeos originales y los difunden por internet han alcanzado gran popularidad e incluso algunos se han hecho con importantes cantidades de dinero.

Algunos de ellos han conseguido fama como personajes populares y entre todos han dado lugar a un mundillo nuevo y original: ser un youtuber es hoy un sueño para muchos adolescentes de los que van a todas partes con el móvil en la mano.

Lo mejor de todo es que este sueño es alcanzable. Para ayudar a hacerlo posible está “YouTuber. Cómo crear vídeos de impacto y triunfar con ellos en internet”, que es el manual práctico para todo aquel que desee ser un youtuber . Acompaña al lector a través de todos los procesos de creación, producción, edición y difusión de un vídeo de internet y le descubre los medios técnicos imprescindibles que esa tarea conlleva.

A través de ejemplos prácticos y descripciones graduales, “YouTuber” permite que alguien que apenas sabe hacer un vídeo rudimentario con el móvil aprenda a grabar, editar y publicar piezas audiovisuales de calidad considerable.

Para que el lector sepa dónde va a meterse, la obra describe con amplitud el ambiente de los youtubers, y explica el porqué del éxito de los más famosos de ellos. Así, uno puede percibir algunos de los motivos que han hecho que chicos y chicas que apenas han cumplido 18 años hayan alcanzado una popularidad más que notable.

Además, “YouTuber” da información sobre la manera de monetizar los vídeos, de situarlos en las plataformas que permiten su comercialización y de qué cantidades pueden esperarse obtener de su popularización. Con ello, el youtuber incipiente puede organizar la difusión de sus vídeos para tratar de hacer de ellos una fuente de ingresos.

“YouTuber” es, además de todo esto, un completo manual de producción audiovisual para principiantes. Con su ayuda, el lector aprende a dejar de ser un aficionado más o menos intuitivo para hacerse con el conocimiento de las técnicas de producción que emplean los profesionales, adaptadas a su situación, de modo que las habilidades aprendidas le servirán para ir más allá del mundo youtuber, de modo que la obra sirve como manual de aprendizaje audiovisual integral.

YOUTUBER. Cómo crear vídeos de impacto y triunfar con ellos en Internet. Gabriel Jaraba Ed. Redbook. 144 págs.

“YouTuber”, un manual para convertirse en una joven estrella del vídeo en internet

Los youtubers han sido el gran boom comunicacional de 2016 en todo el mundo. Estos adolescentes que crean vídeos originales y los difunden por internet han alcanzado gran popularidad e incluso algunos se han hecho con importantes cantidades de dinero.

Algunos de ellos han conseguido fama como personajes populares y entre todos han dado lugar a un mundillo nuevo y original: ser un youtuber es hoy un sueño para muchos adolescentes de los que van a todas partes con el móvil en la mano.

Lo mejor de todo es que este sueño es alcanzable. Para ayudar a hacerlo posible está “YouTuber. Cómo crear vídeos de impacto y triunfar con ellos en internet”, que es el manual práctico para todo aquel que desee ser un youtuber . Acompaña al lector a través de todos los procesos de creación, producción, edición y difusión de un vídeo de internet y le descubre los medios técnicos imprescindibles que esa tarea conlleva.

A través de ejemplos prácticos y descripciones graduales, “YouTuber” permite que alguien que apenas sabe hacer un vídeo rudimentario con el móvil aprenda a grabar, editar y publicar piezas audiovisuales de calidad considerable.

Para que el lector sepa dónde va a meterse, la obra describe con amplitud el ambiente de los youtubers, y explica el porqué del éxito de los más famosos de ellos. Así, uno puede percibir algunos de los motivos que han hecho que chicos y chicas que apenas han cumplido 18 años hayan alcanzado una popularidad más que notable.

Además, “YouTuber” da información sobre la manera de monetizar los vídeos, de situarlos en las plataformas que permiten su comercialización y de qué cantidades pueden esperarse obtener de su popularización. Con ello, el youtuber incipiente puede organizar la difusión de sus vídeos para tratar de hacer de ellos una fuente de ingresos.

“YouTuber” es, además de todo esto, un completo manual de producción audiovisual para principiantes. Con su ayuda, el lector aprende a dejar de ser un aficionado más o menos intuitivo para hacerse con el conocimiento de las técnicas de producción que emplean los profesionales, adaptadas a su situación, de modo que las habilidades aprendidas le servirán para ir más allá del mundo youtuber, de modo que la obra sirve como manual de aprendizaje audiovisual integral.

YOUTUBER. Cómo crear vídeos de impacto y triunfar con ellos en Internet. Gabriel Jaraba Ed. Redbook. 144 págs.

Krisha: Que se valore lo que hay detrás de una canción.

¿Cuál es la primera experiencia que recuerdas con la música? 
Mi primer contacto con la música y con las cámaras fue bailando para un vídeo clip, donde conocí al productor que desarrolló mi carrera musical más adelante.

¿En que momento decidiste que querías ser cantante?
Nunca lo decidí, surgió la oportunidad, tenía claro que la música era lo que más me gustaba pero no pensaba dedicarme a ello. Porque sabía que es un mundo muy difícil.
¿Qué personalidad musical crees que te influyó más en tus comienzos?
Desde pequeña siempre he cantado por Whitney Houston, o bailaba con Michael Jackson.
¿Cuáles son tus cantantes o músicos favoritos?
Whitney Houston, Beyonce, Jennifer López, Drake, Juan Magan.

¿En qué repertorio te sientes más a gusto en la actualidad?
Me consideró polifacética en la música, me gusta cambiar de estilo, me gusta cantar baladas pero también el pop o el reggaeton.


Cuéntanos, por favor, alguna experiencia o anécdota que te venga a la memoria que tenga que ver con tu voz o tu experiencia profesional.
La primera vez que vi a mis fans, con mi disco en la mano y gritando mi nombre, eso es maravilloso y recuerdo que ese día en ese concierto casi me arrancan hasta un trozo de camiseta...Vaya experiencia!!

¿Qué opinas de la situación actual de los músicos y los cantantes? 
Bueno...me parece que hoy en día no se valora al músico, y no me refiero al que coge un micro y canta si no al que compone, transcribe a mano partituras, produce, hay un trabajo brutal y eso no lo ve nadie. Y con la piratería imagínate!! Es muy difícil vivir de la música, eso antes no pasaba.

¿Qué crees que debería cambiar?
Que la gente valore el trabajo que hay detrás de una canción y no el físico de esa persona, o la ropa que lleva, si es más guapa o no. Fuera prejuicios!!!

¿Qué consejo o recomendaciones darías a los que empiezan ahora a estudiar canto?
Que todo lo que aprendan nadie se lo va a arrebatar,  es un camino largo pero maravilloso. Y que no pierdan la fe de lo que quieren conseguir.

¿Quieres añadir algo más sobre tu relación con la música?
Deciros que mi nuevo single se llama LIE TO ME junto a Lafame. Que estamos en Telecinco todos los días por la mañana en el programa de LATIN FIT y que podéis encontrarme en mis redes sociales: 

Twitter: @krishaoficial 
Facebook: @oficialkrisha
Instagram: krisha_oficial